676. ¡Acepten el sacrificio de la expiación con amor!

Mi hija. Mi querida hija. Gracias. Tu expiación beneficiará a muchos como sacrificio [ofrenda].

Mi hija. Por favor, diles hoy a Nuestros hijos lo importante que es la expiación. Acéptenla y ofrézcanla como sacrificio [ofrenda], y dejen que todo suceda con amor.

Mis hijos. Ustedes puedes hacer/dar tanto bien si aceptan expiar por otros. Especialmente los enfermos, los desamparados, los descarriados y los sin escrúpulos se benefician de ella en forma de amor en sus corazones, en forma de un “mano ayudante”, en forma de una “chispa divina e inspiración divina”, en forma de un guía y, sobre todo, en forma de conversión.

Mis hijos. Tantas personas/almas encuentran a Jesús por el amor, a través de la aceptación de expiación – su aceptación de la expiación. Ya sea que sufran por enfermedad, que sufran por estar solos, que sufran porque están perdidos o que sufran y es por eso que cometan actos sin escrúpulos, porque todo aquel que no trata al semejante con amor lleva sufrimiento dentro de sí, en su alma y esto se expresa de las formas más diversas, llegando incluso a la brutalidad [actos brutales].

Mis hijos. Acepten el sacrificio de la expiación con amor y sean uno con su Jesús.

Les doy las gracias, Mi querido rebaño de hijos, y los bendigo.

Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de Lourdes. Amén.

“La conversión es lo que se necesita para encontrar al Señor. Conviértanse, queridos hijos, o no verán a Dios. Amén.

La comunión de los santos. Amén.”