687. ¡Una de las mayores trampas del diablo es hacerlos creer que el infierno no existe! — 13.09.2014

Mi hija. Mi querida hija. Por favor, hoy diles lo siguiente a los hijos de la Tierra:

Yo, su Madre en el Cielo, estoy aquí con ustedes para que se conviertan y encuentren el camino hacia Mi Hijo, su Jesús.

Nuestro amor por ustedes es infinito, pero el tiempo que les queda para decidirse se acaba, y

por lo tanto, ¡deben convertirse para no perderse!

¡Una de las mayores trampas del diablo es hacerlos creer que el infierno no existe! Así los aleja a ustedes de la verdadera fe en Mi Hijo, porque los engaña con mentiras en las que ustedes caen.

¡Deben ver más allá de estas mentiras y encontrar a Jesús, porque si siguen viviendo en el mundo ilusorio de la bestia -¡y eso es lo que hace todo aquel que se ha apegado a lo terrenal!- no alcanzarán el Nuevo Reino de Mi Hijo y no “experimentarán” el maravilloso regalo que el Padre les ha hecho!

Mis hijos. ¡Corran todos hacia Jesús, porque solo ÉL los liberará del pecado, la mentira, la depravación y la esclavitud terrenal y (¡) diabólica (!). ¡ÉL los redimirá y los obsequiará con la gloria del Padre!

¡Vengan a ÉL! ¡Corran hacia ÉL! ¡Déjense caer en Sus Santos Brazos y denle a ÉL su SÍ irrevocable! ¡Se convertirán en hijos alegres y felices del Señor y vivirán llenos de satisfacción y amor con ÉL a su lado!

Vengan, Mis hijos, vengan y no esperen más, porque pronto será demasiado tarde. Amén.

Su Madre en el Cielo que los ama.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.