1513. ¡Esta es una realidad! — 06.09.2025

Limpias

Mi hija. Nuestra palabra DEBE ser escuchada y puesta en práctica. Amén.

Mis hijos. Mis hijos tan amados, y es eso lo que son, amados por Mí, su Jesús sufriente de Limpias.

Mis heridas están profundamente marcadas por los pecados de su mundo, y ustedes hacen poco o nada para aliviar Mi dolor, Mis sufrimientos, pero sepan que pronto llegará el tiempo de la justicia, y entonces habrán esperado haberme servido a Mí, su Jesús, que tanto los amo, y haber saciado Mis sufrimientos y heridas, haber aliviado el dolor y el sufrimiento que ustedes, que pecan y no se arrepienten, Me han causado, y ustedes gemirán como niños pequeños o como ganado al que se le causa dolor y Yo no podré seguir concediéndoles Mi misericordia, porque ese tiempo habrá terminado entonces y la justicia los alcanzará, y serán juzgados según sus obras y fechorías, según sus esfuerzos y omisiones, y no podrán decir nada contra todos los ‘cargos’, ni podrán justificarlos y los alcanzará el justo castigo por todo lo bueno que han omitido y por todo lo malo que han hecho, en palabra, en obra, en malos pensamientos y tentaciones.

Y el diablo se alegrará y se regocijará, porque han caído en su trampa, no han querido escucharme a Mí, a su Jesús, (¡) ni confiar en Mí (!), (¡) han despreciado los mensajes de Mi Santísima Madre María que les fueron dados para su bien y la salvación de sus almas (¡), (¡) no han vivido los mandamientos del Padre (!), no han creído en Mí, y ahora miren adónde les ha llevado eso hijos amados, y es eso lo que son, pero aún tienen una oportunidad de convertirse, de dar marcha atrás y de ofrecer reparación.

Así que aprovéchenla antes de que termine el tiempo de preparación, porque sufrirán, hijos amados, y es eso lo que son, sufrirán eternamente si ahora no escuchan a Nuestra palabra en estos mensajes, si siguen viviendo lejos de la Verdad Divina y de Mí, su Jesús, que Yo soy su Salvador y que les doy como última oportunidad el Aviso, donde verán lo que hicieron mal, el dolor y el sufrimiento que causaron, y donde podrán convertirse en este instante a Mí, a su Jesús. Amén.

Los amo mucho.

Aprovechen los últimos días de la preparación y vengan a Mí, a su Jesús, que los llevaré al Padre, su Creador en el Cielo. Amén.

Mi Nuevo Reino está listo, pero solo estará abierto a aquellos que Me aman verdaderamente.

María de la Preparación Divina de los Corazones conoce la puerta del Reino de los Cielos y sabe a quién está abierta y a quién cerrada. No podrán hacer nada si no están preparados para Mí. La puerta permanecerá cerrada para ustedes y el camino al reino infernal se les abrirá. ¡Esta es una realidad, amados hijos, y es eso lo que son!

Así que tómenla en serio, porque quien no vuelva a Mí, a su Jesús, no entrará en el Reino de los Cielos. La puerta del Cielo permanecerá cerrada para él, y su caída será terrible y cruel.

El infierno es para la eternidad, hijos amados, y es eso lo que son. Así que elijan bien adónde quieren ir:

A la gloria del Padre por toda la eternidad o al reino infernal del diablo, que los atormentará por toda la eternidad.  

¡Conviértanse!

¡Vuelvan a Mí!

Porque solo Yo soy el camino hacia la gloria, hacia el Nuevo Reino y de vuelta a casa del Padre. Amén.

Su Jesús de Limpias, cuyas heridas están profundamente marcadas por sus pecados. Amén.