1199. ¡No acepten el signo de la bestia, ni los cambios en la Iglesia Católica! — 23.04.2018

Mi hija. Mi querida hija. Su mundo está cambiando. Ya pueden verlo. ¡No deben aceptar los cambios que ahora están comenzando, (¡) y que ya han comenzado (!) en algunos lugares!

¡Están planeando de profanar Sus Santas Misas, ¡Y ESO NO DEBE SER!

El chip, LA MARCA DE LA BESTIA, (¡) están planeando de trasplantar en ustedes (!), ¡eso no debe suceder!

¡Nunca acepten la marca de la bestia, porque los llevará a la perdición! ¡Los vencerá, incluso a aquellos de ustedes que creen que fuesen lo suficientemente fuertes, fuertes en la fe, fuertes en el amor por Mi Hijo, lo suficientemente fuertes como para defenderse de la tecnología moderna y que solo la aprovecharían para sí y su ventaja, lo suficientemente fuertes como para contrarrestar en caso que (¡) a pesar de su errónea creencia de que se tratara solo de un chip (!) Nuestras predicciones se mostrasen como verdaderas, lo suficientemente fuertes como para seguir siendo incontrolables, lo suficientemente fuertes como para enfrentarse al diablo en cualquier momento – Mis hijos, la lista de sus «excusas» para la aceptación del chip es largo y parece infinito cuando se trata, especialmente aquí y ahora, de creer en Nuestra palabra Y DE CUMPLIRLA!

PERECERÁN, amados hijos, si aceptan el chip porque ése contiene la marca del maligno, y quien lo acepte será vencible. ¡Se perderá y Mi Hijo no puede hacer nada por él! Con la aceptación del chip entrarán en una alianza con el demonio, estén conscientes de ello o no. Estarán expuesto a él, a él y a su élite, y se convertirán en sus títeres.

Así que escuchen Nuestra Palabra y estén advertidos, amados hijos, porque el diablo trabaja con astucia y traición, hace trampa y nunca les dice la verdad. ¡Todo lo que viene de él son falsedades presentadas en verdades parciales para que caigan en su trampa!

Estén advertidos, amados hijos, porque el juego malvado ya ha comenzado, y el que lo juega se perderá. Así que, no acepten el chip, la marca de la bestia, ni los cambios en la Iglesia Católica.

El cuerpo de Cristo, de Mi Hijo, está siendo profanado. Él está siendo profanado y ¡ay de aquellos que dejan que esto suceda y que miran hacia otro lado, se les dice: ustedes son tibios y traicionan a Jesús! ¡No valen la pena ser llevados al Nuevo Reino!

¡Deben luchar, hijos Míos, luchar por su Jesús! ¡No permitan que Su Iglesia sea profanada, sino levántense y párense por ÉL, por su Redentor!

Tan pronto que sea profanada la Sagrada Eucaristía, comenzarán tiempos más difíciles para Nuestros hijos. Por lo tanto, levántense ahora y oren, hijos Míos.

Oren y supliquen al cielo, ¡que el Padre tenga misericordia! Siempre pidan que se acorte el tiempo del fin y oren por mitigación, amados hijos. ¡La élite tiene planes malvados con ustedes, y solo con sus oraciones de todos ustedes el Padre retendrá lo peor!

¡Así que oren, hijos Míos, oren y levántense por Jesús, su Jesús! Amén.

Con profundo amor me despido,

Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.

Su mundo está muy mal, amados hijos, y es eso lo que son, y solo a través de la oración y la penitencia, la conversión y la lealtad a Mi Hijo podrán resistir. Amén.

Los amo mucho. Amén.

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Josep de Calassanç:

Los hijos son su futuro. Cuídenlos y enséñales acerca de Jesús y los mandamientos de Dios, de Nuestro Padre, para que ellos no se pierdan. Amén.

 

Rosalie

Amen a sus hijos. Ámenlos SIEMPRE. AMEN.