1400-29. Parte 2, Libro de Juan, Epílogo de Jesús y Dios Padre

Epílogo (2ª parte)

Jesús

El Aviso: es la purificación completa del alma, en la que nada permanece oculto o escondido. Para aquellos que han «reprimido» su conciencia, por la gran culpa del pecado que llevan consigo, esta purificación sacará su conciencia de los -sus- abismos, y les sobrevendrá un dolor, un tormento, una angustia y una pena indecibles, indescriptibles, (falta de aliento, horror, conmoción).

Dios Padre

El Aviso es la purificación del alma. Quien la acepte no se perderá. Amén. Díselo a los hijos de parte Mía, de su Padre en el Cielo y Jesús, su Salvador y María, la Santísima Madre de Dios. Amén.

1400-28. Parte 2, Mensaje de Juan, el 27.03.2023 en el Lugar Santo

El 27.03.2023 en el Lugar Santo

Mensaje de Juan

Mi hija. Escucha y escribe y mira lo que Yo, tu Juan, te traigo hoy:

El Santo Ángel del Señor y Padre Me ordenó revelar este librito al final de los tiempos. Es el último mensaje de la segunda parte y los hijos deben ahora estar preparados para lo que se ha dicho.

Mi hija. El Aviso será el mayor acontecimiento de la Divina Misericordia jamás visto, y los hijos del final de los tiempos DEBEN reconocerlo y aceptarlo como tal.

Ayer sentiste el gran dolor de los hijos, su sufrimiento, su agonía de alma y sin embargo esto era sólo una parte muy pequeña de lo que tendrán que sufrir estos hijos que experimentarán la ausencia de Dios. Lloraste mucho durante esta segunda parte del libro, pero desgraciadamente tampoco esta vez se despertarán todos los hijos, Mi hija.

También fue muy doloroso para Mí verlo y Me sentí muy triste. El ángel Me dijo que ahora ningún hijo podría alegar que no había sido advertido, pues todo hijo del hombre «sufrió» el gran Aviso del Señor y debería haberse convertido. Así Me lo dijo el ángel.

Pero el maligno se chuleará, esto Yo, su Juan, se lo digo hoy, y tendrá preparadas explicaciones que muchos hijos aceptarán por tibieza, pero, amados hijos, ésta será su perdición.

Quien no aprenda del Aviso, a él Jesús no vendrá en su ayuda pues una vez más LO ha rechazado a ÉL, su Salvador y no se ha preocupado por ÉL.

Hijos, hijos, ¡deben despertar! El Padre es un Padre misericordioso y anhela el regreso de ustedes, de todos Sus hijos.

Por profundo amor ÉL los creó, a cada uno de ustedes, pero miren cómo LO están pisoteando y qué indiferencia LE están mostrando.

ÉL que es Todopoderoso les dio Sus Santos Mandamientos en tiempos de Moisés, pero ¿quién de ustedes los está guardando?

Su mundo sería un lugar hermoso si todos ustedes los guardaran (los mandamientos).

Mi hija. Diles a los hijos que deben estar preparados para todo lo que ahora se ha revelado aquí. Es para su salvación y sólo aquel que acepte, reconozca, se convierta y ponga en práctica lo que se ha dicho [aquí] será elevado.

Mi hija. El Nuevo Reino del Señor está preparado.

El tiempo que les queda en esta tierra tal como la conocen es corto. Vendrá una gran limpieza, pero antes de esto el anticristo todavía hará estragos.

En la tercera parte del libro Me hablará el Padre.

Prepárense, porque se avecinan tiempos desagradables, ¡pero recuerden Nuestras Palabras y oren, oren y supliquen!

El Padre protege a cada hijo que esté verdaderamente con Su Hijo. Así que entréguense completamente a Jesús y no se conviertan en seres tibios que al final de los tiempos caigan en el infierno como las alimañas que vi.

¡Sólo Jesús es el camino! No hay otro. Amén.

Yo, su Juan, volveré a informarlos, pero por ahora prepárense para lo que se ha dicho.

El Padre Me instruirá cuando esto continúa y puedo darte, Mi hija, más revelaciones.

Escuchen la Palabra del «Cielo» porque se lo es dada para que no se pierdan y puedan permanecer firmes hasta el final. Amén.

Ahora vete y compártelo con los hijos del final de los tiempos. Yo, tu Juan, te doy las gracias. Vuelve más tarde. Te llamaremos. Amén.

Tu Juan. Apóstol y «favorito» de Jesús. Amén.

— Fin de la Parte 2 —

1400-27. Parte 2, Mensaje de Juan, el 25.03.2023 en un Lugar Santo

El 25 de marzo de 2023 en un Lugar Santo

Mensaje de Juan

Mi hija. Mi tan amada alma tierna que eres. Yo, tu Juan, te doy las gracias. Así que escucha ahora lo que el Santo Ángel Me dijo, mostró y explicó:

Juan, Mi amado hijo. El Padre Me instruyó que te dijera lo siguiente:

Tu libro que estás escribiendo es pensado para el tiempo al final de este tiempo. Así que guarda todo lo que te digo escondido en lo profundo de tu corazón. Habla solo en códigos sobre el tiempo del fin, pero guarda todo lo demás para ti hasta que llegue el tiempo del fin. No hagas preguntas sobre esto, Mi hijo. Recibirás instrucciones precisas. Así que escucha ahora y ve, porque todavía hay mucho que informar. Yo, tu ángel del Señor y Padre, te lo digo. Amén.

Mi hija. Yo, tu Juan, estaba confundido, pero no se Me permitió hacer preguntas sobre esto. Entonces, el ángel por supuesto Me ayudó a entender todo, pero al principio Yo estaba muy cuestionando, es decir, muchas preguntas pasaron por mi cabeza. Pero Me quedé en silencio como el ángel Me decía y seguí sus instrucciones.

Vi, Mi querida hija, cómo la humanidad se convirtió en esclavos de los malvados y tuvo que trabajar duramente. Al principio los vi como encadenados, todos estaban vestidos uniformes. Pero no eran cadenas ordinarias (de convictos), sino que estaban «encadenadas», «unidas» por el chip digital y las torres de las que ya te hablé.

Vi todo muy oscuro y gris, sin colores. Esto reflejaba la condición desastrosa de esta pobre gente tecnocratizada. Estaban en grandes campamentos y no quedaba nada bueno, nada que valiera la pena vivir, nada para disfrutar. Estas personas estaban adiestradas para satisfacer las necesidades de la élite malvada y «vegetaron» como seres vacíos, duramente trabajando y sin libertad, sin esperanza, sin alegría, como muertos en un cuerpo vivo; fue horrible de ver.

Vi, Mi querida hija, que durante el «gran Aviso», el regalo misericordioso del Padre y del Hijo para todos los hijos de los hombres, ¡el Padre se apartó de los hijos de los hombres que no estaban verdaderamente establecidos y anclados en Su Hijo!

Hijos, fue un estado cruel para las almas de estos hijos, y sufrieron, sufrieron, sufrieron, un vacío total que fue más doloroso y cruel y tormentoso que todos los pecados no arrepentidos y toda la culpa del pecado que habían asumido.

Mi hija. Mi querida hija. ¡Fue el tormento más cruel de todos cuando Dios se apartó de ellos!

¡Estas almas sufrieron total oscuridad y vacío, una condición verdaderamente cruel!

¡La «ausencia» del Señor y Padre es tan terrible y espantoso que TODOS los hijos deberían haberse despertado en este punto a más tardar!

¡Es una especie de «anticipo» de los tormentos del infierno que estas almas impías experimentarán si no se convierten y encuentran al Señor!

¡Hijos, hijos! ¡Tomen el Aviso en serio!

¡Su sufrimiento será eterno a menos que se conviertan!

Mi hija. DEBES decirles esto a los hijos porque el dolor, el tormento, la agonía, la miseria, la ausencia del Señor y Padre es lo más horrible que Yo, tu Juan, he tenido que experimentar. No te haré pasar por esta agonía, sería demasiado terrible para ti soportarla, Mi hija.

¡Quédense todos con el Señor y aférrense a ÉL!

Deben tener verdadero amor en su corazón por Jesús y el Padre para escapar de esta dolorosa agonía.

No quiero asustarlos, pero ¡examínense, queridos hijos, examínense!

¿Es nuestro Señor Jesucristo real y verdaderamente lo más importante en ustedes y en su vida? ¡O viene primero su bienestar y luego el Señor!

¡Examínense, amados hijos, examínense! ¡La «muestra del alma» será difícil para muchos que están lejos o apartados del Señor!

Mi hija. Este es el penúltimo mensaje de la 2da parte del libro. Escríbelo y vuelve más tarde. Yo, tu Juan, te espero. Ahora vete. Amén.

Tu Juan. Apóstol y «favorito» de Jesús. Amén.

1400-26. Parte 2, Mensaje de Juan, el 24.03.2023 en un Lugar Santo

El 24.03.2023 en un Lugar Santo

Mensaje de Juan

Mi hija. Yo, tu Juan, estoy aquí, he venido a decirte lo siguiente hoy:

Mi Libro ha de ser escrito y revelado ahora a los hijos de la tierra, y esta misión tan grande el Padre te la ha confiado a ti, Mi hija. Por favor, diles a los hijos de la tierra que Mi Librito está siendo escrito para su salvación. Por favor díselo de Mi parte, de su Juan.

Mi hija. El Aviso que vi fue un gran regalo de Dios para toda la humanidad. A los hijos de la tierra se les dio este evento tan misericordioso, la iluminación de su conciencia, al final de los tiempos, es decir, en tiempo del fin, Mi hija. Cada hijo de la tierra experimentó así el «escaneo» de su alma, así lo vi Yo, tu Juan. Nada permaneció oculto aquí y todo salió a la luz y a los «ojos» de cada hijo. Pero cada hijo, por supuesto, veía sólo su propia alma. A tantos hijos vi fascinados y llenos de alegría. Se propusieron vivir sin pecado de ahora en adelante. Irradiaron alegría, aunque también sentían un gran dolor en el alma por cada pecado que habían cometido y del que no se habían arrepentido, pero su alegría era tan grande que corrían hacia Jesús con los brazos abiertos, es decir, que querían orientar su vida completamente según Su beneplácito de ahora en adelante. Fue hermoso para Mí ver esto. Ese amor tan grande, profundo y auténtico hacia el Señor Jesucristo, ¡que tanto había sufrido por todos estos hijos en la cruz y durante toda su Pasión!

Pero también vi a muchos que tenían la conciencia destrozada, es decir, que sufrían una terrible agonía del alma. Eran los hijos que no se habían preparado, y eran los que iban completamente por el camino equivocado. Esta agonía del alma que sufrieron tantos hijos asustó a algunos y se hicieron creyentes, pero en muchos encendió un odio grande y feroz contra Dios y Jesucristo. A estos hijos ya no se les podía ayudar. Todos ellos se perderían después, así Me lo dijo y mostró a Mí, su Juan, el Santo Ángel del Señor y Padre.

Muchos hijos, viendo por primera vez cuánto daño y dolor habían causado sus pecados cometidos, se avergonzaron profundamente y suplicaron perdón al Señor y Padre. Estos hijos no se perdieron, pues a partir de aquel momento se esforzaron por vivir vidas justas para Dios. Se arrepintieron [convirtieron] y centraron sus vidas completamente en el Señor.

Pero muchos hijos fueron verdaderamente «golpeaos» al ver y sentir su culpa por el pecado. Sus remordimientos los destrozaban en su interior y morían en el acto de este regalo misericordioso. También ellos eran hijos que no se habían preparado y muchos, muchos no lograron llegar a Jesús. Eso Me entristeció mucho.

Pero otros se convirtieron en el momento del «shock», y en su muerte, su fallecimiento el Señor les regaló Su misericordia tan grande, y no se perdieron. Tuvieron que hacer penitencia, mucha penitencia, Mi hija. Pero su alma no se perdió.

Los hijos que se habían preparado ayudaron a los otros que estaban totalmente confundidos e incapacitados después de este acontecimiento. Muchos rezaron. Muchos explicaron. Muchos ayudaron.

Es importante, amados hijos, que estén preparados para este acontecimiento y para el Señor Jesucristo. Este evento misericordioso es único y lo seguirá siendo, Me dijo el Santo Ángel. No se repetirá.

Al Aviso le sigue un tiempo verdaderamente terrible. Pero los hijos creyentes saben ahora que Jesús los ama.

Sin embargo, Mi hija, volvieron a haber muchos que simplemente vivieron su vida con indiferencia y sin fe. Esto era completamente incomprensible para Mí. Pero se repetía lo que había sucedido tantas veces después de los milagros del Señor y Padre, y Su pueblo se apartaba de ÉL…. Es triste que el hombre caiga tan rápidamente en su «vieja rutina» y solamente piensa en sí mismo.

Vi lo que pasó, y vi lo que les pasará a estos hijos, pero ahora es su propia responsabilidad.

La «muestra del alma», así quiero llamarlo, la iluminación de la conciencia, el escaneo del alma, ¡debería haber ayudado a cada hijo a arrepentirse!

Es triste haber visto que incluso este acto de amor tan maravilloso fue tan poco aceptado, o fue nuevamente «olvidado».

Hijos, hijos, ¡ustedes mismos están metiendo su eternidad en el reino del infierno del diablo!

Yo, su Juan, les pido: ¡Acepten este acto de misericordia y cambien! ¡Encuentren a Jesucristo y no se pierdan por el anticristo! ¡Su salvación está en juego!

Crean, Mis hijos, crean, porque Yo vi lo que pasó y ustedes se encuentran en este tiempo que Yo, su Juan, vi hace tanto tiempo.

He venido a ti, Mi hija, para que tú lo difundas en el mundo.

Los hijos deben aceptar este acto de misericordia del Señor o se perderán para siempre.

Díselo de Mi parte y de parte del Padre, porque el Padre cuida de Sus hijos.

El ángel Me mostró las cosas más terribles, pero su oración [la oración de ustedes], su conversión y su súplica los preservarán.

¡Hagan uso de [aprovechen] los regalos del Señor, pues estos les son dados para que no se pierdan, no erren, no se extravíen y entren en Su Nuevo Reino!

El tiempo apremia, Mis hijos, el tiempo apremia.

El ángel Me dijo que Mi librito será revelado al final de los tiempos. Por tanto, ¡vean en qué tiempo están viviendo y reaccionen!

Yo, su Juan, les ruego: ¡conviértanse y oren y supliquen al Padre!

Mi hija. De este mensaje a los hijos de la tierra. Deben darse cuenta de que no queda mucho tiempo. El anticristo mostrará su rostro, pero mantendrá oculto su verdadero rostro.

Yo, tu Juan, volveré a ti. La segunda parte está por terminar pronto. La tercera aún está por venir. Perseveren.

Tu Juan. Apóstol y «favorito» de Jesús. Amén.

Un ángel del Señor

Divulga esto. Es uno de los últimos mensajes de la 2da parte. Ven cuando te llamemos. Amén. Tu Ángel del Señor con Jesús, María, el Padre y muchos santos y santos ángeles presentes. Ahora vete. Amén.

Dios Padre

Hija Mía. Mi ángel ha hablado. Es importante que los hijos estén preparados. Ahora vete.

Tu Padre en el Cielo. Amén.

                                                                                  —

1400-25. Parte 2, el 24.03.2023, Visión: traición a Jesús

El 24 de marzo de 2023 recibí la siguiente visión

Visión: traición a Jesús

Consagración. Recibiendo la sagrada comunión, se me muestra y explica lo siguiente:

Se reparte la sagrada hostia. Veo el cuerpo de Cristo como se distribuye por el Padre y Su Hijo mismo a los sacerdotes y futuros sacerdotes, todos arrodillados.

Ellos reciben las hostias en sus manos, luego las levantan hacia el cielo como al Padre, pero ahí está el anticristo y el diablo con una cara horrible, espantosamente infernal, con cuernos, como una bestia desagradablemente repugnante, asquerosa, y se come estas hostias que los sacerdotes (futuros sacerdotes) le ofrecen.

                      ¡Símbolo de la traición de Jesús y del Padre en el Cielo!

Entonces la [bestia] expulsa (escupe) un fuego terrible y estos sacerdotes o futuros sacerdotes, a todos los cuales vi muy jóvenes,

                      Símbolo de la adaptación de la doctrina de la iglesia al tiempo presente.

fueran golpeados de este fuego que fue expulsado (escupido) de la bestia del infierno, el anticristo y el mismo diablo,

                      Explicación: se presentan como el padre y el hijo (Jesús), es decir, ¡imitan TODO!

y arrojados al infierno con esta fuerza de fuego, oscuro, negro y rojo, empujados hacia atrás y cayendo, derribados con toda fuerza. ¡El fuego entró en su pecho, alma y desgarró todo el cuerpo (totalmente inesperado para ellos) al infierno! Realmente no esperaban eso.

¡Falsedad! ¡Pura falsedad, mentira y traición! ¡Insidia! ¡Fraude! ¡Engaño! Quien sigue el juego perecerá de igual forma y ¡especialmente por eso! Así es como el diablo engaña a la humanidad con el anticristo y TODOS los que participan, siguen el juego, que les rinden homenaje, TODOS se pierden. No habrá recompensa como se les había prometido… Qué shock [sorpresa] para ellos…

Interpretación

Doble traición: Los «ministros de la iglesia» traicionan a Jesús. Ellos LO entregan. Colocan al ídolo (anticristo) en «su» iglesia. Pero entonces ellos mismos son «traicionados» y engañados, por el mismo engañador (el diablo).

1400-24. Parte 2, Mensaje de Juan, el 23.03.2023 en un Lugar Santo

El 23 de marzo de 2023 en un Lugar Santo

Mensaje de Juan

Mi hija. Yo, tu Juan, estoy aquí, vine para decirte y mostrarte lo siguiente.

El Santo Ángel del Señor y Padre Me mostró lo que sucederá al final de este tiempo. Él Me mostró todo el sufrimiento que se planifica infligir a los hijos de los hombres y lo que ellos se hicieron a SÍ MISMOS. Me mostró que la oración es el arma más poderosa de todas las armas, y Me explicó que los hijos de los últimos tiempos pueden cambiar su «destino», como lo vi Yo, tu Juan, a través de la oración y súplicas fervientes a Dios, el Altísimo. Estos hijos que oraron fueron protegidos en todo momento en la vida, así como en los últimos tiempos. Ellos recibieron un poder divino a través de la oración ferviente y su fe firme en Jesús, su Redentor. Se aferraron a la fe y a Jesús, y no perecearon. Ya te he dicho todo esto, pero quisiera repetirlo una y otra vez, porque el ángel Me mostró este mundo y esta protección que emanaba de su oración. Él Me dijo:

Juan, Mi hijo, debes repetirlo a los hijos de la tierra al final de los tiempos muchas veces y constantemente, porque solo, y lo repito, solo por su ferviente oración al Padre no perecerán y permanecerán firmes hasta el Señor Jesucristo vuelva.

¡Y es solo a través de sus fervientes súplicas que el Señor y Padre intervendrá y mitigará y acortará el tiempo del anticristo!

Díselo a los hijos de los últimos tiempos una y otra vez Mi hijo, ¡porque el que no ora vacilará, el que no esté anclado en Jesús seguirá al anticristo, el que no esté verdaderamente con el Señor aceptará todo lo que venga del diablo solo para sobrevivir!

Pero, Mi querido Juan, esto significará la muerte eterna para estos hijos, por eso debes seguir diciéndoselo una y otra vez.

Por eso, Mi hija, te lo repito una y otra vez: la oración cambia y los mantiene fuertes, les da fuerzas y les permite perseverar.

Díselo a los hijos de la tierra de Mí y del Santo Ángel del Señor y Padre, porque sólo, y repito, sólo a través de su ferviente oración se mantendrán firmes y fieles a Jesús. Sin embargo, sin oración cederán y perecerán.

Es importante que TODOS los hijos lo sepan y lo pongan en práctica.

Mi hija. Yo, tu Juan, vi mucho sufrimiento. Muchas familias sufrieron hambre. Los padres se quedaron sin trabajo porque no aceptaron el chip al maligno. Los excluían, mientras que los demás parecían celebrar la vida feliz y alegremente. Sin embargo, cada hijo sintió que algo era «diferente» que antes, y esto comenzó incluso antes de que apareciera el anticristo.

Mi hija. Lamentablemente, muy lamentablemente, estos hijos persiguen su bienestar más que escuchar a su corazón y cuestionar lo que están sintiendo. Si lo hicieran, descubrirían muchas verdades, pero éstas por supuesto son incómodas porque requieren un cambio en sus vidas. Así que «se» prefiere seguir viviendo como antes y hacer un compromiso tras otro. ¿Qué tantos problemas podría traer un chip digital? ¡Trae tantos beneficios! Tuve que aceptarlo o hubiera perdido mi trabajo… Excusas tras excusas solo para seguir viviendo cómodamente.

Me entristeció mucho que estos hijos no quisieran aprender nada en absoluto. Reprimieron cualquier forma de «despertar» solo para que no les resultara incómodo.

Hijos, hijos, TODOS ustedes despertarán, pero desafortunadamente muchos de ustedes demasiado tarde. ¡Si supieran acerca de la miseria y el sufrimiento que le espera a su alma, habrían escuchado sus sentimientos y habrían mirado la verdad a los ojos!

Sufrí mucho con todas estas imágenes que Me mostró el ángel. La gran mayoría de los hijos en la tierra vivieron una vida sin sentido, y eso Me puso muy, muy triste. Me hubiera gustado sacudirlos para que despertaran, pero por supuesto esto no era posible.

Mi hija. ¡Así que cuenta ahora lo que vi y escribí y comí a instancias del ángel, porque es ese tiempo [presente] que vi y los hijos de la tierra deben despertar y convertirse!

El Aviso del Señor está cerca, tan cerca, ¡y los hijos deberían aprovechar ese tan gran acto de misericordia!

Es la última oportunidad para no perderse, porque después de eso comienza el tiempo verdaderamente horrible.

Yo, su Juan, les pido: ¡conviértanse!

¡Solo así alcanzarán la Vida Eterna al lado del Señor! ¡Solo así serán verdaderamente felices, ahora y en el Reino de los Cielos! ¡Renuncien a los bienes y riquezas terrenales y recogen tesoros para la eternidad! Eso es todo lo que cuenta, Mis hijos, ¡eso es todo lo que cuenta!

Vivan con el Señor Jesucristo. Es ÉL quien los redimió, pero sólo encontrará verdaderamente la salvación quien LE dé su Sí y se entregue a ÉL.

¡Reaccionen, amados hijos! Deben convertirse, no hay otro camino.

El Nuevo Reino está cerca. Quien no se convierte se encontrará frente a puertas cerradas. Amén.

Mi hija, diles a los hijos que su vida solo vale la pena y tiene sentido a través de la conversión. Quien vive SIN el Señor está separado de la vida verdadera y eterna. Díselo a los hijos. Amén.

Tu Juan Apóstol y «favorito» de Jesús. Amén.

1400-23. Parte 2, Mensaje de Juan, el 22.03.2023 en un Lugar Santo

El 22.03.2023 en un Lugar Santo

Mensaje de Juan

Mi hija. Yo, tu Juan, estoy aquí, vine hoy a decirte, explicarte y mostrarte lo siguiente.

Mi hija. Vi un gran cisma en la Santa Iglesia de Jesús y los hijos creyentes sufrían mucho, se hicieron sufrir mutuamente, sufrían juntos y bajo el «gobierno» de los que siguen al anticristo y cumplen sus mandatos. El cisma, Mi hija, ya se ha iniciado, es decir: todo está preparado para que los verdaderos hijos se extravíen y por tanto estén guiados al infierno y muchos, muchos se perderán.

Juan Me muestra ahora muchas imágenes «terroríficas» (desagradables), que ya no tienen mucho que ver con nuestra iglesia tal y como yo la conozco:

Veo a Satanás en la forma del anticristo siendo adorado en la hostia -que ahora es profana- en la celebración de la última cena del Señor, y «hostias» están siendo servidas, pero que no han sido «consagradas», es decir, que no son el cuerpo de Jesús.

Veo mucho simbolismo en estas iglesias donde se rinde culto y adoración al anticristo, y veo y siento, -como- una euforia de los «celebrantes». Están completamente bajo el hechizo del anticristo y sus desviaciones satánicas.

Veo cómo hay mucha pelea incluso antes de que Juan me muestre lo que acabo de describir. Los creyentes se pelean entre sí y los verdaderos hijos fieles a Jesús se alejan. Así, en la iglesia sólo quedan los perdidos. Veo que también hay «supervisores». Estos son los que se llevan a los verdaderos creyentes [hacia fuera de la iglesia].

Veo las verdaderas iglesias cerradas. Ya no se celebran misas.

Veo como «jefe» de la iglesia se deja celebrar y dando la bienvenida al anticristo entre medio de gente vitoreando. Veo esto en una gran plaza (creo que sería la plaza de San Pedro). El falso profeta (en un coche, papamóvil) es vitoreado y acompañado por los «fieles» y sus seguidores y el anticristo se me muestra como una copia de Jesús, ¡¡¡pero nada celestial!!! rodeado de como apóstoles, que por supuesto no lo son. Es una alegoría, me explica Juan: el falso profeta lleva a los creyentes «al cuchillo» (entrega a los creyentes al anticristo), y el anticristo engaña y se muestra como Jesucristo (como el que no es).

Mi hija. Este es el gran engaño y el gran montaje: La traición a los hijos creyentes.

Juan también me mostró cómo todavía hay verdaderos sacerdotes que celebran el Santo Sacrificio de la misa en secreto. Sin embargo, se trata sólo de una pequeña minoría. Me lo mostró por medio de un pequeño y humilde sacerdote. Pero la «traílla» estaba entusiasmada con el falso profeta y el anticristo. (Nota: nos esperan tiempos realmente malos. Sí, Mi hija. Así son las cosas, por desgracia.)

Mi hija. En el Vaticano, yo, tu Juan, vi mucha oscuridad. La oscuridad se produjo porque el diablo se había colado. Sus secuaces se habían infiltrado y se extendían cada vez más. Ellos poco a poco fueron ocupando puestos clave. Sólo así fue posible que el falso profeta tomara su lugar como cabeza de la Santa Iglesia Católica Apostólica. Incluso los papas anteriores a él tuvieron su parte de dificultades. Ustedes no creerían todo lo que está sucediendo, ha sucedido y existe en el Vaticano. Los adoradores del diablo ganaron más y más poder hasta que finalmente lo «gobernaron», el Vaticano. Fue muy triste para Mí ver esto, porque todo lo que Jesús había dejado atrás fue destruido y pisoteado. Hay mucho simbolismo incluso en el Vaticano, y los rituales oscuros, la adoración satánica, tienen lugar en paralelo con lo que se muestra al «mundo». Ellos se sienten grandes y poderosos, eufóricos y creen que lo controlan todo, pero en ningún momento cuentan con la intervención del Señor y Padre. Cuando el Santo Ángel Me dijo esto, después de todas las imágenes terribles y que para Mí eran tan tristes, pude volver a respirar, ya que Me estaban como cortando el aire.

Mi hija. Yo, tu Juan, te digo y muestro y explico todo esto para que los hijos de la tierra se preparen y no se pierdan. Vi con qué habilidad lo había montado todo esto el falso profeta, y vi con qué exceso de confianza tenía a tantos hijos siguiéndole. Ninguno de ellos vio lo falso que era en realidad….

Pero ese no es todo el engaño. Mucho fingirán ellos, él, el falso profeta, y el anticristo. ¡Realizarán así llamados milagros ante los ojos de muchos y los medios de comunicación! Son listos, astutos y completamente satánicos, así que deben saber discernir. El ángel Me dijo cómo los hijos pueden reconocer y distinguirlo de Jesús. Me dijo:

Un hijo verdaderamente creyente y fiel a Jesús sabe, porque lo ha experimentado, que Jesús es el amor misericordioso y que todo lo abarca. ¡Este amor sostiene! ¡Este amor trae alegría y dicha divina! Calma y es suave. Hace el bien y libera. ¡Nunca causa sedición! Nunca causa euforia. Nunca te pone en el estado: ¡quiero, necesito más! Pero esto es lo que hace el anticristo. Él es adictivo, pone a la gente en euforia y sedición. Así será posible que los hijos creyentes caigan en pelea. Lo siguen porque quieren más. ¡Su ego está siendo apelado!

Jesús regala satisfacción, amor, paz, consuelo. Uno se siente a salvo con ÉL y a través de ÉL, Su amor misericordioso que todo lo abarca.

El anticristo es adictivo y eufórico. Él es como una adicción y esto nunca es bueno.

Así que dile a los hijos, Mi querido Juan, que deben distinguir:

Dicha o euforia

Jesús o el anticristo

Amor u odio

Satisfacción o adicción.

Mi hija. Yo, tu Juan, espero que los hijos de la tierra aprendan a discernir. Te seguiré instruyendo, pero es suficiente por hoy. Todavía hay muchos «puntos» que reportar, pero descansa por ahora. Volveré de nuevo a ti, Mi hija.

Tu Juan. Apóstol y «favorito» de Jesús. Amén.

Cisma: La secesión de la Santa Iglesia Católica Apostólica de Jesús en la anti-iglesia (contra-iglesia) del anticristo (adversario de Jesús).

¡Qué traición!

1400-22. Parte 2, Mensaje de Juan, el 20.03.2023 en un Lugar Santo

El 20.03.2023 en un Lugar Santo

Mensaje de Juan

Mi hija. Yo, tu Juan, estoy aquí, he venido para que Mi Libr(it)o siga siendo escrito por ti, Mi hija, por ti. El Padre te ha elegido, por eso Yo, tu Juan, te lo confiaré todo.

Mi hija. El ángel Me mostró escenarios malos y terribles, pero no dejaba de repetirme que los hijos del final de los tiempos deben rezar mucho para que lo peor se contenga. Me dijo: Juan, Mi hijo, escribe lo que yo, el Ángel del Padre, te voy a explicar ahora:

Los hijos del fin de los tiempos tendrán mucho que sufrir. Todo esto se ha producido y ha sido posible debido a la gran apostasía de los hombres durante un período de tiempo muy largo.

Ya has visto mucha aberración y lo que los hijos se hicieron a sí mismos, has visto su vacío (interior), y has visto cómo lo llenaron no con el Señor sino con cosas transitorias. Has visto muchas desviaciones, asesinatos de vidas inocentes y muchas cosas más, que no quiero repetir ahora aquí, pero también has visto que aún había hijos orantes, hijos fieles de Jesús, y has visto lo poderosa y cambiante que era la oración y su súplica y cómo Dios, Nuestro Señor, velaba por ellos y no los dejaba solos. Has visto que ninguno de estos hijos se perdió, pues todos fueron elevados o bien al mismo Dios, es decir, al Reino de los Cielos, o bien a su Nuevo Reino.

La gran apostasía y la autoglorificación (egoísmo) de los hijos del final de los tiempos hicieron posible que el diablo ganara más y más poder sobre ellos mismos y sobre la tierra, el mundo en el que vivían. Se hizo más y más influyente y colocó a sus secuaces en todas las posiciones influyentes. De esta manera se aseguró de que ganaba y finalmente tenía el control sobre todo y sobre todos.

Sus secuaces eran bien recompensados, pues quien le servía fue pagado y recibió regalos generosamente. Su [del secuaz] reputación crecía con cada nueva vileza. Así, cada vez más de sus sirvientes se catapultaron a una situación incómoda y quedaron muy enredados y ya no podrían, si hubieran querido, salir de esas garras satánicas.

Entre ellos, los secuaces, también había muchísimo sufrimiento, sólo que ellos se lo habían buscado, porque seguían el juego. Sin embargo, ya no se les permitía salir. Muchos que lo deseaban, sufrieron repentinos e inesperados paros cardíacos, todo tipo de accidentes mortales o murieron de «enfermedades». Detrás de todo esto, sin embargo, estaba el príncipe de las tinieblas, pues había colocado a sus «atormentadores de hombres» en todos los ámbitos de su orden mundial.

Finalmente se ingresó a la Santa Iglesia, la Iglesia de Jesús. Esto también ya había ocurrido antes del tiempo del fin de los tiempos. Hábil y astutamente, no sólo esconde allí a sus «atormentadores de hombres», sino que así también tiene el cetro en su mano sobre los hijos que aman a Jesús. Paso a paso cambia «cosas» que no deberían haber sido cambiadas. La Palabra, las celebraciones de la misa, oraciones omitidas…. es una lista cada vez más larga, y el gran engaño y el mayor montaje puede tener éxito aquí a través de este movimiento tan fabulosamente satánico suyo (del diablo): extraviar a los hijos del verdadero Señor, Jesucristo, para que TODOS perezcan y no encuentren su camino a la eternidad del Señor. Ahora Dios Padre me explica: y es aquí, Mi hija, donde los hijos de la tierra (ustedes) se encuentran ahora mismo (hoy en día). Por lo tanto, hijo Mío, no debes publicar el libro que te estoy mostrando y explicando antes del final de los tiempos. Si esto se hiciera en un tiempo anterior, ¡los hijos del final de los tiempos no sabrían que son hijos del final de los tiempos!

Esto es lo que el Santo Ángel Me dijo, Mi hija. Yo ya no entendía el mundo.

Estaba convencido de que con el gran acto de amor de nuestro Señor Jesucristo el mundo se convertiría en un mundo mejor, y ahora el Santo Ángel Me mostraba todo esto y Me lo explicaba. Cuándo, Me pregunté, sería ese momento, y cómo, Me pregunté, podría entonces darlo a conocer. Pero el ángel Me dijo palabras tranquilizadoras, y así guardé todo en Mi corazón.

Todavía no sabía lo que el ángel Me pediría al final de la realización del librito.

Mi hija. Cuenta todo esto a los hijos de la tierra, pues ha llegado el momento del que habló el Santo Ángel.

Yo, tu Juan, te lo pido y Yo, tu Juan, volveré para seguir instruyéndote. Mantente fuerte.

Tu Juan. Apóstol y «favorito» de Jesús. Amén.

1400-21. Parte 2, Mensaje de Juan, el 17.03.2023 en un Lugar Santo

El 17 de marzo de 2023 en un Lugar Santo

Mensaje de Juan

Mi hija. Yo, tu Johannes, he venido para decirte y mostrarte lo siguiente.

El mundo en el que ustedes se encuentran, Mi hija, está llegando a su fin, es decir, mucha miseria esperará a los hijos de la tierra, por un lado por el Anticristo y la élite del maligno, por otro lado por la mano castigadora del Señor y Padre.

Ese tiempo viene, Mi hija, está muy cerca.

Mi libro, que escribí y comí por instrucción del ángel, contiene las verdades de su tiempo presente y del que está por venir.

Sin embargo, Mi hija, ¡su oración PUEDE contrarrestarlo y te traerá mucha mitigación si la usan!

Por eso hoy se revela Mi libr(it)o, porque si hubiera sido revelado antes, ¡los hijos no orarían!

¡Y es importante que lo hagan!

Mi hija. ¡El ángel Me mostró lo que sucede cuando no hay oración y lo que se puede mitigar cuando los hijos oran con fervor y suplican al Padre!

Por eso lo repito una y otra vez: ¡Usen la oración y provoquen cambios [con la oración]!

El tiempo del anticristo ha llegado, y será un tiempo difícil para todos los hijos.

Vi el gran engaño y vi la gran trampa. Vi cómo él seducía a la gente de todas las formas y modos imaginables, y vi qué terrible carisma tenía y como atrajo a los hijos de la tierra.

Los vi (a los hijos de la tierra) siguiéndolo y los vi vitoreándolo. Los vi adorándolo por lo que no es y vi el resultado devastador para los hijos cegados.

Vi como más y más personas fueron atraídas hacia él, y vi que aquellos hijos que no se «alinearon» fueron secuestrados y asesinados.

Vi que “ellos” [la élite] querían que rindieran homenaje al anticristo amenazando con privaciones y fuerza, pero el que lo hiciera luego de igual forma fue torturado y asesinado. Es que ya lograron lo que querían…

Fue horrible ver el sufrimiento que estas personas tuvieron que soportar, y fue horrible ver como los secuaces del anticristo trataron estas personas, la risa, la humillación, el tormento… ¡Hijos, no será fácil para ustedes!

Sufrí mucho al ver esto, porque nada parecía haber cambiado. Jesús, nuestro Redentor, acababa de andar por este camino de tormento, y ahora vi que sus seguidores tampoco lo tendrían más fácil.

Le pregunté al ángel ¿por qué? Y me respondió: porque el diablo odia a Jesús y trata de ponerse por encima de Dios, ¡pero esto nunca será!

Yo estaba muy triste y horrorizado por lo que el ángel Me había mostrado. Tanto amor, tanto sufrimiento. Estaba confundido y no podía realmente creerlo. El ángel dijo:

Al final de los tiempos vendrá Jesús. Él se llevará a aquellos que LE son verdaderamente fieles. El Padre intervendrá y Su mano castigadora limpiará la tierra. Así que no estés triste, porque el que está verdaderamente con Jesús nunca se perderá. Vivirá para siempre y estará con Jesús. Todos los mártires serán elevados y ganarán el Reino de los Cielos, y aquellos hijos que soporten el final entrarán en la Nueva Jerusalén.

Será un tiempo hermoso para ellos, porque el Señor ha dispuesto y preparado todo para ellos allí en amor misericordioso y orden divino.

Es importante, Mi hijo, que siempre guardes esto en tu corazón y recién lo des a conocer al final de los tiempos. Llegará ese momento y el Padre te lo instruirá, pero primero DEBES guardar todo en tu corazón.

Todavía no entendía muy bien qué quiso decir el ángel con eso, pero Me lo revelaría en un momento posterior, porque aún tenía que ver más «cosas».

Mi hija. El tiempo del anticristo ha comenzado, pero todo hijo que esté verdaderamente con el Señor y Redentor no tiene nada que temer.

Por favor escribe Mi Libro porque los hijos deben saber esto para poder perseverar. Amén.

Te lo agradezco mucho.

Tu Juan. Apóstol y «favorito» de Jesús. Amén.

1400-20. Parte 2, Mensaje de Juan, el 16.03.2023 en un Lugar Santo

El 16 de marzo de 2023 en un Lugar Santo

Mensaje de Juan

Mi hija. Mi criatura tan delicada. Yo, tu Johannes, he venido para instruirte más.

Mi hija. Lo que el ángel Me mostró para el tiempo del fin antes de que Jesús viniera, antes de Su Segunda Venida, Su regreso, Mi hija, es lo que está sucediendo en su mundo hoy.

Ustedes están viviendo el final de los tiempos, queridos hijos, y tienen y tendrán que soportar muchos sufrimientos.

Mi hija. El ángel me mostró las familias y criaturas de los últimos tiempos, es decir, Yo, tu Juan, vi lo que estaba pasando en muchas familias al final de los tiempos, pues el ángel Me mostró lo que hacía el diablo para separarlas y hacerlos pelear.

Vi mucha violencia, muchas lágrimas, tanta ira e incomprensión. Vi como sufrieron los niños y vi como sufrieron a los esposos. Vi al diablo introduciendo una gran cuña en las familias y vi que esa cuña «desapareció» a través de la oración dentro de las familias.

Se disolvió y hubo paz y amor, pero el diablo siguió viniendo a ellos y se necesitaba mucha oración, y eran las oraciones juntos y el ir a misa juntos lo que mantenía unida a la familia.

El Santo Ángel Me mostró una y otra vez el gran poder y la fuerza de la oración ferviente.

Vi muchas criaturas, Mi hija. Estaban muy perdidos. Muchos estaban solos a pesar de estar rodeados de familias y círculos de amigos. Pero su interior estaba vacío. Buscaron llenar ese vacío. Hubo muchos, muchos de estos, pero hoy estoy hablando de aquellos que querían llenar su vacío con desviaciones, mutilaciones y alteraciones sexuales. ¡Se “deleitaron” en sus desviaciones, y para Mí eran como extraviados que se perdían cada vez más! ¡Insistían en que ahora serían felices y vivían una clase especial de aberración, antinatural y NO creada por Dios! Exigían cada vez más derechos y esto en el espíritu del maligno, porque él usaba su aberración y desviaciones para que se distanciaran cada vez más de Dios y para que presentasen estas desviaciones a otros como correctos y buenos y como si les apoyaban [las desviaciones].

Lo que el hombre hizo con su cuerpo era inimaginable para Mí, y le pregunté al ángel cómo era posible. Pero el ángel Me mostró cada vez más las perversidades y cómo la lujuria y los impulsos estaban por encima de la razón divinamente dada y como -sí- gobernaban a estas criaturas. Fue terrible para Mí ver esto, y el ángel ahora Me respondió:

Todo esto, Juan Mío, Me dijo, se ha hecho posible porque el hombre se ha vuelto auto justificante [vanidoso]. Dejó de escuchar al Señor y Creador y se puso a sí mismo en primer lugar. Se alejó de Dios, su Creador, y no quería tener nada que ver con Jesús. Lo descartó como una historia «bonita» y se volvió auto complaciente. Solo por esto todo aquello fue posible, porque donde Dios ya no está, reina el caos y la confusión, Mi hijo. Esto Me lo dijo el Santo Ángel del Señor y Creador.

La creación, Mi hija, está perfecta y tiene un diseño único. Pero el hombre, el que se ha apartado de Dios, así como sus hijos y descendientes, anda por este mundo perdido y sin rumbo. Se deleita en los impulsos, en las adicciones, en las desviaciones y muta en un ser que se aleja cada vez más del origen divino. Vive en y sólo para el aquí y ahora y llena su vacío interior con precisamente estas desviaciones, impulsos y adicciones, así como con todo lo que es transitorio.

Él no vive en la unidad de Dios, Mi hija, y perecerá como los paganos. El que prefiere este mundo a la eternidad se ha separado a sí mismo de la eternidad en el Reino del Señor. Él mismo lo hizo. Todo esto Me mostró y explicó el Santo Ángel.

Dios es misericordioso, pero el que se aparta conscientemente, el que no quiere saber nada de él, el que se entrega al mundo, a lo transitorio no encontrará el camino al Reino de los Cielos. Está extraviado. Es la triste verdad que les traigo, pero les digo:

Oren por la conversión, porque incluso el más extraviado de ustedes NO se perderá a través de la conversión, pero su conversión es un requisito previo para esto.

Yo, su Juan, les traigo hoy este mensaje. Oren por ustedes y oren por sus seres queridos, porque a través de la oración muchos hijos perdidos vuelven a encontrar el camino verdadero al Reino de los Cielos. Amén.

Tu Juan. Apóstol y «favorito» de Jesús. Amén.