9. «Los niños son lo más valioso que tienen aquí en la tierra» — 24.12.2012 / Nochebuena

Hija Mía, la tarde hoy será una tarde agradable. Regocíjate y disfruta de tus niños. Son lo más valioso que tienen ustedes, los humanos aquí en la tierra. Si no son bueno con todos los niños – escribe, hija Mía –, entonces no entrarán en el Reino de los Cielos.

Te digo esto porque hay muchas, muchas personas malvadas a tu alrededor se están aprovechando de estas preciosas almas de los niños. Ellos las destruyen. Ustedes tienen que amar sus hijos. Todos los niños. Solo a través de ellos se puede salvar su mundo. Son las almas pequeñas, puras que Nuestro Padre, Dios el Altísimo ama tanto. Son incorruptas y puras y mantienen a todos ustedes, Mis (grandes) hijos, vivos. Sin ellos, este mundo hace mucho tiempo ya no sería. Dios Padre no permitiría que el mundo permanezca sin estas almas puras de los niños, dado que ya existe demasiado pecado, demasiada infidelidad contra Dios. Deben volverse y confesarse a Dios Padre.

Tomen sus hijos como ejemplo. Ellos no conocen la envidia que desencadene guerras, ni son malvados nunca por sí mismos. Están conectados con Dios, Nuestro Padre, y aman sus vidas. No los destruyan. Aprendan de ellos en lugar de llenarlos con todas sus trivialidades. Déjenlos crecer con Dios y con Jesús.

Cuéntenles del cielo, de los ángeles y todos los santos. Díganles que siempre estamos con ellos. Si les cuenten de nosotros, su mundo volverá a ser mejor. Así podrán mantener su pureza en la vejez. Es el camino que deben ir. Así curan su tierra. Denles a sus hijos esta oportunidad. Si no hablan de nosotros, será difícil para ellos de encontrarnos. Así, les están bloqueando el camino hacia el Reino de los Cielos, así como también se interponen en el camino de la limpieza de la tierra. Solo aquel quien educa a sus hijos con nosotros ayuda activamente a salvar el mundo.

Hijos Míos, no tengan miedo. Nunca es demasiado tarde para dar el primer paso. Comiencen y amen a todos los niños. Cuéntenles de nosotros y así criarán a una generación que vuelve a cree en Nosotros y en Dios Padre. ¿Y quién de los que se basan en Dios puede hacer el mal? Nadie, hijos Míos. Así están expulsando a Satanás fuera de su mundo. Cuanto más son, más poderosos serán. Y él que está lleno del poder de Dios vence al adversario. Mis hijos, comiencen ahora. Sean fuertes. Cuanto más fuertes sean, menos Satanás puede debilitarlos, porque entonces son ustedes quienes debilitan a Satanás.

Crean en si mismos, hijos Míos. Siempre estaremos con ustedes. Con todos y cada uno de ustedes. Tendrán éxito, hijos Míos.

Nosotros los amamos. Dios el Padre con todos los santos y ángeles (al principio solo habló la Madre de Dios, luego llegó Dios Padre).

Mi hija, comparte esto. Gracias por escucharnos y escribir tan diligentemente. Te amamos, hija Mía. Ve ahora, hija Mía. Feliz navidad.

Tu Madre en el Cielo y Jesús Quien te ama.