648. Quien se opone a MÍ, su Creador, ¡nunca encontrará la paz! — 09.08.2014
Mi hija. Mi querida hija. Por favor, diles hoy a Nuestros hijos lo siguiente:
Nuestra luz ilumina la tierra, porque la luz les fue dada por Mí, su Padre en el Cielo. Mi Hijo, su Jesús, la lleva a los corazones de todos Nuestros hijos, ¡pero ustedes deben dejarla brillar, sentirla dentro de ustedes y no permitir que sea “apagada” por las tinieblas que les trae el diablo!
Mis hijos. El diablo no quiere nada bueno para ustedes. Él quiere ser como YO, su Padre en el Cielo que tanto los ama, pero eso no puede ser y nunca será. ¡Él no conoce el amor, sino el odio y la envidia, el orgullo, la arrogancia y la vanidad! Es el ángel caído Lucifer, desterrado de las esferas celestiales por toda la eternidad. Su ira y su odio han hecho de él lo que es: el príncipe de las tinieblas, lleno de odio e inquietud. Nunca está satisfecho, porque no conoce la satisfacción.
Quien se opone a MÍ, su Creador, nunca encontrará la paz. Él nunca estará en paz o en amor, y el odio lo carcomerá por dentro. La oscuridad le rodeará cada vez más y su ser interior, su alma, sufre el dolor más profundo, porque el estado natural del alma es el amor y en la paz descansa, pero quien se separa de MÍ, de su Padre, perderá este amor y la inquietud y la angustia caerán sobre el alma. Sufre y sólo Mi Hijo puede sanarla porque ÉL ES el Jesús Misericordioso, su Salvador, su Redentor, y Su amor es infinito y lo más precioso que le puede pasar a su alma.
¡Así que pónganse en camino hacia Mi Hijo! ¡Renuncien al diablo y a todas sus tentaciones! Estén completamente Conmigo y con Mi Hijo y escuchen lo que les dice la Madre María una y otra vez. Encuentren a Jesús, porque ÉL les allana el camino hacia Mí. Amén.
Su Padre en el Cielo que los ama.
Creador de todos los hijos de Dios y Creador de todo Ser. Amén.