1324. ¡Aquellos que aún no lo han hecho…! — 27.10.2021

Mi hija. Se avecinan tiempos muy feos, pero no temas/temen nada. El maligno se está apoderando de ustedes y de su mundo, pero todos aquellos que estén firmemente anclados en Mi Hijo no tendrán nada que temer.

Confíen, oren y crean. El Señor no los deja solos en ningún momento y el Padre interviene, Mi hija, Mis hijos, pero deben permanecer fuertes y perseverantes y completamente anclados y escondidos en Mi Hijo.

El Aviso, Mis hijos, está cerca, muy cerca, así que prepárense ustedes, su alma y su espíritu para éste. Deben estar preparados para el Señor, para Jesús, Mi Hijo que tanto los ama.

Los que aún pueden, acudan a la Santa Misa, tras una digna confesión y una profunda contrición por sus pecados. Hijos (!), es tan importante que se limpien, ¡y esto sólo funciona a través de la Santa Confesión con un sacerdote ordenado por Mi Hijo!

Así que busquen a un verdadero siervo de Mi Hijo y confiesen TODO lo que han hecho mal, una confesión de vida para aquellos que aún no lo han hecho. Recuerden que todo lo que ya han confesado y expiado y de que se han arrepentido no necesita ser confesado de nuevo, a no ser que les está [aún] pesando a su alma, entonces, Mis hijos, pueden confesarlo otra vez, pero esta vez deben arrepentirse profundamente, Mis hijos, para que puedan ser/llegar a ser verdaderamente libres de ese pecado. Mi Hijo perdona cualquier pecado del que se arrepientan sinceramente, pero SÓLO a través del Santo Sacramento de la Confesión.

Por lo tanto, donde aún se puede, acudan a su Santa Confesión y pidan y/o supliquen -dependiendo del grado de pecado- al Señor el perdón. Mi Hijo es misericordioso y ÉL les dará el perdón, pero deben arrepentirse, Mis hijos, deben arrepentirse profundamente.

Mi hija. Diles a los hijos que queda poco tiempo para su purificación. Por favor, díselo de parte de su Madre en el Cielo que los ama tanto y que los acompaña.

Quien reza a Mí por protección y guía no se perderá. Esto es lo que Yo, su Madre Quien los ama, prometo a todos los hijos fieles y conversos.

Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.

Mi hija. Yo, tu Jesús de la Cruz, estoy profundamente entristecido. Los hijos del mundo no ven dónde están parados y pronto, muy pronto, será demasiado tarde para ellos. Por lo tanto, les pido a ustedes que recen por ellos para que se arrepientan y finalmente sí encuentren el camino hacia Mí y el Reino de los Cielos. Les doy las gracias desde lo más profundo de Mi tan dolorido corazón.

Con amor,

Su Jesús de la Cruz.