1510. ¡Solo Yo puedo guiarlos a través de esta violenta tormenta! — 03.09.2025

Monasterio de Santo Toribio

Oh, Mi hija. Fui clavado en esta cruz para el perdón de sus pecados, para su redención, y está cerca, está tan cerca Mi amado rebaño de hijos para TODOS los hijos de la Tierra que Me aman verdadera y sinceramente.

Por eso es tan importante que los hijos se conviertan a Mí, a su Salvador, Que Yo Soy, porque el tiempo está cerca, el tiempo de Mi regreso pronto, muy pronto habrá llegado y solo unos pocos hijos tienen la fe verdadera y genuina en Mí, pero son tantos que se deleitan en lo efímero, y a estos hay que ayudarles a convertirse mediante la oración, la oración ferviente, sacrificios y actos de expiación, para que se liberen de lo efímero, no se entreguen ni confíen en lo terrenal, sino que Me encuentren a Mí, a su Jesús, que tanto los amo, se confíen a Mí y confíen en Mí, y Me entreguen verdaderamente su corazón y su ser, ¡porque solo así podré elevarlos!

¡Solo así encontrarán entrada en Mi Nuevo Reino!

Solo así van a poder regresar al Padre en el Cielo y vivir eternamente en la gloria, como se ha prometido a todos aquellos que verdaderamente profesan su fe en Mí, Me aman sinceramente, Me siguen y respetan y honran los mandamientos del Padre. Amén.

Amados hijos, y es eso lo que son: aquí, en el santuario de Santo Toribio, encuentran un fragmento de Mi Cruz, que es Santo porque Yo, su Jesús, sufrí en él.

Así que visiten este lugar con devoción y reverencia y crean y confíen en Mí, su Jesús, que tanto los amo. Amén.

Diles a los hijos que El Aviso está cerca.

Así que aprovechen el tiempo que queda hasta entonces y oren, hagan peregrinaciones y ayuden a que aún muchas almas más se conviertan, se encuentren a Mí, su Jesús, para que no se pierdan en las profundidades eternas del infierno, que devorarán su alma y les traerán sufrimiento y tormento eternos. Amén.

Oren, hijos amados, oren por sus hermanos y hermanas.

Los amo mucho.

Su Jesús, que padeció por ustedes y murió por ustedes en la cruz, para que ustedes encuentren la redención y su alma la salvación y para que pueda [el alma] entrar en el Cielo con el Padre, donde vivirá en eterna bienaventuranza y gloria. Amén.

El tiempo que les queda es corto, muy corto. El anticristo se apoderará del dominio del mundo y ustedes estarán verdaderamente gobernados por el diablo.

Así que vengan a Mí, a su Jesús, a tiempo, porque de lo contrario estarán perdidos en este mundo, así como en la eternidad. Amén.

¡Solo Yo soy el camino al Reino de los Cielos! ¡Solo Yo!

¡Solo Yo soy el camino a casa, al Padre, su Creador! ¡Solo Yo!

¡Así que encuéntrenme a Mí!

¡Profesen su fe en Mí!

¡Y encuentren su seguridad en Mí, comenzando a creer y a confiar en Mí!

¡Yo cuido de ustedes!

¡El Padre cuida de ustedes!

¡Mi Santísima Madre, su Virgen y Madre María, cuida de ustedes!

¡Sus Santos y Santos Ángeles rezan por ustedes! ¡Así que ruéguenles y ellos les ayudarán!

¡Imploren al Espíritu Santo para que alcancen y mantengan la claridad!

¡Los tiempos se volverán cada vez más confusos y solo un alma firmemente anclada en Mí, su Jesús, sabrá distinguir!

¡Escuchen Nuestra palabra!

¡Prepárense ustedes, sus almas!

¡Les regalamos estos mensajes para que estén preparados para Mi regreso!

¡Para Mi Aviso!

¡Para el tiempo del anticristo!

¡Para la Vida Eterna en la gloria!

Escuchen y miren, porque su mundo y ustedes hijos amados, y es eso lo que son, están en una situación grave.

Solo Yo, su Jesús, puedo guiarlos a través de esta violenta tormenta, para que puedan atravesarla sanos y salvos y no se desvíen del camino. ¡Solo Yo!

¡Así que escuchen, hijos amados! ¡Escuchen y conviértanse!

Profesen su fe en Mí, porque los amo mucho, pero la hora de la misericordia está llegando a su fin, ¡y ay de aquel que entonces no Me haya encontrado a Mí!

¡Que no esté preparado para Mí!

¡Que se haya aferrado a lo terrenal!

¡Que confíe en el anticristo y haya caído en su trampa!

Hijos, hijos, Mis amados hijos. Yo, su Jesús, ¡no habitaré entre ustedes por segunda vez!

¡Así que sumen 1 y 1 y ven dónde se encuentran!

¡El tiempo se acaba y no están preparados!

Ustedes creen que todo seguirá igual, ¡pero no ven adónde conduce el camino!

¡Se encuentran en un mundo traicionero, que ya está siendo dominado por el diablo!

¡Miren!

¡Despierten!

¡Y no permanezcan cómodos ni tibios!

Yo, su Jesús, no puedo decirles más hoy, pero tomen en serio Mi palabra, porque se la doy para la salvación de sus almas, y esta está en grave peligro.

Así que encuéntrenme a Mí y permanezcan conmigo.

Los amo mucho.

Su Jesús desde el santuario de Santo Toribio. Amén.

1509. ¡Por eso Dios se hizo pequeño! — 03.09.2025

Garabandal

Mis hijos. Comenzarán tiempos difíciles y no habrá escapatoria para muchos de ustedes.

Cuanto más se ‘aferran’ a su seguridad terrenal, más difícil se les resultará liberarse del diablo y sus secuaces, y no encontrarán a Jesús, ¡porque confían en lo terrenal en lugar de confiar en Mi Hijo!

¡Solo Jesús es su garantía para el Reino de los Cielos! ¡No hay otro! ¡Solo a través de Él encontrarán la salvación!

¡Pero el diablo les impide encontrarlo a Él, a su Salvador, si esperan, confían y aspiran a lo terrenal!

Todo lo terrenal es efímero, ¡pero Mi Hijo NO lo es!

ÉL es su Redentor, el Alfa y la Omega, porque ÉL proviene directamente de Dios, el Padre, y ÉL es el Hijo del Altísimo, ¡y ÉL ES el Dios Trino!

Todos ustedes son hijos del Padre en el Cielo, y Jesús, Su Hijo unigénito hecho carne, ¡es el Redentor de todos ustedes!

Por eso Dios se hizo pequeño para darles la salvación, para mostrarles el camino a casa, para guiarlos hacia Él.

Porque todos ustedes han sido creados para la eternidad, y en la eternidad vivirán, pero depende de ustedes, de su libre albedrío, de su disposición a recorrer este camino con Jesús a su lado, o seguir deleitándose en lo terrenal, acumulando poder, dinero y riquezas y vivir bajo las alas del diablo que los precipitará al infierno a través de su anticristo, que está a punto de tomar el dominio del mundo y que les traerá sufrimiento, miseria y terror.

(¡) Pero lo reconocerán demasiado tarde (!), (¡) confundirán al hijo del maligno con el que proviene de Dios (!), lo aclamarán, le concederán cada vez más poder y, lo que es aún peor, lo adorarán y le rendirán homenaje.

Y cosecharán la perdición, y ningún camino se les abrirá al Reino de los Cielos, porque no han querido escuchar, han permanecido tibios, perezosos y cómodos, ¡enredados en lo terrenal e incorregibles!

Hijos, hijos, ¡su perdición está planeada y ustedes simplemente quedan mirando [sin hacer nada]!

¡Ustedes no miran! ¡Apartan la mirada [incluso]! ¡Son cómodos, tibios y perezosos!

¡Solo su verdadera conversión a Jesucristo los salvará de caer en el infierno!

¡Solo el Espíritu Santo del Padre y del Hijo los mantendrá en la claridad!

Así que estén preparados, hijos amados, y es eso lo que son, porque el tiempo que les queda es muy corto. Amén.

Con profundo amor.

Su Madre en el Cielo, Madre de todos los hijos de Dios y Madre de Garabandal. Amén.

Miren con atención lo que está sucediendo en su mundo y luego vuelvan a Jesús, Mi Hijo, para que puedan ser salvados. Amén.

1508. Quien no aproveche ahora su oportunidad, ¡experimentará la justicia del Señor! — 03.09.2025

Garabandal

San Miguel Arcángel: Mi hija. Yo, tu San Miguel Arcángel, quiero decirte a ti y a los hijos de la Tierra hoy lo siguiente:

El tiempo que les queda en la Tierra es muy corto.

El anticristo está cerca, sus planes están sellados y no habrá escapatoria para su dominio mundial.

Los últimos planes están terminados, y ‘los títeres’ bailan ‘al son de su flauta’, lo quieran o no, porque han hecho el pacto con él, han entonces hecho el pacto con el maligno, con el diablo, se han dejado cegar y seducir por el dinero y las riquezas de este mundo, por el ‘prestigio’ por ‘pertenecer’ a los ‘grandes’, y han ignorado los peligros que conlleva este pacto, y que no solo trae desgracia a la humanidad, sino que también les trae a ellos [mismos] la desgracia, el no poder dar marcha atrás y la desolación del alma!

Hijos, hijos, los hemos advertido, ¡pero no han querido escuchar!

Quien ha sellado el pacto con el anticristo no solo ha sellado SU perdición. Esta culpa pesará de manera tan infinita sobre su alma, ¡y solo la súplica incesante al Señor Jesucristo por el perdón, el arrepentimiento de este y todos los actos terribles, la penitencia y la conversión a través de la sola misericordia del Padre y del Hijo, pueden salvarlo ahora!

Hijos, hijos, aprovechen la hora de la misericordia, ¡porque no saben cuán terriblemente los afectará la justicia!

¡No pueden imaginar el sufrimiento del alma, ni siquiera pueden intuirlo!

Hijos, hijos, ¡perecerán de manera tan miserable si no suplican y otra vez suplican la misericordia del Señor ahora ya!

Pero solo mediante su conversión experimentarán la misericordia, y el daño que ya han causado solo mediante la oración incesante lo pueden mitigar.

Su alma tendrá que sufrir, pero será un dolor purificador, sin embargo, si no se convierten ahora su alma estará expuesta a los más crueles dolores, tormentos y sufrimientos en los fuegos del infierno ¡POR TODA LA ETERNIDAD!

Quien no aproveche ahora su oportunidad, ¡experimentará la justicia del Señor! Así que miren dentro de ustedes mismos, en su corazón, en su alma, que se les manifestará a más tardar durante El Aviso, ¡y conviértanse!

Quien haya hecho el pacto con el diablo sufrirá, pero será un sufrimiento de purificación para la eternidad en el Reino de los Cielos, ¡siempre y cuando se conviertan a Jesús!

Pero quien permanezca tibio y perezoso, buscando su realización en lo mundano, en el dinero y en el prestigio, caerá, y su sufrimiento durará por toda la eternidad, ¡SIN esperanza de salvación! ¡Sin esperanza de vida eterna en la gloria! ¡Sin esperanza de misericordia!

¡Estará solo y expuesto al diablo por toda la eternidad!

Este ‘estar solo’ se refiere a la relación con su Padre Celestial, el Hijo, Jesucristo, y todos los Ayudantes Celestiales.

No se le tenderá ninguna mano auxiliadora, ¡porque ha decidido contra su Creador y contra su Redentor!

¡Así que estará solo y expuesto al diablo y a sus demonios!

Y por mucho que grite, suplique y pida ayuda, estará solo, porque no ha escuchado, no ha querido a Jesús, su Redentor, ¡y ha preferido lo terrenal y efímero a lo divino y eterno!

Así que diles a los hijos ahora que apenas queda tiempo para su conversión, porque la segunda venida del Señor está cerca, muy cerca, y solo, repito, solo Sus hijos verdaderamente fieles serán elevados. Amén.

Tu y su San Miguel Arcángel de Garabandal. Amén.

1507. ¡El tiempo que queda para la preparación es corto! — 01.09.2025

Covadonga

Mis hijos, el tiempo que queda para la preparación de las almas hasta el regreso de Mi Hijo, su Jesús, es corto, así que, por favor, diles a los hijos del mundo que tomen en serio Nuestra Palabra para que no se pierdan, ni en el pantano de las mentiras, ni en el pantano de la confusión, ni en el pantano de los pecados, ni en manos del adversario, que hace todo lo posible por robar las almas de los hijos de Dios -los hijos creados por Dios, UESTEDES, para que ellos, UESTEDES, sufran y se atormentan eternamente y su alma, la alma de USTEDES, arde y queme por toda la eternidad, atormentada por aquel que les mintió a ustedes en vida, los sedujo al pecado, los engañó y que con astucia y malicia los llevó al extravío, a la confusión y ahora a su reino infernal, (¡) solo para deleitarse con su extravío y tormento (!), (¡) para atormentarlos a ustedes por toda la eternidad (!), para mantenerlos alejados de Dios, el Altísimo, su Creador y Padre en el Cielo, y tantos hijos corren el peligro de caer en la trampa del príncipe de las tinieblas y quedar expuestos a él POR TODA LA ETERNIDAD, por eso, escuchen Nuestra Palabra en estos mensajes, tómenla en serio, prepárense y vuelvan por completo a Jesús, Mi Hijo que tanto los ama, que busca la salvación de las almas de todos ustedes, su redención y los guía al Reino de los Cielos, de vuelta a casa con su Creador, que los recibe con brazos amorosos si se convierten y se preparan. Amén.

Los amo mucho. ¡Conviértanse! ¡Prepárense! Y escuchen Nuestra Palabra que está escrita aquí, que les es revelada para la salvación de sus almas, para que alcancen la eternidad en la gloria y puedan vivir eternamente con Jesús y Dios Padre. Amén.

Los amo mucho.

Su Madre de Covadonga, Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.

1506. Nuestra Señora de Lourdes — 31.08.2025

Lourdes

Lloro lágrimas amargas por este mundo y Me alegro por cada alma que viene a Mí, aquí a Lourdes.

Y prometo estar con ella cuando me lo pida y guiarla hacia Mi Hijo, Jesucristo. Amén.

Divulga esto. Amén.

1505. ¡De la noche a la mañana llegará lo que se ha predicho! — 30.08.2025

Lourdes

Jesús: Mi hija, es importante que escribas para Nosotros. Así que diles a los hijos que recen y tengan paciencia, porque todo está muy cerca y de la noche a la mañana (nota: cuando menos lo esperemos) llegará lo que se ha predicho, ¡y ay de aquel que entonces no esté preparado para ese momento y para Mí!

La Madre de Dios: Mis hijos. Todo está muy cerca. Así que aprovechen el tiempo que les queda para rezar, y encuentren y estén completamente con Mi Hijo.

Un ángel del Señor: Solo Jesús es su Salvador, así que estén preparados para Él que desea su salvación, porque no hay otro.

Apóstoles y Jesús: Pero aquel que viene y se hace pasar por quien no es, los llevará a la perdición y a las profundidades del reino del infierno.

Así que estén vigilantes y advertidos, porque Yo, su Jesús, no habitaré entre ustedes por segunda vez, pero aquel que viene estará muy presente.

Apóstoles: No se dejen engañar, no se dejen confundir, ¡porque todo es ‘espectáculo’ y nada es verdad!

Un ángel del Señor: Manténganse vigilantes, hijos amados, para que no se pierdan en manos del advenedizo. ¡Él es el adversario de Jesús, y sus seguidores rinden culto al falso!

María Magdalena: Él es el anticristo, hijos amados, y es eso lo que son, y como tal intentará engañarlos por todos los medios.

No caigan en su trampa, porque traerá deshonra y lujuria, hará caer sus almas y con mentiras y fraudes engañará a los hijos de Dios, ¡los hará sufrir y los destruirá!

Pero quien esté con Jesús, amados hijos, y es eso loque son, no tendrá nada que temer. Su alma será elevada y gloriosos serán sus días por toda la eternidad.

Se le concederá la Luz del Padre y su alma se regocijará al ver al Padre y al Hijo cuando llegue su hora.

Dios Padre: Mi mano protectora la mantengo sobre aquellos que están verdaderamente con Mi Hijo. Su alma no sufrirá daño alguno y Mi Hijo los guiará a través de este tiempo.

Madre de Dios con María Magdalena: No será fácil, amados hijos, y es eso lo que son, pero este tiempo será de corta duración.

Un Ángel del Señor: Así que perseveren.

María Magdalena y la Madre de Dios: Estén siempre con Jesús y permanezcan fieles a Él hasta el final. Amén.

Con profundo amor.

Su Madre en el Cielo. Madre de todos los hijos de Dios y Madre de Lourdes, con María Magdalena, los apóstoles, un Ángel del Señor, Jesús y el Padre en el Cielo. Amén.

1504. ¡Muchos demonios ya están siendo liberados! — 11.08.2025

Bonaventura: Mi hija. Se avecinan tiempos difíciles para su Tierra y su existencia terrenal, pero no tengas miedo, no tengan miedo ustedes, porque en todo momento se cuida de ustedes.

Jesús, tu y su Jesús, está y estará siempre con ustedes y no tengan nada que temer.

Su oración, hijos amados, y es eso lo que son, es muy importante en este tiempo y en estos días, porque el anticristo y sus siervos están avanzando y los someterán a ustedes a la coacción y al sufrimiento, y cada vez más demonios serán liberados para atormentarlos, para perseguirlos, para susurrarlos y confundirlos, para hacerlos malvados, agresivos y completamente malévolos, traicioneros, para adorar al anticristo y al diablo, al maligno, y para acosar, dañar y corromper a los hijos buenos, fieles y honestos!

Jesús: Hijos, hijos, el tiempo que les queda es muy corto, y solo los hijos que están conmigo serán elevados, pero se avecina tiempos verdaderamente oscuros.

Yo, su Jesús, estaré con ustedes, pero deben ser fuertes y firmes, ¡y permanecer fieles y entregados a Mí con amor hasta el final!

Madre de Dios: Diles esto a los hijos, hija Mía, porque deben convertirse a Jesús.

Un ángel del Señor: Quien no esté con el Señor no será llevado, sufrirá el mayor dolor y su alma se perderá en manos del adversario.

Bonaventura: Hijos, hijos, tantos demonios ya están siendo soltados, y los acosarán e intentarán robarles el alma. Deben permanecer fuertes y perseverantes, porque esto solo ha comenzado. Todo vendrá rápidamente y no tendrán tiempo para entender.

Por eso, afiáncense ahora en el Señor Jesucristo, porque si no lo hacen, serán presa fácil del anticristo.

Se perderán en mano de él que viene del infierno, y entonces nada podrá hacer Jesús, su Salvador, por ustedes.

Madre de Dios: Así que decídanse, hijos amados, y es eso lo que son, por Jesús, Mi Hijo, porque solo ÉL es la verdad, el amor y la luz, pero el otro viene del infierno, ¡y los traerá el infierno!

Yo, su Madre en el Cielo, estoy preocupada por ustedes, muy preocupada, Mi amado rebaño de hijos, ¡porque no ven el peligro! ¡No reconocen sus seducciones! ¡Corren directamente a sus brazos SIN ni siquiera darse cuenta!

Juan: Pero su mayor peligro es que creen que basta con tener un corazón aparentemente bueno, ¡pero no ven el peligro que esto significa!

Solo un corazón que pertenezca a Jesús será elevado, ¡pero todos los demás no!

Así que no crean a los que proclaman tener un buen corazón, ¡ni crean que serán elevados sin convertirse!

Yo, su Bonaventura con María Magdalena, Juan, la Madre de Dios, Dios Padre y Jesús presentes, ¡se lo advertimos!

Jesús: Un buen corazón por sí solo no es el camino al Reino de los Cielos, porque quien no está conmigo, con su Jesús, no Me conocerá. Pero solo Yo soy el camino al Padre y al Reino de los Cielos, por eso es tan extraordinariamente importante que se conviertan a Mí, que encuentren a su Salvador, que Yo soy, ¡y renuncien a todo lo demás que han puesto y adorado en Mi lugar!

¡Solo Yo soy el camino! ¡Solo Yo!

¡Solo Yo soy la esperanza! ¡Solo Yo!

Sin Mí se perderán, así que conviértanse, amados hijos, y encuentren el camino hacia Mí, hacia su Jesús, Que Yo Soy. Amén.

Los amo mucho.

Tu y su Jesús con María, su Madre en el Cielo, María Magdalena, Juan, el Padre y Bonaventura. Amén. Muchos Santos y Santos Ángeles están aquí.

Madre de Dios: Con su oración aún pueden salvar almas que, de lo contrario, se perderían. Así que recen mucho, hijos amados. Los amo. Amén.

1503. ¡A la merced del diablo por toda la eternidad…! — 06.08.2025

Dios Padre: Oh, Mi hija. Siéntate y escribe, porque Nuestra palabra debe ser escuchada.

Mi hija. El tiempo que les queda en la Tierra es ya muy corto.

Juan: Amados hijos, y es eso lo que son. El tiempo está contado, es decir, deben prepararse para lo que está escrito.

Dios Padre: Mi mano castigadora aún se contiene por unos pocos de ustedes que Me aman mucho a Mí y a Mi Hijo y rezan por toda la humanidad.

María Magdalena: Ellos aceptan mucho(s) sufrimiento(s) y expiación, y con ello salvan todavía a tantos de ustedes.

Juan: Pero deben prepararse ahora hijos amados, y es eso lo que son, ¡porque el sufrimiento de aquellos que se sacrifican por la salvación de sus almas [las almas de ustedes] pronto terminará! Ellos serán elevados y el Nuevo Reino se convertirá en su hogar, y ustedes quedarán abandonados a su suerte.

Jesús: El diablo pondrá sus manos sobre ustedes y sus almas perecerán. No podrán sobrevivir sin la oración y Mi ayuda, y el fuego eterno del infierno espera a cada uno de ustedes que ahora no se prepare, ¡se convierta y Me dé su SÍ irrevocable!

Madre de Dios: Hijos, Mi amado rebaño de hijos, Yo, su Madre en el Cielo, estoy muy preocupada por ustedes. Tantos hijos sufren para que los demás -ustedes- no se pierdan en manos del diablo y sus secuaces, pero su sufrimiento y su expiación pronto llegarán a un fin.

Jesús: Yo redimiré a estos hijos, y ellos serán los primeros en Mi Nuevo Reino.

Madre de Dios: El amor de Mi Hijo les será concedido a ellos de manera irrevocable, incondicional y lleno de misericordia, y ustedes quedarán abandonados a su suerte.

Pablo: Pero quien se ame a sí mismo por encima de los demás, sufrirá el mayor dolor. Su alma se perderá, porque no se ha preparado para el Señor, Jesucristo, su Salvador, y no encontrará la salvación. Quedará solo, abandonado a su suerte, porque los hijos que rezan serán elevados. Pero él estará a merced del diablo y no habrá salvación para él – para su alma.

Pedro: Amados hijos, y es eso lo que son. Solo un alma que reza, que confía en Dios encontrará entrada al Nuevo Reino del Señor Jesucristo, pero todos los demás se perderán.

Ustedes DEBEN dar a Jesús su SÍ incondicional, sincero y honesto, porque de lo contrario se perderán en manos de su adversario, ¡y el reino del infierno se abrirá para él que NO AMA A JESÚS!

María Magdalena: ¡Hijos, hijos, no se hagan esto! ¡Conviértanse y recen! ¡Supliquen a Jesús, al Padre en el Cielo y al Espíritu Santo!

Pedro y Pablo: ¡Dejen de lado las riquezas de esta tierra y reúnan sus tesoros para la eternidad!

Un ángel del Señor: ¡Solo el que ama a Jesús será elevado, todos los demás estarán a la merced del diablo por toda la eternidad! Yo, un ángel del Señor, les digo esto, porque tan pronto como los hijos que rezan y que sufren y expían por la humanidad -por ustedes- sean elevados, a ustedes solo les quedará el camino al infierno si no se convierten, si no le dan su SÍ al Señor, su Jesús, ¡si no aman a AQUEL que es su Salvador y si siguen aferrados a lo terrenal!

Jesús: Lo terrenal, amados hijos, y es eso lo que son, su mundo está gobernado por el príncipe de las tinieblas. Ya se encuentran en ellas [las tinieblas], ¡pero no lo ven! Ustedes se dejan deslumbrar por el brillo y las apariencias, y están atrapados en la niebla del diablo.

Pero su plenitud no está en lo terrenal-efímero, sino en Mí, en su Jesús, su Salvador, El que Yo Soy.

Así que denme su SÍ y vengan a Mí, porque solo Yo soy el camino y la luz, ¡y solo a través de Mí encontrarán el camino a casa!

El Padre espera a cada uno de ustedes, pero ustedes tienen la opción de elegir qué camino quieren seguir.

Solo hay dos, hijos amados, y es eso lo que son, ¡así que elijan con prudencia y elijan bien!

Todo aquel que no Me quiera, seguirá el camino hacia la oscuridad absoluta, y lo que les espera allí se lo hemos comunicado en numerosos mensajes a lo largo de los tiempos.

Madre de Dios: Así que elijan con prudencia y encuentren a Jesús, porque solo ÉL es su Salvador, y sin ÉL se perderán. Amén.

Los amamos mucho.

Su Madre en el Cielo, María Magdalena, Juan, Pablo, Pedro, Jesús, un ángel del Señor, el Padre y muchos santos, apóstoles y Santos Ángeles presentes. Amén.

1502. La situación mundial pende de un hilo… — 04.08.2025

Dios Padre: Mi hija. Los esperan tiempos difíciles a ustedes, pero no tengas miedo.

Los apóstoles y un ángel del Señor:

La situación mundial pende de un hilo, y este amenaza con romperse ahora.

Ustedes serán puestos a prueba y su fidelidad al Señor está siendo examinada en estos tiempos.

El diablo ha tejido su red y la va cerrando cada vez más para que les falte ‘el aire para respirar’ y para aguantar.

Las plagas y las epidemias serán grandes, las catástrofes medioambientales visibles en todas las partes de su Tierra.

La élite superior cree haber alcanzado su objetivo, pero no está tomando en cuenta la omnipotencia del Señor.

Jesús está preparado y vendrá, pero ÉL no morará entre ustedes por segunda vez.

Yo, un ángel del Señor, junto con los Santos Apóstoles les repito esto, porque ustedes olvidan lo que está escrito, ¡no ven dónde están parados y creen muy poco o incluso no creen nada!

Solo Jesús es su ancla de salvación, ¡no hay otro!

Estén preparados para su Salvador, porque todo sucederá muy rápidamente. Amén.

Da a conocer esto, Mi hija. El tiempo apremia. Amén.

Tus y sus Santos Apóstoles, el ángel del Señor, con María, Jesús y Dios Padre presentes. Amén.

1501. ¡El odio hacia todo el mal que ya está sucediendo! — 28.07.2025

Bonaventura: Mi hija. Sus días están contados y contado está el tiempo que les queda para su conversión a Jesucristo, porque ÉL está preparado para cada uno de ustedes, para defenderlos con las Huestes Celestiales de los Santos Ángeles bajo el mando del Arcángel Miguel, Mi hija, y para darles protección y guía, pero son tantos los hijos que no están preparados para ÉL y no se preocupan por lo que viene, por lo que está escrito, ni por Jesús, su Salvador.

Dios Padre: Y estos [los hijos] se perderán en manos del diablo si no se convierten ahora.

Bonaventura: El tiempo es corto, amados hijos, y es eso lo que son y Yo, su Bonaventura, que intercedo en el Cielo por todos los hijos del Señor, estoy muy preocupado por ustedes.

Madre de Dios: Conviértanse, Mi amado rebaño de hijos, porque sin Mi Hijo se perderán.

El adversario juega con ustedes, pero solo él puede ganar este juego.

Jesús: No solo se están arruinando estos días, hijos amados, y es eso lo que son, si entran en el juego del diablo, ¡NO, no es solo eso!

Ustedes arderán en el fuego eterno del infierno y su alma arderá, sin embargo, es el suplicio, la vergüenza, la miseria lo que la traspasará aún más, tormentos y suplicios infinitos a los que estará expuesta, el dolor más terrible que nunca terminará y que volverá a  arder una y otra vez y cada vez con más fuerza, y estará a punto de desgarrarse [el alma], tan fuerte, tan infinitamente doloroso será, sin embargo, [el alma] está creada para la eternidad y DEBE soportar este dolor, este sufrimiento, estos tormentos y este suplicio y la sensación de desgarro por toda la eternidad, porque ustedes la han perdido —ustedes se han perdido— al diablo, ¡porque no Me han encontrado a Mí!

¡Porque no Me querían!

¡Porque preferían creer al diablo en lugar de prepararse para todo lo que aquí se ha dicho!

¡Porque preferirían vivir ‘bien’, ‘tranquilos’ y ‘cómodos’ en lugar de confiar en Mí!

¡Porque fueron tibios y no querían arrepentirse!

¡Porque estaban llenos de odio y no podían perdonar!

¡Porque seguían ideologías falsas!

Porque se han alejado de Mí, su Salvador, ¡EL QUE YO SOY!

¡Porque Me han pisoteado!

¡Porque se han preocupado por su [propio] beneficio durante su vida!

¡Porque han preferido creer al diablo!

¡Porque han creído y seguido a aquel que es malvado hasta la médula!

¡Porque no han querido renunciar al lujo!

¡Porque nunca Me han dado su confianza, a Mí, su Jesús!

La lista es larga hijos amados, y es eso lo que son, ¡pero el camino hacia Mí es tan sencillo!

Dios Padre: Así que ámenlo a ÉL, hijos amados que Yo los he creado, ¡porque a través de Jesús ustedes -sus almas- serán salvados!

A través de ÉL encontrarán el camino hacia Mí, su Padre en el Cielo, ¡Creador suyo, EL QUE YO SOY, y experimentarán y vivirán la verdadera felicidad!

Jesús: Así que encuentren a Mí, hijos amados, y es eso lo que son, ¡porque Yo soy el camino hacia la Vida Eterna en la gloria!

Quédense conmigo, ustedes los que me aman, porque vendrán tiempos difíciles y su fidelidad será puesta a prueba.

Bonaventura: ¡Denle a Jesús su SÍ irrevocable!

¡Ámenlo a ÉL y confíen en ÉL!

¡Porque solo ÉL es su Salvador!

Solo con ÉL serán elevados y solo a través de ÉL obtendrán la gloria del Padre.

Madre de Dios: Amados hijos, y es eso lo que son. Si no encuentran a Jesús, Mi Hijo, los esperarán tiempos muy difíciles.

La desesperación se apoderará de muchos de ustedes, y el odio hacia todo el mal que ya está sucediendo se clavará en sus corazones, el odio hacia todo el mal que ya está sucediendo.

Jesús: ¡Pero donde hay odio, no hay amor! ¡Y donde no hay amor, no Me encontrarán!

Bonaventura: Sus corazones deben permanecer blandos, ¡hijos amados, blandos y abiertos al Señor Jesucristo!

Si llevan odio en su corazón, entonces no llevan a Jesús en su corazón, en vez el diablo los atacará y se volverán cada vez más llenos de odio.

Madre de Dios: ¡Ofrezcan como sacrificio estos sentimientos de odio a Mi Hijo!

¡Pidan y recen al Espíritu Santo por claridad y discernimiento!

¡El odio siempre viene del diablo y nunca de Mi Hijo!

Bonaventura y Jesús: ¡El diablo es hábil y astuto, y una vez que ha puesto un pie en su corazón hace todo lo posible por convertirlos en seres repugnantes, malvados y desobedientes!

¡Ustedes se volverán ciegos a la verdad! ¡Perderán de vista la luz que soy Yo!

Ya no reconocerán a Jesús y se alejarán cada vez más de ÉL, que es bueno y Divino.

Y cada vez más serán atormentados por el diablo, porque el odio los ciega y no les hace bien.

Bonaventura y la Madre de Dios: Así que ¡conviértanse hijos amados, y es eso lo que son, porque solo Jesús es el camino y la esperanza!

Jesús: No importa si han pecado, ¡pero deben arrepentirse y confesarse!

Bonaventura y la Madre de Dios: Todavía hay tiempo hijos amados, y es eso lo que son, pero se les está acabando el tiempo.

Bonaventura: ¡Los días están contados amados hijos, y es eso lo que son!

¡Así que conviértanse y prepárense para Jesús, su Salvador! Amén.

Los amo mucho.

Su Bonaventura, con Jesús, la Madre de Dios, Dios Padre y muchos santos, los apóstoles y los Santos Ángeles presentes. Amén.