618. ¡La luz que Mi Hijo lleva en sí mismo es vivificante para todos ustedes! — 13.07.2014
Mi hija. Mi querida hija. Qué bueno que hayas llegado. Por favor, diles lo siguiente a los hijos de la tierra hoy:
La luz que Mi Hijo lleva en sí mismo es vivificante para todos ustedes. Así que corran hacia ÉL y vivan con ÉL. Ámenlo a ÉL y permanezcan siempre fieles a ÉL, porque es sólo por ÉL que todavía existe este mundo suyo, es sólo por de ÉL que el Padre todavía no ha dejado que Su mano domadora barra sobre su tierra como un trueno destructor, es sólo por ÉL que todavía se les da esta misericordia tan preciosa y generosa, y es sólo por ÉL que encontrarán al Padre y no perecerán, si vuelvan a EL.
Mis hijos. ¡Jesús es su camino! ¡Su único camino! Sólo con ÉL entrarán en la gloria celestial del Padre y serán testigos de Su Nuevo Reino, en el que vivirán 1000 años de paz.
Mis hijos. ¡Este será un tiempo maravilloso! Prepárense para ello y encuentren a su Salvador, porque ¡ÉL es el único que puede liberarlos de las garras del maligno! ¡ÉL es el único a quien el Padre no puede negar ningún deseo!
Así que denle su SÍ a ÉL, a su Jesús que tanto los ama, háganse uno con ÉL y empiecen a vivir su vida en la providencia del Señor. Que así sea.
Con amor,
Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.