602. ¡Son el dedo admonitorio de Dios! — 28.06.2014

Mi hija. Mi querida hija. Por favor, diles a Nuestros hijos que Nosotros los amamos. Nuestro amor por ellos es infinito y Nuestra esperanza es que todos los hijos se conviertan a Mi Hijo.

Mis hijos. No sigan perdiendo tiempo, porque quien no se convierta a tiempo pronto no tendrán más “oportunidad” de hacerlo, porque las mentiras del anticristo, tan pronto como entre en sus asuntos mundiales, serán usadas y difundidas tan a propósito y tan calculadamente que ustedes caerán en una confusión cada vez más profunda, y ya no reconocerán el camino hacia Mi Hijo.

Mis hijos. Mantengan sus ojos y oídos abiertos, porque mucho mal está sucediendo en su mundo. Los signos del fin de los tiempos son visibles en todos los países de la tierra, y los colores del cielo, las tormentas, las catástrofes y mucho más son cambiantes e inexplicables dependiendo de la región. Ocurrirán más “acontecimientos” para advertir al mundo y dar una señal a las personas para que despierten y se conviertan, pero todavía es un largo camino para que muchos reconozcan o ADMITAN que todos estos son signos para que se conviertan y que Dios Padre los está enviando y permitiendo que sucedan para despertarlos a ustedes, para que encuentren el camino de la salvación, de la eternidad a Su lado.

Mis hijos. ¡Tomen las señales como son y reconózcanlas como tales! ¡Son el dedo admonitorio de Dios para llevarlos/guiarlos a la conversión! Son regalos del Cielo para sacudir y despertarlos y (volver) a hacerlos creer: en Dios, el Padre y Creador, en Su Santo Hijo, su Salvador, y en la eternidad en el Reino de los Cielos, ¡que será dado a todos los hijos que son fieles a Jesús!

¡Vean los signos de los tiempos y conviértanse! Entonces su mundo se convertirá en un lugar mucho más hermoso para vivir y todos ustedes alcanzarán el Nuevo Reino. No sigan la corriente de la autorrealización y la autoglorificación, ¡porque los llevará primero al vacío y luego directamente al infierno de la bestia!

No sean tontos, profesen su fe en Jesús, porque sólo con ÉL entrarán en el Nuevo Mundo. Sólo a través de ÉL encontrarán el camino de vuelta al Padre.

Los amo desde lo más profundo de Mi corazón maternal y protejo a todo aquel que busca refugio en Mí.

Con profundo amor.

Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.

“Sólo Yo Soy el Camino y la Luz que los guía y el Amor que los inunda. Así que vengan a Mí, a Mis Santos Brazos, porque Yo Soy su Salvador. Amén.

Su Jesús que los ama. Amén.”

“A cada uno que Me dé su SÍ sincero, Yo le conduciré al Padre. Amén.”

601. ¡Así que mantengan la calma y no provoquen! — 28.06.2014

Mi hija. Mi querida hija. Por favor, diles hoy a Nuestros hijos que sus oraciones son muy necesarias.

El sufrimiento de los que mueren por Jesús es grande. Los tormentos que tienen que soportar son de los más crueles. Están siendo profanados, desfigurados, golpeados, acuchillados y masacrados. Están siendo maltratados y abusados, y su muerte es agonizante.

Mis hijos. Oren por estos fieles hijos de Mi Hijo, porque ellos “sustentan su tierra”. Su sacrificio es inmenso y en todo su sufrimiento permanecen fieles a Mi Hijo.

Mis hijos. ¡Oren, oren, oren! ¡Rusia y China están planeando lo peor! Oren contra todos los planes malignos y ¡MANTEGAN LA CALMA!

Los seguidores del maligno sólo están esperando a que ustedes se rebelen/retoben y de que se levanten contra ellos, porque entonces sería la razón [el pretexto] para la propagación del comunismo en todos los países occidentales y la declaración de guerra para comenzar la Tercera Guerra Mundial. Así que mantengan la calma y no provoquen. La provocación proviene del diablo, pero no de Dios, Nuestro Padre. Así que no sucumban a la provocación y ¡mantengan la calma!

Oren, oren, oren, porque sólo la oración es su arma en estos tiempos difíciles, y a través de la oración se mantendrán firmes y evitarán muchos males!

Oren, Mis hijos, siempre que los llamemos, porque sólo su oración puede ayudarles y protegerlos en estos días del fin.

Prepárense y estén puros, Mis hijos. Hagan penitencia, confiésense y arrepiéntanse. Quien no tiene remordimientos en su corazón no es puro ni digno. Así que arrepiéntanse de sus pecados y estén completamente con Mi Hijo. Sólo en Jesús aún encontrarán sustento. Sólo en EL están seguros y protegidos.

Así que den su SÍ a Jesús todos ustedes y refúgiense en Su Sagrado Corazón que está abierto a todos los que creen sinceramente en ÉL, confían en ÉL y se han entregado completamente a ÉL. El fin es fuerte, pero con Jesús no perecerán, sino que serán elevados a la gloria del Señor. Que así sea.

Con profundo amor,

Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.

“Mi madre habla la palabra verdadera. No se dejen provocar y permanezcan siempre en oración.

Rusia y China planean extender el comunismo, y les bastará una palabra falsa [provocativa] para realizar este plan. Oren que el comunismo no invada su mundo y oren por todos los hermanos y hermanas perseguidos.

¡Su oración es fuerte!

¡Su oración es poderosa!

¡Su oración es energética!

Su oración es su arma en estos días del fin.

Amén.

Su Jesús, que tanto los ama. Amén.”

600. ¡El sufrimiento de la pesadez de Mi cruz! — 27.06.2014

Mi hija. Mi querida hija. Por favor, diles hoy a Nuestros hijos lo siguiente:

Todavía se necesita mucho sufrimiento, porque los pecados de la tierra pesan mucho. Los hijos elegidos sufren los dolores de la crucifixión de Mi Hijo.

Jesús: Tú también, Mi amada hija.

Mi Vía Crucis está ahora casi completo y tú, Mi amada hija, has experimentado y soportado el sufrimiento de este camino con todos Mis dolores hasta la pesadez de la cruz que Yo, tu Jesús, tuve que llevar. Experimentaste el “sufrimiento de la pesadez de Mi cruz” con todos los dolores que Yo experimenté, sufrí y ahora sabes cuán grande fue también Mi sufrimiento físico, pero lo peor aún está por venir.

Mi hija. Soporta todo con amor y diles a los hijos de la tierra que hay muchos que soportan este sufrimiento conmigo. Oren por todos ellos y por todos los que son perseguidos, torturados y asesinados por Mi causa.

Con profundo amor y con la mayor gratitud en Mi corazón,

Su Jesús que los ama, Salvador de todos los hijos de Dios, y su Santa Madre en el Cielo, Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén

599. ¡Su sufrimiento es necesario! — 25.06.2014

Mi hija. Mi querida hija. Diles hoy a Nuestros hijos que su sufrimiento es necesario.

Diles que Nosotros los amamos y estamos siempre con ellos. Diles que lo ofrezcan todo como sacrificio al Señor, porque así [el sufrimiento] provoca el bien en ustedes y en su mundo, y es tan necesario para los corazones de aquellos que están petrificados, hipotérmicos y llenos de odio.

Mis hijos. El fin se acerca con todas sus sombras, pero los hijos fieles del Señor nunca perecerán. Permanezcan fieles a Jesús y acepten todos los sacrificios, todo el sufrimiento que están experimentando, entonces será transformado en amor por su mundo, por ustedes y por los que no conocen el amor del Señor.

Perseveren y permanezcan fieles al Señor.

Con un profundo y agradecido amor,

Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación.

598. ¡Miro con tristeza su mundo y veo cómo se está desmoronando! — 24.06.2014

Mi hija. Advierte hoy a los hijos de la tierra, ¡pues nunca antes ha habido tanta maldad y odio en su tierra como en este tiempo! El fin se acerca, y quien se prepare como Nuestra querida Madre en el Cielo María se lo ha estado pidiendo una y otra vez, podrá salvarse a sí mismo, a su alma.

Mis hijos. Oren por todos los hijos de la tierra, porque ellos/ustedes están confundidos. Muchos de ustedes creen tan firmemente en doctrinas, religiones y formas de vida puestas en el mundo por Satanás, que están convencidos de que están viviendo, creyendo y haciendo lo correcto.

Mis hijos. ¡Lo único “correcto”, lo único verdadero es vivir con, creer en y actuar con Jesús! Sólo con Él y a través de ÉL encontrarán su camino al Padre. El Nuevo Reino será dado a aquellos que sean fieles a ÉL, el Santo Salvador del mundo, ¡hasta el final!

“Perseveren, Mis amados hijos, porque el fin está muy cerca.” Madre de Dios.

Por favor, conviértanse y vuelvan a Jesús, Mis queridos hijos, y vivan de acuerdo con Sus enseñanzas aquí en la tierra. Quien sea fiel a Jesús no perecerá, pero quien crea, viva y actúe de manera diferente a la enseñada por Jesús y el Padre, seguirá al diablo al infierno. Que así sea.

Así que estén advertidos, ¡porque ustedes están jugándose su feliz eternidad!

Con amor,

Su Bonaventura, que está a la espera a ayudarles a cada uno de ustedes. Pídanme. Amén.

A ustedes les falta intimidad y amor. Lo exterior es más importante para ustedes que su relación con Jesús. Están ciegos, sordos y viven de manera peligrosa, porque cuando llegue el fin ahora, deben haber profesado su fe en Jesús, su Señor y Salvador.

Me aflijo mucho por ustedes, hijos Míos, porque los veo perecer.

597. ¡No reconocerán el chip! — 23.06.2014

Mi hija. Mi querida hija. ¡Lo que te mostramos hoy (en la noche y en la madrugada) ahora se está implementando en su mundo y ustedes deben tomar medidas para contrarrestarlo!

Mis hijos. El diablo y sus seguidores no solo planean su «envenenamiento» a través de las vacunas y el uso del chip, sino que lo hará -dado que mientras tantos hay muchos que estén contra del «chip de ubicación»- de manera camuflado y escondido en una vacuna (especial).

Estén advertidos, Mis hijos, porque no reconocerán el chip en la vacuna y el análisis de la vacuna saldrá que es «limpio». Esto no solo se dirá desde los «círculos satánicos», sino también por parte de los químicos independientes que no pertenecen a los círculos de la élite. Sin embargo, Mis tan amados hijos, una vez que esta vacuna sea declarada «inofensiva y no dañina para la salud» y reconocida como «protección efectiva contra enfermedades especiales», los contaminará y destruirá gradualmente, y dado que la industria farmacéutica elogiará este producto, nadie los va a poder/querer ayudar.

Mis hijos. No acepten las nuevas vacunas, ni el chip de la bestia porque les causarán la muerte. Serán manipulables, ellos controlarán sus sentimientos / emociones, ustedes serán «diáfanos / transparentes» y ubicables en cualquier lugar. Es la marca de la bestia, y a la bestia se perderán, porque quien lleve su número perecerá en cenizas y brasas y será arrojado a la olla de fuego.

Mis hijos. ¡Estén alertos y no acepten los medios y cosas de los «tiempos modernos» tan elogiados, que suenan como si fuesen inofensivos y que «ayudaran», porque solo sirven al propósito del diablo y no para protegerlos a ustedes!

Así que estén advertidos y escuchen Mi Palabra en estos y otros mensajes.

Con profundo amor,
Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación.

«Mi madre habla la palabra verdadera. El tiempo está llegando a su fin y el diablo ahora está comenzando a implementar sus planes en todos los niveles. Estén advertidos y sean fieles a Mí, así no se perderán».

«En ninguna circunstancia acepten la marca del demonio, porque con ella, si la llevan, perecerán«.

Su Jesús quien los ama y Dios Padre, Creador Todopoderoso. Amén.»

596. ¡Ninguno de Nuestros hijos debe tener dudas al respecto! — 22.06.2014

Mi hija. Mi querida hija. Por favor, diles hoy a Nuestros hijos lo siguiente:

Nosotros, el Cielo, los Santos, los Ángeles del Señor, Jesús y Dios Padre, Creador de Todos Nosotros, somos reales, es decir, existimos realmente, ¡y ninguno de Nuestros hijos debería tener dudas sobre aquello!

Mis hijos. Sólo tienen una elección: elegirnos a Nosotros, el Cielo, y por tanto a Jesús y a Dios Padre, o perderse en manos del diablo. No hay nada más donde su alma morará por la eternidad, así que despierten de la fantasía y la negación y enfrenten la verdad, porque quien no elija a Jesús y a Dios Padre seguirá al diablo al infierno, ¡lo quiera o no!

Mis hijos. Hoy, en el Domingo de/después del Corpus Christi, les pido que tomen consciencia de que todos ustedes son Uno, unidos con y en el cuerpo de Mi Santo Hijo, su/Su Iglesia aquí en la tierra. Todos vienen del mismo Padre y todos ustedes son hermanos y hermanas, pero sólo unos pocos de ustedes viven con esta conciencia.

“Sean buenos hijos del Señor y prepárense para amar a su prójimo, porque él -su prójimo- es un hijo de Dios, y como hijos del Señor están obligados a ser buenos los unos con los otros y a ayudarse mutuamente -tanto en lo terrenal como en la fe- y si un hijo ha perdido el camino, ¡tráigalo de vuelta al camino a casa con el Señor Dios! Yo, su San Padre Pío, sufro cuando veo a ustedes, porque incluso los más fieles de entre ustedes tienen poca compasión o comprensión por los que se han extraviado, y eso a pesar de que ellos y ustedes debieran hacer todo lo posible para guiar a esta alma perdida de vuelta hacia el Padre”.

Mis hijos. Los santos sufren porque lo que sucede en su mundo les duele mucho, así como traspasa una y otra vez de la manera más dolorosa el Sagrado Corazón de Mi Hijo. La puntada con lanza que ÉL sufrió en la cruz, la sufre hoy por el comportamiento de todos ustedes.

No se pongan ustedes mismos en primer lugar, sino al que necesita su ayuda, tanto en lo terrenal como espiritual”. Padre Pío.

Mis hijos. Encuentren el camino hacia Jesús y háganse uno con ÉL. El que viva con y en Jesús podrá vivir y poner en práctica Sus enseñanzas. Pidan al Espíritu Santo que EL les ayude, así ustedes se convertirán cada vez más en instrumentos del Señor y ustedes mismos también se acercarán cada vez más a ÉL, Mi Hijo, y al Padre Todopoderoso.

Los amo desde lo más profundo de Mi corazón maternal. Invoquen a sus santos y pídanles ayuda y guía.

Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación con San Padre Pío. Amén.

595. ¡La breve presencia de Mi Hijo “desordenará su mundo” por días! — 21.06.2014

Mis hijos. Su mundo se está desmoronando, ¡pero ustedes no lo ven! Mucha desgracia vendrá sobre ustedes si no se convierten y encuentran a Jesús, Mi Hijo, su Salvador. El tiempo que les queda en la tierra es corto, demasiado corto para tantos de ustedes, porque están tan lejos de Dios, el Señor, siguen al diablo y a sus secuaces sin siquiera darse cuenta, ¡poniéndose así en gran peligro! ¡Mucho sufrimiento vendrá ahora cuando los malvados planes del diablo comiencen a materializarse pronto!

Oren, Mis hijos, ¡oren! ¡Oren por la salvación de todos sus hermanos y hermanas en el Señor y oren por ustedes mismos y por sus seres queridos! Su oración es tan importante, así que ¡oren, oren, oren! Oren de día y oren de noche y oren siempre cuando los llamemos: su oración aleja tanto mal y sufrimiento y ayuda y fortalece a los que son maltratados por estar con Jesús. Respondan a Nuestra llamado en estos mensajes y oren por todos los hijos de la tierra, porque aún tienen la oportunidad de alejar los mayores de todos los males.

Mis hijos. El fin les fue predicho, ¡ahora están en medio de él! Abran sus ojos y oídos y tomen consciencia de que todo acabará pronto. Sólo los hijos fieles de Jesús serán salvados. Pero todos los demás se perderán en manos del diablo y experimentarán el peor sufrimiento. Por tanto, oren por la conversión de todos los hijos de Dios, ¡porque el sufrimiento que les espera es indescriptiblemente cruel!

Mis hijos. Cuando Jesús venga a ustedes, ¡deben haberse convertidos! ¡Deben caer de rodillas y pedirle perdón a ÉL, su Salvador! Deben llevar el arrepentimiento en su corazón y deben llevar la alegría dentro de ustedes. ¡Alegría y amor por ÉL, su Jesús! Su luz deslumbrará a muchos de ustedes y Su amor abrazará de manera especial a los que LE son fieles. Muchos de ustedes morirán, otros caerán en shock, ¡porque Su presencia es poderosa!

Mis hijos. Cada uno de ustedes verá a Jesús y a cada uno de ustedes se le dará su última oportunidad de convertirse, pero será tan cruel para tantos de ustedes ver lo que han hecho mal en sus vidas que estarán confundidos por días o un tiempo prolongado y recién ahí comenzarán de nuevo. Este será el tiempo inmediatamente posterior al Aviso y gran parte de la vida cotidiana de ustedes se parará. Algunos de ustedes no volverán a sus trabajos porque se habrán dado cuenta de que sólo encontrarán la plenitud a través de y en y con Jesús, Mi Hijo. Todo lo demás será secundario y sin importancia para ellos.

Dios Padre: “Bien hecho, porque llegarán a conocer el Nuevo Reino de Mi Hijo.”

Los seguidores de Satanás huirán de Mi Hijo. No serán capaces de soportar Su luz. Correrán y escaparán gritando, incluso se huirán, porque no podrán soportar Su luz, ni el amor que emana de ÉL.

Mis hijos. Prepárense ahora para este tiempo, porque la breve presencia de Mi Hijo “desordenará su mundo” por días, y para este tiempo debieran tener agua y comida, así como velas consagradas en casa. Serán 10 días, pero incluso después el mundo “parecerá diferente” para muchos de ustedes. El gran Aviso durará 15 minutos y cada persona lo experimentará.

Dios Padre: “Bienaventurado el que viva con amor por Mi Hijo.”

Quien viva con amor por Jesús será guiado por ÉL, pero quien LO rechace -incluso en el momento del Aviso- morirá o huirá. Los pecados de ustedes son grandes y sólo Mi Hijo puede perdonarlos. Así que ¡estén completamente con ÉL! Hónrenlo y ámalo a ÉL, entonces el Aviso será agradable para ustedes. Amén. Con amor,

Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.

Quien no sea capaz de comprender Nuestra Palabra, que pida ayuda al Espíritu Santo. Ustedes deben aprender a confiar en Nuestra Palabra, y lo que no entiendan debe (aún) crecer dentro de ustedes. Crean, confíen y sean fieles a Mí.

Su Jesús que los ama. Amén.”

594. ¡Lo que su Padre en el Cielo tiene planeado para ustedes! — 20.06.2014

Mi hija. Mi querida hija. Qué bueno que hayas llegado. Buenos días, Mi sol. Yo, tu Santa Madre en el Cielo, y tu San Bonaventura estamos aquí. Por favor, hoy diles lo siguiente a los hijos de la tierra:

Todos estamos aquí por ustedes. Las puertas del Cielo están abiertas para aquellos que se han auto-regalado y entregado sinceramente y de todo corazón a Jesús, Redentor y Salvador del mundo. Todo aquel que es fielmente entregado a Jesús, que LO honre y LO ame, entrará en la maravillosa eternidad del Señor preparada para todos los hijos de Dios que elijan consciente y sinceramente a Jesús y a Dios Padre.

Mis hijos. Yo, su San Bonaventura, les digo hoy: ¡Merece la pena anhelar y alcanzar la santidad durante la vida! El regalo que les espera no puede describirse con palabras terrenales, ¡pues el amor del Padre que les espera y que les será dado es más grande, más hermoso, más glorioso que todo lo que podían alcanzar en su vida terrenal!

Mis hijos. Su santidad es importante, y es lo que su Padre en el Cielo tiene planeado para ustedes. Todo aquel que muere por su fe en Jesús, su Salvador, tiene reservado un lugar especial en el reino celestial del Señor. Será recibido en el reino del Señor con el canto de los ángeles y el sonido de los trombones, y no habrá rodeos para él. Irá directamente a Dios Padre y a Jesús, y esto por sí sólo sería regalo suficiente para que valga la pena entregar su vida al Señor.

Pero, hijos Míos, los dones del Señor son aún mayores y a ustedes se les serán dados en abundancia, ¡pues lo que tan cruelmente tenían que aceptar y soportar, sufrir en su mundo de aquí será inmediatamente compensado por el amor infinito del Señor, del Padre y del Hijo! Serán elevados y todo sufrimiento será olvidado, porque lo que espera a cada mártir es más grande, más bello, más poderoso y más glorioso que cualquier cosa que una persona en la tierra pueda imaginar.

Mis hijos. ¡Aguanten! ¡Su muerte nunca será en vano, porque ustedes son fieles a Jesús y ayudan a ser corredentores de muchos hermanos y hermanas en el Señor! ¡Crean y confíen y estén completamente unidos a Jesús! ¡Refúgiense en Su amor y únanse uno con Él!

Oren, Mis hijos, oren, ¡porque las persecuciones son muy crueles! ¡Sus hermanos y hermanas en el Señor están sufriendo y su oración fortalece y da amor y fuerza! Ustedes deben ser uno como el Ejército Remanente de Jesús, porque en la unidad ustedes son fuertes y poderosos, ¡y a través de sus oraciones están todos unidos!

Así que oren, Mis hijos, y aguanten un poco más. Las puertas del Cielo están abiertas para ustedes, y todo aquel que sea fiel a Mi Hijo alcanzará el Reino de los Cielos. Que así sea. Con profundo amor,

Su Madre en el Cielo que tanto los ama, y San Bonaventura que está a la espera para ayudar a todos ustedes. Amén.

593. ¡La faz de su tierra ahora cambiará! — 19.06.2014

Mi hija. Mi querida hija. Por favor, diles a Nuestros hijos hoy lo siguiente:

La faz de su tierra (ahora) cambiará, pues su apostasía es grande, sus pecados pesan mucho, sus aberraciones son inmensas y sus actos son una vergüenza ante la faz del Señor.

Mis hijos. Si no vuelven a Jesús ahora, ¡será demasiado tarde para ustedes! Deben encontrarle a Él, su Salvador, ¡para no perecer y perderse en la agitación de su mundo! Una gran parte de sus países se perderá, será borrada del globo de su tierra y con ellos sus habitantes incrédulos, ¡que se perderán TODOS al diablo!

Sólo los hijos fieles del Señor se salvarán, pero todos los demás tendrán que responder por su incredulidad, sus actos vergonzosos, sus pecados y sus corazones petrificados, y el verdadero juicio (del último día) vendrá sobre ellos, ¡y (ya) no podrán recurrir a la misericordia de Mi Hijo!

Hijos, ¡evítense este sufrimiento! ¡Conviértanse ahora y den su SÍ a Jesús! ¡Así podrán convertirse en buenos hijos del Señor y en verdaderos seguidores de Jesús!

Hagan penitencia, arrepiéntanse y -si pueden- ¡vayan a la Sagrada Confesión! Si ya no tienen la oportunidad de confesarse -a causa de todos los actos crueles que ya han comenzado- ¡oren y pidan perdón a Dios Padre y a Jesús, su Salvador! ¡Todavía tienen la oportunidad de confiar en la misericordia de Mi Hijo! Pero ya pronto, tan pronto como comience el fin del fin, ¡será demasiado tarde para la mayoría de ustedes!

¡Escuchen Mis palabras! ¡Tomen en serio Nuestra advertencia! El fin está mucho más cerca de lo que piensan, y una vez que el gran Aviso haya tenido lugar, ¡todo llegará a su fin muy rápidamente!

Crean y confíen y estén en todo momento con Nosotros, con su Madre en el Cielo, con Jesús, su Salvador, ¡y confíen en los Ayudantes Celestiales del Señor!

¡Estamos todos a la espera para ayudarlos! Así que pídannos ahora y prepárense.

Con amor y confianza en Dios,

Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.