238. Es importante que sepan que la decisión que ha sido anunciada llegará pronto — 20.08.2013

Mi hija. Mi querida hija. Su mundo es hermoso, pero pronto ya no será como ustedes lo conocen.

Mis hijos. Es importante que sepan que la decisión que ha sido anunciada llegará pronto.

Aquellos de ustedes que se han preparado, que siguen a Jesús, que son buenos con sus hermanos y hermanas, que viven de acuerdo con la voluntad de Dios, en amor, en paz y en alegría, que se sacrifican, que difunden Nuestra Palabra, oran y hacen penitencia por otros, los que se arrepienten de sus pecados, hacen penitencia y se consagran a Dios, a Jesús y a Mí, a ellos se les regalará el Nuevo Reino de Mi Hijo, un mundo creado por Dios Padre para todos Sus amados hijos, en el que la belleza, que es de una singularidad que no conocen, la alegría, el amor, el estar con Nosotros y muchas otras glorias que Dios, el Padre de todos Nosotros tiene preparado para ustedes, serán el regalo de cada uno de Sus hijos que realmente lo aman.

Por lo tanto, Mis hijos tan amados por Mí, prepárense para este día, porque si no se han decidido por Dios Padre, si continúan siguiendo al diablo y / o la incredulidad, si glorifican a otros dioses y sean malos con sus hermanos y hermanas, si continúan pensando solo en ustedes mismos, en su pequeña familia, solo nutren su prosperidad y su egoísmo, si continúan persiguiendo los placeres transitorios y no se preocupan por Dios el Altísimo, entonces, Mis tan amados hijos, este día terminará mal para ustedes. Serán rechazados, no serán llevados y demasiado tarde se darán cuenta de lo que han hecho a sí mismos y a aquellos que ustedes han alejados de Dios.

Sufrirán la angustia más terrible y luego, cuando llegue el día de la decisión, cuando la batalla final se haya luchado y todos los seguidores de Cristo estén preparados para entrar en el Nuevo Mundo Glorioso de Mi Hijo, entonces, Mis queridos hijos, ustedes serán rechazados y condenados, porque el diablo los arrastrará consigo, vencido por Mi hijo y como LE han negado su SÍ a ÉL, su Redentor, ÉL no los puede salvar y tiene que mirar como su alma cae cruelmente en el lago de fuego.

Decídanse, Mis amados hijos, por Mi Santo Hijo, porque ÉL es su «boleto» a la gloria, su Protector, su Salvador, su Redentor, QUIEN los conducirá a los brazos de Su Santo Padre si ustedes lo permiten.

Un SÍ. Siempre repetido. SÍ, Jesús, SÍ, Jesús, Sí, digo SÍ a Ti, y no se perderán. Que así sea.

Su Madre en el Cielo quien los ama.

Madre de todos los hijos de Dios y Dios Padre (Quien está a su lado).

Amén.

237. ¡Poco después todo habrá terminado y deben haberse decidido por Nosotros! — 19.08.2013

Mi hija. Mi querida hija. Escribe, Mi amada hija. Tú has sido elegida para proclamar Mi Palabra, y tú haces esto porque la Santa María, siempre virgen y sin pecado concebida se te aparece.

Mi hija. Puedes estar segura de que no es fácil para Nosotros encontrar hijos que estén preparados para recibir Nuestra palabra. Muchos se han cerrado [no quieren saber nada] de Nosotros, de Mí, su Santo Padre, lo que Me pone muy triste a Mí, Quien Soy el Creador de todos ustedes.

Yo, Dios Todopoderoso, el único y verdadero Dios, vengo a ti, Mi amada hija, para que a través de ti Nuestros hijos puedan ser despertados. Tu SÍ a María y a Mi Hijo, tu amor por ellos, tu gratitud y tu alegría de poder vivir con Nosotros aquí en la tierra te ha hecho fuerte y te ha acercado cada vez más a Nosotros.

Tu trabajo es importante. Muy importante. Y él de todos tus colaboradores también. Deben continuar difundiendo Nuestra palabra, porque es a través de Nuestra palabra que se alcanzan muchas almas. Es a través de la difusión de estos y otros mensajes de Nosotros que tantos hijos se salvarán, y es a través del amor de ustedes que estos mensajes se propagan y tocan muchos corazones. Gracias, Mis hijos, los amo mucho.

¡Pronto ya habrá terminado el tiempo de preparación, y entonces todos ustedes que todavía son incrédulos deben haberse convertido a su Padre! No queda mucho tiempo, porque ya pronto la miseria en su mundo será de tal magnitud de que Mi mano misericordiosa intervendrá y Mi Hijo Me traerá a todos Mis hijos creyentes.

Hijos Míos, lean estos mensajes, tómenlos y digiéranlos. Luego preparen su alma para el gran Día de Alegría, que será precedido por el aviso, la unión con Jesús. Estén preparados para ÉL y este maravilloso encuentro con ÉL, Mi Santo Hijo, su Redentor, porque ya poco después todo habrá terminado y deben haberse decidido por Nosotros.

No esperen más y vengan a Mis Santos Brazos Paternales, porque Yo, su Padre Celestial, los estoy esperando ansiosamente y Mi Amor Paternal no conoce límites, tan grande es, tan profundo y tan amoroso.

Me gustaría abrazar a cada uno de ustedes con Mi Amor, pero como respeto su libre albedrío, espero pacientemente y con amor a su SÍ.

Con profundo amor,

su Padre Celestial.
Dios el altísimo. Creador de todo ser.

Amén.

 

Madre de Dios: «Mi hija, divulga esto. Y: Sí, fui concebida sin pecado. Estos son los milagros de Nuestro Padre. Te amo. Amén.»

236. ¡Regresen al verdadero Dios trino! — 18.08.2013

Mi hija. Mi querida hija. Yo, tu Madre en el Cielo, Me gustaría hablar contigo:

Disfruten de sus momentos bonitos y siempre piensen positivamente. Hay mucho sufrimiento en su mundo, pero esto ha sido deliberadamente «hecho» por personas inhumanas codiciosas de dinero y otras posesiones, obsesionadas con el poder, para quienes una vida humana no vale nada, pero que están «enfermos» de querer controlar y de egocentrismo.

Mi hija. Estas personas tienen corazones tan devorados por los demonios del diablo que ustedes tienen que orar por ellos. Solo su oración suavizará estos corazones, y esos solo si oran por ellos íntimamente y con amor. La oración hace que todo sea posible, pero ésa debe decirse con fe.

Mis hijos. El tiempo en que están viviendo está alejado de Dios, es decir ustedes se han alejados, han seguido a dioses falsos, los están adorando y [luego] se asombran por todo el sufrimiento que ha afectado su tierra. Regresen al verdadero Dios trino o y todo estará bien.

Oren a Él, hónrenlo, demuéstrenle su respeto, vivan de acuerdo con SUS mandamientos y las enseñanzas de Su Santo Hijo Jesús, porque a través de ÉL llegarán al Reino de los Cielos, a través de ÉL se liberarán del pecado, y a través de ÉL regresarán a casa con Dios, su Padre y finalmente vivirán el amor que les ha sido negado por tanto tiempo.

¡Dense la vuelta! ¡Denle a Jesús su SÍ, y los desaguisados del mundo de hoy darán paso al amor! ¡Den el primer paso y sean buenos con su prójimo, entonces su mundo volverá a ser más hermoso! ¡No solo piensen en su [propia] prosperidad, sino que comparten con sus hermanos y hermanas (su prójimo), entonces sus corazones volverán a ser felices, su risa volverá a ser pura alegría y su alma se llenará de felicidad y amor!

Así que dense la vuelta y sigan a Mi Hijo, entonces las promesas se cumplirán para ustedes y el Nuevo Reino de Mi Hijo será su Nuevo Hogar.

Que así sea.

Los amo.

Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios.

 

Amén.

«Amén, les digo esto:

Si no escuchan a Mi Madre, se perderán.

Si ignoran su llamada, se perderán. 

Si no creen, no confían y no LE honran, su alma se perderá, porque es ELLA a quien envió Mi Padre para anunciarles a ustedes Su palabra. 

Es ELLA quien prepara su alma para la Nueva Era de Gloria y para Mi Segunda Venida, que está a la vuelta de la esquina. 

Es ELLA quien fue levantada para ser la Madre de todos los hijos de Dios por el Padre mismo, y la Biblia ya dice que se debe honrar al Padre y a la Madre.

¡Así que honren a su Madre, su Santa Madre de Dios, ¡y demuéstrenle su respeto! Oren a ella, celebren sus días de honor (días festivos) y ÁMENLA como su madre biológica, porque ELLA es su Madre Celestial e intercede por cada uno de ustedes. Porque todos ustedes son sus hijos, y así será por siempre. Demuéstrenle respeto y escuchen su palabra. Entonces también Me encontrarán a Mí y Yo los llevaré al Padre. Que así sea.

Su Jesús Quien los ama.
Redentor de todos los hijos de Dios.
Hijo de la Santa María.

Amén.»

«Gracias, Mi hija. Ahora duérmete.»

235. ¡Sus palabras dulces los destruirán! — 17.08.2013

«Mi hija. Mi querida hija. Siéntate conmigo. En su tiempo actual deben disfrutar de sus bellos momentos más que nunca. Siempre sean buenos los unos con los otros y disfruten las cosas que Dios Padre les da. Demasiados problemas, dificultades y juegos de poder los están esperando allí afuera en el mundo. Así que disfruten de sus momentos de descanso y vivan en paz el uno con el otro.

Sus gobiernos están jugando un juego malvado con ustedes, y las condiciones mundiales solo empeorarán. La paz «comprada» no es la verdadera paz, porque ésa solo existe en los corazones de las personas, y nadie puede comprar estos.

¡No se auto engañen! ¡Escuchen a su corazón! Oren a Nosotros y manténganse fieles a Dios Padre. ÉL pronto enviará a Su Santo Hijo para poner fin a toda la miseria e injusticia, y Sus seguidores fieles y amorosos entrarán en Su Nuevo Reino.

No escuchen a las palabras falsas de los hipócritas de su tiempo. Ellos no están haciendo nada bueno. ¡Tengan cuidado con todas sus mentiras, porque sus palabras dulces los destruirán tal cual como eliminan a Mi Hijo de su vida, lo que es equivalente a la destrucción de ustedes, porque Mi Hijo es su Redentor! ¡Él es el camino al Nuevo Reino, el camino de regreso a casa, a Dios Padre!

Por eso, Mis hijos tan amados por Mi, no crean a los hipócritas de su tiempo actual y mantengan a Jesús en sus corazones. Allí nadie se lo puede robar, y su amor y alegría vivirán en ustedes y los conducirán a través de estos días oscuros.

Que así sea, Mi amado rebaño de niños.

Los amo.

Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios.

 

«¡Escuchen a lo que dice Mi madre, porque es su palabra la que los salvará!

Su Jesús. Amén.»

 

«Hija Mía. Mi María prepara a cualquiera que lo desea para encontrar a Nuestro Santo Hijo y el Reino de los Cielos. Acepten su amable y amorosa ayuda para que no se pierdan. Gracias. Su San José. (Dios Padre está sonriendo alegre y amorosamente). Amén.»

«Gracias, Mi hija. Ahora vete.»

234. Su mundo es malo, pero por su confianza en Nosotros están protegidos — 16.08.2013

«Mi hija. Mi querida hija. Yo, tu San José, estoy aquí. Siempre estoy contigo, cuidando de tu marido también. Puedes estar seguro de que todo estará bien y no tienes por qué preocuparte nunca. San Dismas está entre ustedes. Esté tranquila y en paz. Ustedes están siendo protegidos y cuidados en todos los sentidos. *

«Confía, Mi hija. Mi querida hija. Yo, tu Santo Padre en el Cielo, vigilo a ti y a ustedes. Que así sea.”*

(*mensaje recibido durante el auge de la delincuencia organizada en la zona)

«Mi hija. Su mundo es malo, pero por su confianza en Nosotros están protegidos. Díselo a Nuestros hijos, porque los amamos mucho. Yo, su Santa Madre en el Cielo, los vigilo, pero ustedes deben querer esto. El que no reza a Nosotros, el que no habla con Nosotros, a él no se le concederá la protección celestial, porque no la ha pedido.»

«Deben decirnos que intervengamos, porque nunca actuamos contra su libre albedrío. Díselo a Nuestros hijos, Mi querida hija. Yo, su Santo Padre en el Cielo, espero ansiosamente que se dirijan a Mi todos Mis amados hijos, pero muchos no dirigen su palabra a Mí, ni tampoco a Mi Santo Hijo. Por favor, vengan a Nosotros, Mi tan amado rebaño de niños, y dennos su confianza. Su vida será mucho más rica, pero no esperen riqueza financiera. Ésta no les traerá la felicidad, la alegría ni tampoco satisfacción.

¡Mi riqueza, sin embargo, les permite vivir! ¡Les permite ser felices y llenos de alegría! Estarán rodeado de amor y vivirán en el amor. Un amor que los llena, que enriquece sus corazones y solaza a su alma. No conocen Mi riqueza, porque si la conocieran no querrían nada más.

Pregunten a los que han probado de él. Una y otra vez lo prueban y se sienten cada vez más satisfechos. Ellos viven su vida Conmigo, su Padre Celestial, y Yo les regalo Mis riquezas, riquezas que les dan la verdadera alegría, que los elevan y que los hacen felices y que los dejan vivir entre ustedes como hijos de Dios en plenitud.

Pregúntenles. Con alegría se lo contarán, pero pueden ver en ellos sin preguntarles nada que están en plenitud y llenos de alegría, incluso cuando están siendo golpeados por un gran sufrimiento. Porque ellos aceptan, ofrecen [sus dolores como] sacrificios y se declaran preparados para este sufrimiento y así ayudan a expiar para ustedes, las almas incrédulas y perdidas, para que también ustedes encuentren a Mí.

Conviértanse, Mis hijos, y grande será Mi alegría paternal.

Los amo tanto.

Su Padre en el Cielo.
Creador de todos los hijos de Dios y creador de todo el Ser.

«Mi hija. Divulga esto. Te amo. Tu Madre en el Cielo».

 

«Amén, les digo esto: 

Quien no se dirija a Nosotros, no le podremos ayudar.

Quien cierra su corazón para Nosotros, no lo podemos encontrar con amor, porque el está cerrado a Nosotros, encerrado y nada Yo puedo hacer si no Me busca, porque respeto su libre albedrío, y esperaré a el que se arrepienta y Me dé su SÍ.

Entonces vendré a llenar su corazón y estaré a su lado en TODOS los asuntos de su vida.

Que así sea.

Su Jesús Quien los ama.
Salvador de todos los hijos de Dios.

Amén.»

233. ¡Vuelvan a abrir sus corazones! — 15.08.2013

Mi hija. Mi querida hija. ¡Que lindo que todos hayan venido a Mí / a Nosotros porque hoy es Mi día de festivo y la alegría en el Cielo es grande!

Mi Hijo y Su Santo Padre Me llevaron a Mí, su sierva, al Reino de los Cielos y extremadamente feliz y llena de alegría y una felicidad indescriptible, se Me permitió entrar en esta maravillosa gloria y vivir unida a Mi Hijo, a los Santos Ángeles y a otros Santos al lado de Dios Padre.

Desde entonces intercedo ante el trono de nuestro Padre, el Padre de todos Nosotros, y rezo por cada uno de ustedes porque Yo, la sierva de Dios, conozco sus necesidades, dificultades, preocupaciones, miedos, alegrías y sufrimientos. Estén seguros de que no pasa ni un día sin que se ore por todos ustedes, porque Mi corazón está lleno de amor y compasión por ustedes y anhelo que ustedes también puedan sentir este gran gozo, el amor íntimo y universal de Nuestro Padre Celestial y que puedan vivir con Nosotros en el Cielo.

Mis hijos. Es tan importante que se conviertan a Mi Hijo y que encuentren a través de ÉL a Nuestro Padre. El alma de ustedes anhela la unión con Dios, su Creador, aunque como terrícolas quizás no lo sientan. Las circunstancias externas de su mundo a menudo no permiten que este maravilloso amor de Nuestro Padre penetre su corazón, porque está cerrado por toda la maldad que existe en su mundo y la que ustedes enfrenten diariamente. Es un tipo de autoprotección para muchos de ustedes, pero de esta manera se están auto aislando de los divinos regalos y maravillas, porque su corazón está cerrado y donde no se abre el corazón, no se puede poner nada bueno adentro.

Por tanto, Mis hijos tan amados por Mí, ¡vuelvan a abrir sus corazones y levanten y prepárense para todos los maravillosos regalos que su Padre tiene guardados para ustedes! No se cierren a Su amor, a Su bondad y a Su maravilloso calor misericordioso, porque ÉL, que es omnipotente y que en su omnipotencia los creó a cada uno de ustedes, quiere darles su amor, tomarlos en Sus brazos paternales y conducirlos de vuelta a Su casa.

Para este propósito ÉL envió a Su Santo Hijo para que todos ustedes puedan caminar el camino de vuelta a casa, pero desafortunadamente ustedes usan su libre albedrío en contra de Él, y como Él, el Padre Todopoderoso, les ha dado este libre albedrío como un regalo, Él nunca lo infringirá.

Decídanse por su Padre, Dios Altísimo, y entren en Su maravillosa gloria que ÉL ha creado con el amor más grande por cada una de sus criaturas.

No se cierren a Aquel Quien los ama verdadera y honestamente, porque sólo con Él pueden ser felices, sólo a través de Él serán liberados del pecado, sólo ÉL les perdonará sus pasos en falso y los abrazará con el amor más grande, sólo Él les dará la Vida Eterna y los dejará vivir en perfecto amor, justicia y armonía en el Nuevo Reino, porque ÉL quiere que estén bien, que compartan su vida con Él y que estén llenos de alegría y felicidad.

Mis hijos. Estén seguros de que todos ustedes quienes Nos sirven a Nosotros serán recibidos en el Cielo con la mayor alegría. No se perderá ni un solo hijo, pero les pedimos que también sigan rezando y aceptando sufrimiento por Nuestros hijos perdidos.

Los amo. A cada uno de ustedes. Porque como Madre de Dios Soy la Madre de todos los hijos. Así es como Dios Padre lo ha querido y así debe ser.

Los amo, Mis hijos. Vengan todos a Nosotros. Unidos viviremos juntos en el Nuevo Reino de Mi Hijo y grande será la alegría entre Nosotros porque es el amor el que nos alimenta, el amor el que nos hace felices y la bondad y la gracia de Dios Padre, Nuestro Señor, el que nos de plenitud.

Que así sea.

Gracias por escucharme.

Su Madre en el Cielo quien los ama.
Madre de todos los hijos de Dios.

232. Las atrocidades serán peores donde el anticristo y su falsa «religión» estén en casa —14.08.2013

Mi hija. Mi querida hija. El tiempo será hermoso en el Nuevo Reino de Mi Hijo, porque vivirán allí libre de pecado en perfecto amor, y ya no los oprimirán ninguna pelea, ninguna atrocidad, ningún sufrimiento, ninguna necesidad. Serán «libres», liberados del diablo, de la serpiente malvada que ha poseído a muchos de los habitantes de la tierra, y estarán felices, servirán a Dios, Nuestro Señor, con gran alegría, porque serán verdaderos hijos de Dios y el amor de su padre que lo abarca todo siempre estará con ustedes, notable para todos, relajante, gentil, calmante y estimulante y grande será su alegría y hermosa su existencia como verdaderos hijos de Dios.

Mis hijos. Aguanten un poco más. El tiempo apremia para la conversión de almas, porque muchos de ustedes todavía están perdidos. Lo que está sucediendo en el Medio Oriente es una producción del demonio, y desde allí celebrará su triunfo, pero estén seguros de que nunca será un triunfo real, porque pronto Mi Hijo vendrá del Cielo y los liberará de la miseria y de la esclavitud del maligno, y arrojará TODOS aquellos que han actuado irresponsablemente contra los hijos de Dios, incluyendo las cabezas del grupo del mal y sus líderes, al lago de fuego del cual no habrá escapatoria.

Las atrocidades están aumentando en todo el mundo, pero serán peores donde el anticristo y su falsa «religión» estén en casa. Hay muchas personas buenas que pertenecen a esta «religión», pero [esta religión] está siendo usada por los poseídos para «degollar», perseguir, torturar y cometer atentados contra los que no son creyentes en los ojos de ellos. Cada mentira es adecuada para ellos para aniquilar a otros que para ellos son impuros. Cualquier medio es apropiado para ellos para implementar sus atrocidades. Poseídos ​​por el demonio y guiados por los que son obsesionados por el poder asesinan en nombre de su religión y no ven que están siendo engañados por la misma bestia.

La mano de Dios Padre golpeará a estos «inhumanos» particularmente fuerte, porque se comportan peor que los animales salvajes y han cambiado su dignidad humana por la anomalía. Tal alma experimentará sufrimiento eterno, porque el demonio se ha apoderado de ella, y si no se den vuelta luego, recibirán más que el castigo justo por sus actos vergonzosos y despectivos contra la humanidad, porque el demonio mismo se “preocupará” de ellos y disfrutará de su agonía y dolor, sus gritos y miedos, sus dolores y sufrimientos.

Mi hija. Los tiempos de su tierra son malos y se volverán aún peores. La oración les ayudará a mantenerse fieles a Mi Hijo y a Dios Padre y los protegerá de las trampas del diablo.

Permanezcan leales a Nosotros y sean buenos el uno con el otro.

Los amo.

Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios.

«Qué cierto, qué cierto.

Quien no se convierta a Mi,

el que mata, miente y degolla,  

quien rinda homenaje a la bestia y haya jurado lealtad a la religión falsa perecerá miserablemente, y su eternidad será un infierno.

Pero quien se de vuelta y Me de su SÍ, lo salvaré y la belleza del Cielo también se le revelará.

¡Así que dense la vuelta mientras aún haya tiempo, y denme a Mí, su Redentor, su SÍ! Mi misericordia perdonará sus pecados, sin embargo, ustedes deben dar el primer paso, arrepentirse y hacer penitencia.

Los amo, Mis queridos hijos, y nada agrada tanto a Mi Corazón como verlos a todos unidos en Mi Reino.

Vengan, Mis hijos, vengan, porque el tiempo de los últimos días terrestres está comenzando, y pronto ya entraremos juntos en la Nueva Gloria de Mi Santo Padre.

Vengan, Mis hijos, vengan. Yo, su Jesús, los estoy esperando.

Que así sea.

Su Jesús Quien los ama.

Redentor de todos los hijos de Dios.

Amén.

231. Los Santos están entre ustedes y pueden y quieren ayudarlos — 13.08.2013

Mi hija. Mi querida hija. Siéntate conmigo y escribe, Mi sol. Yo, tu San Bonaventura, estoy aquí contigo y me gustaría decirte a ti y a todos los hijos de la tierra lo siguiente:

Prepárense. Sean buenos y piadosos. Oren, Mis hijos, mucho e íntimamente. Visiten sus iglesias. Participen en sus Santas Misas y acudan a Nosotros, sus Santos Ayudantes, porque Nosotros estamos entre ustedes si Nos llaman, Nos piden apoyo y ayuda. ¡Acérense a Nosotros, porque estamos aquí para ayudarlos!

Mis hijos. Su Señor, el Señor en el Cielo, quien es el Padre de todos ustedes, Creador del cielo y de la tierra, así como de cada uno de ustedes, quiere que estén felices y salvos, por lo que envía a Sus Santos Ayudantes para que tengan ayuda, encuentren consuelo, encuentren apoyo y no estén solos. Con ellos están en Compañía Celestial y éste es un regalo maravilloso para ustedes. 

Confíen en ellos y vivan con ellos. ¡Verán y sentirán cuán maravillosamente se cambiará su vida! Llámenlos para todo lo que no pueden hacer por su propia cuenta y recurran a ellos también en momentos de felicidad. Los santos están entre ustedes y pueden y quieren ayudarlos, pero ustedes deben desearlo. Oren a ellos y llámenlos. Estarán allí para ustedes, intercederán por ustedes y les ayudarán en lo concreto.

Crean y confíen, porque así será.

Los amo. Cada uno de ustedes.

Su Jesús quien los ama y su San Bonaventura.

230. Visión del camino al Nuevo Reino — 12.08.2013

Mi hija. Mi querida hija. Alégrate, porque Yo, tu Santa Madre en el Cielo, estoy aquí para darte a ti y a tu familia un momento maravilloso, porque grande fue el sufrimiento que aceptaron, grande y mucha la penitencia que hicieron. Estos días ya están pasando, te lo prometo, Mi hija, para que se tranquilicen y se fortalezcan hasta que los llamemos la próxima vez.

Mi hija. ¡Acepta a todos los sacrificios! Todo sufrimiento ayuda a salvar almas que, de lo contrario, se habrían perdido. Es una tarea difícil para ustedes, pero Nosotros los ayudamos a llevarla. Pueden estar seguros de que todo su sufrimiento valga la pena.

Visión que se me muestra: Jesús brilla y sonríe amorosa y maravillosamente. EL me muestra el camino hacia el Nuevo Reino. Tal luz, tal amor, tal alegría, tal ligereza. No tengo palabras. Solo veo la puerta y un poco más allá, pero eso es muy «nebuloso», poco claro, borroso. Jesús nos lleva a todos con ÉL, a todos nosotros quienes Le dimos nuestro Sí y aquellos por quienes hemos sufrido. Estas almas son de alguna manera inseguras, confusas, asombradas, pero están siendo llevadas y Jesús está allí para observar y guiarnos a cada uno de nosotros. No veo que estamos llevando algo, pero todo está ahí. Fin de la visión.

Dile eso a Nuestros hijos. Todo lo que necesitan está disponible y sí, su sufrimiento será recompensado porque salva a los incrédulos y también a las almas perdidas. Sigan orando, Mis tan amados hijos, porque el fin está cerca y el tiempo es corto para el arrepentimiento. Los amo.

Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios, con Jesús, Dios Padre, los Santos y los Santos Ángeles.

Todos los esperamos con gran amor y gran alegría. Amén.

Gracias, Mi hija. Ahora vete.

229. ¡No se arroguen juzgar a otros, porque eso es un pecado! — 11.08.2013

Mi hija. Mi querida hija. Siéntate. Te amo. Nunca debes preocuparte por lo que dicen los demás, porque estas personas no saben nada de ti, de tu tarea y de lo que tienes que soportar. Trata siempre de permanecer en el amor y no tomes a pecho las palabras feas. Solo las almas pobres juzgan de esa manera, solo las personas malas hablan mal de los demás, difunden mentiras y se sienten fuertes en presencia de otros para humillarte. Perdónalos. No saben cuánto te lastiman porque no ven quién eres, un alma excelente, elegida por Nosotros y afligida con mucho sufrimiento y expiación para salvar a los demás. No te preocupes por sus palabras y trata siempre de permanecer en el amor.

Siempre habrá personas que piensan que tienen que hacer el mal a los demás, por la razón que sea. La hipocresía es un pecado, ¡recuerden eso! Hablar mal de los demás también es un pecado, ¡recuerden eso también! ¡Sean buenos el uno con el otro y no se ataquen mutuamente! ¡Siempre traten de entender, encuéntrense con amor y no juzguen! ¡Esto solo está permitido a Dios Padre, porque solo ÉL puede saber quiénes en realidad son, cómo en realidad son y qué hacen, en qué circunstancias viven, qué logran y cómo expían! ¡Así que no se arroguen juzgar a otros, porque eso también es un pecado!

Mi hija. Tienes que protegerte. Para evitar nuevos ataques contra ti, debes mantener tu identidad y no revelarla a nadie. La habladuría no te hace bien, tu alma es demasiado sensible y tierna para poder sobrevivir esto de manera ilesa. Tu eres inestable [emocionalmente], necesitas descansar y no te debes distraer por tales circunstancias externas.

Mi hija. ¡Te amo! ¡Todo el cielo está contigo! Necesitamos que te concentres en Nosotros y no queremos distracciones terrenales que te «atrasan». Siempre mira hacia adelante y continúa enfocando tu vida completamente en Nosotros. Ese es el camino que Dios Padre pretendía para ti. ¡Este es tu camino, la vida con Nosotros! ¡Alégrate, porque también Nosotros Nos alegramos mucho!

Da a conocer esto, Mi hija, y diles a Nuestros hijos que nunca deben hablar mal de los demás. No deben juzgar, sino estar en el amor, y deben entregar todo a Dios Padre. Diles eso, Mi hija.

¡Te amo!

Tu Padre Celestial con Jesús y tu Madre en el Cielo quien te ama. Madre de todos los hijos de Dios.

Vete ahora, Mi hija.