198. ¡Hagan penitencia y arrepiéntanse de sus actos pecaminosos y luego vengan a Mis Santos brazos paternales! — 9.07.2013

Mi hija. Mi querida hija. Yo, tu Madre en el Cielo, quiero decirte a ti y a todos Nuestros hijos hoy que el tiempo como ustedes lo conocen está llegando a su fin y que solo aquellos que son puros de corazón serán llevados a la Nueva Eternidad, es decir al Nuevo Paraíso que fue creado por Dios, Nuestro Padre amoroso, para todos sus hijos, para que puedan vivir juntos en armonía, amor, seguridad y felicidad.

Donde el cielo y la tierra se vuelven uno, su alma vivirá en perfecta felicidad y satisfacción. Serán verdaderos hijos de Dios, es decir finalmente podrán vivir su amor que fue regalado a cada hijo de Dios, y estarán bien.

Maravillosa será la vida para ustedes, donde el cielo se une con la tierra, porque no habrá malicia ni odio, pena ni sufrimiento. Por eso, Mis tan amados hijos, límpiense y arrepiéntanse de sus pecados, preparen su alma para este maravilloso tiempo, porque cundo Jesús viene en la altura del cielo deben estar preparados para ÉL y sus corazones puros.

Que así sea.

Su Madre en el Cielo quien los ama.
Madre de todos los hijos de Dios.

 

«Mi niña. Mi hija. ¡Yo, tu Padre Celestial, espero con ansias el regreso de todos Mis hijos en este gran día! ¡Pero solo aquellos de ustedes que se hayan preparado pueden entrar en Mi mundo nuevo, creado para ustedes!

La Nueva Jerusalén los está esperando, así que preparen su alma. ¡Hagan penitencia y arrepiéntanse de sus actos pecaminosos y luego vengan a Mis Santos brazos paternales!

¡Amo a todos Mis hijos! Espero a cada uno de ustedes y quiero abrazar a cada uno de ustedes con mi Santo corazón paternal, tanto es que los quiero, no importa cuán perdido estuvieron y que hayan ido por el mal camino.

Si se arrepienten y realmente se liberan del pecado, entonces Mis amados hijos los abrazaré con Mi amor, los prodigaré con Mis regalos y les daré una vida en la gloria eterna, ¡tanto es que los amo!

¡Regresen todo a Mí, su Padre y Creador en el Cielo! 

¡Los espero a todos con Mi amor, Mi bendición y espero con ansias este tiempo maravilloso!

Los amo. Cada uno de ustedes.

Su Padre Celestial con Jesús.»

 

«Amén, les digo esto:

Quien no honre a Mi Padre no será digno de entrar en Mi Reino.

Quien no Me de su SÍ, no lo podré llevar conmigo.

Usen su libre albedrío y sálvense, Mis hijos tan amados por Mí, pero ay de él quien se Me opone. Su alma será perdida, sufrirá los tormentos del infierno para siempre.

Así que vengan a Mí, su Redentor, y la eternidad será hermosa para ustedes.

Los amo. A cada uno de ustedes. ¡Y les perdono! Pero deben arrepentirse.

Su Jesús quien los ama.
Redentor de todos los hijos de Dios.»

197. Es el corazón, el corazón de ustedes, él que les permite comprender el misterio de Dios — 08.07.2013

Mi hija. Mi querida hija. Gracias por escribir tanto.

Comprender la Palabra de Dios requiere un corazón verdaderamente puro. Sin un corazón puro siempre tendrán dificultades, porque es el corazón, el corazón de ustedes, él que les permite comprender el misterio de Dios.

Quien no esté libre de pecado, es decir quien no se haya arrepentido de sus pecados cometidos tampoco encontrará el camino a Dios, porque su corazón es impuro y le impide encontrar a Dios. El no entenderá cuán fácil es el camino hacia la felicidad y la gloria porque lleva el mal adentro de él, debido a que no se arrepiente.

Mis hijos, es tan importante que abran sus corazones y hagan espacio para Mi Hijo y Dios Padre dentro de ustedes! Tienes que prepararse, porque solo podrán recibir debidamente a Mi Hijo con un alma pura, solo con el corazón abierto ÉL podrá salvarlos y guiarlos de regreso a casa donde el mal no existe, donde solo el amor está en casa, que su alma tanto anhela.

A través de todos sus pecados no arrepentidos, bloquean el camino a la gloria. Ustedes se ponen a sí mismos obstáculos aparentemente insuperables en el camino. Es como si dieran un paso en el camino hacia Dios Padre y luego ustedes mismos arrojaran piedras a sus pies, con las cuales el camino se llena de baches y se hace innecesariamente difícil. Muchos de ustedes incluso levantan un muro enorme y, por supuesto, así no avancen ni un paso más en el camino de regreso al Creador.

¡Derriben los muros! ¡Quiten las piedras del camino! Para ustedes la manera más fácil de hacer esto es a través de la confesión, porque allí, Mis amados hijos, Mi Hijo los perdona todo los pecados a través del sacerdote consagrado por ÉL, incluso aquellos pecados que quizás ni recuerdan. Pero, deben mostrar remordimiento; deben sentir culpa y deben tratar de ¡no cometer de nuevo estos pecados ya arrepentidos y confesados!

¡No les servirá de nada confesar sus pecados si no se arrepienten!

¡No les servirá de nada confesar sus pecados si ya han tomado la decisión de

cometer el mismo pecado otra vez!

Arrepiéntanse y sean buenos, Mis hijos tan amados por Mi, y el camino hacia el Reino de los Cielos también será fácil para ustedes!

Los amo tanto.

Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios.

Jesús también está allí y asiente con la cabeza.

 

«Amén, les digo esto: 

Quien no lleva arrepentimiento en su corazón, a él el pecado no será perdonado.

Quien vuelva a pecar instantáneamente sin al menos querer evitar el pecado, a él el pecado tampoco será perdonado.

Quien no es perdonado encuentra difícil encontrarme. Quedará frente a una puerta cerrada, porque las puertas del cielo no se le abrirán.

Pero quien se arrepienta de sus acciones pecaminosas, él será admitido, pero también su alma primero debe limpiarse.

Por lo tanto, sean buenos durante la vida, Mis hijos, de lo contrario les espera primero el purgatorio. Los limpiará hasta que estén libres y purificados.

Pero ¡ay de aquél que no se arrepiente! Para él el lago de fuego se abre y su caída no puede ser detenido.

Tan pronto como esté en la caída y solo recién ahí tome consciencia y quiera arrepentirse -porque reconocerá sus acciones- será demasiado tarde y la eterna angustia del alma lo alcanzará. Ya no habrá salvación para él porque se dejó engañar por del diablo.

Así que conviértanse a Mi, su Jesús, y alcancen una vida en la gloria de Mi Padre.

Los amo mucho.

Su Jesús quien los ama.
Redentor de todos los hijos de Dios.»

 

«Mi hija. Nuestros hijos no saben lo que están haciendo. Tienen que comenzar a vivir con sus corazones, de lo contrario perecerán y se perderán para siempre.

Su Padre en el Cielo.
Creador de todos los hijos de Dios.»

 

Gracias, Mi niña, Mi hija. Te amo.

196. ¿Realmente no lo ven? — 07.07.2013

Mi hija. Mi querida hija. Los caminos de Dios son insondables y solo ÉL sabe lo que es y lo que será. No le crean a ningún «advenedizo» que dicen que supieran lo que el futuro traerá (para ustedes), porque eso solo Dios lo sabe. Nadie excepto ÉL sabe cómo, dónde y el por qué de lo que sucederá. Así que no crean a los advenedizos que piensan que lo saben todo, no crean en sus mentiras, porque no saben nada.

Ellos diseñan planes malvados y quieren manipular, pero nunca sabrán lo que sucederá en el futuro, ni en él de ustedes, ni en él del mundo. Así que solo escuchen a Dios, su Padre y a Su Hijo Todopoderoso, porque ELLOS son UNO y lo que el Padre le confía al Hijo Él lo hará, pero ÉL no caminará entre ustedes por una segunda vez, sino que vendrá desde las alturas del cielo con todas las señales y Él no va a profetizar, sino librarlos del maligno.

Así que no crean a los advenedizos porque no vienen de Dios. Quieren su atención, el control sobre ustedes, y les mienten y los hacen creer que el maligno es el bueno, pero eso nunca será. Solo escuchen a Dios, su Padre Celestial, el Señor y Creador de todo ser, y crean en Su Hijo, porque Él vendrá y las profecías de Juan se cumplirán.

¿Realmente no lo ven? Ya están metido en eso. Yo, un Santo Ángel del Señor, quiero advertirlos de los mentirosos de su tiempo. Crean en Jesús y siempre confíen en Dios, su Señor. Yo hablo su palabra cuando vengo porque ÉL Me lo encargó.

Un ángel del Señor.

Mi hija, no te confundas. Muchos te hablan. Yo te llamé, pero el ángel del Señor te habló.

Tu Madre en el Cielo.

195. A él quien Nos regale su existencia serán revelados los misterios — 06.07.2013

Mi hija. Diles a Nuestros hijos en todo el mundo que se acerca el momento en que deberían convertirse a Mi Hijo Jesús, porque el fin de los tiempos está cerca y Dios, el Padre de todos ustedes, no dará mucho tiempo más, porque demasiado grande es el pecado en su mundo, demasiado grandes los males contra Sus hijos tan amados por ÉL, demasiado grande el poder del maligno que trata de seducirlos y de condenarlos a todos ustedes, que ÉL, el Altísimo, mirara su «escándalo terrenal» aún más.

Conviértanse, hijos Míos, a su único Dios verdadero. Denle a Jesús su SÍ porque ÉL, quien fue concebido sin pecado, quien nació libre de pecado y vivió entre ustedes sin pecado, es UNO con el Padre y ELLOS son UNO con el Espíritu Santo, porque el Hijo viene del Padre y el Espíritu Santo viene de ÉL.

El que creó todo es el Hijo, es el Espíritu Santo, es Dios, el Dios Triuno, quien es tan difícil para ustedes de entender. ¡ÉL ES! ÉL es el Hijo, ÉL es el Espíritu Santo, ÉL es el Dios Triuno que envió a Jesús, una parte de Sí mismo, por amor a ustedes y Quien los libró del pecado, es decir Quien dio Su vida para darles a ustedes la Vida Eterna que solo puede alcanzarse libre de pecado – ¡piensan en el purgatorio, Mis amados hijos! ¡El que no está limpio del pecado primero debe experimentar la purificación allí! – Quien entonces murió por ustedes y así se dio por completo de vuelta al Padre. ÉL es Dios y al mismo tiempo el Hijo de Dios. Éste es el misterio que les resulta más difícil de entender.

¡Dios es el Hijo y Dios es el Espíritu Santo que ÉL les envió -Su Espíritu-, ¡para que entiendan! ¡Para dar claridad! ¡Para traerles la iluminación! ¡Para permitirles entender Sus misterios! Para mostrarles el camino que muchos de ustedes no entendieron a través de la vida de Jesús, no entendieron Su obra, Su salvación y cayeron en duda.

Mis queridos hijos. Crean y confíen. Dios es el Hijo, Dios es el Espíritu Santo, Dios es el Padre. ¡ÉL ES!

¡Regresen! Vuelvan a ÉL, al único verdadero y amoroso Dios Padre, su Creador. Hónrenlo y ámenlo. Porque entonces, Mis queridos hijos, todo estará bien para ustedes y ÉL, quien también creó a ti, te pondrá en Sus brazos amorosos y siempre te cuidará. Solo tienes que dejarlo hacer. Esto haces con tu SÍ a Jesús.

Que así sea.

Te amo a ti y a todos Mis hijos.

Su Madre en el Cielo quien los ama.
Madre de todos los hijos de Dios.

 

«Amén, les digo esto:

No traten de explicar los misterios de Mi Padre con su mente.

No traten tampoco de poner en palabras lo que no entienden.

A Mi Padre entenderán con la fe. Deben confiar en ÉL y deben abrir sus corazones.

Solo él quien tiene un corazón abierto lo entenderá.

Solo él quien nos dé acceso experimentará.

Solo a él quien Nos regale su existencia serán revelados los misterios y salvará su alma.

Los amo a cada uno de ustedes.

¡Crean y confíen!

Su Jesús quien los ama.
Redentor de todos los hijos de Dios.»

 

«Mi niña. Mi hija. Comprender Mi misterio requiere vivir la vida conmigo, de compartirla, sacrificarla y regalármela devuelta.

Él que vive conmigo será iluminado.

Él que Me dé su SÍ a través de Mi Hijo, quien SOY YO, Me encontrará a Mi.

Obtendrá una comprensión que él solo – ni con todas las carreras universitarias en su mundo de hoy – podrá alcanzar.

Solo YO SOY Dios y YO SOY Todopoderoso.

Él que venga a Mí, experimentará felicidad,

Él que venga a Mí, vivirá eternamente.

Él que venga a Mí, lo envolveré con amor y le daré Mis regalos.

El que esté conmigo experimentará todas Mis glorias.

Que así sea.

Los amo.

Su Padre Celestial.
Creador de todo ser.»

 

«Mi hija. Éstas son palabras «pesadas» para ti también. Divúlgalas. Tienen que actuar [las palabras], así que dense tiempo. Comprendan con su corazón, porque para su mente es difícil.

Los amo.

Su Madre en el Cielo quien los ama.
Madre de todos los hijos de Dios.»

194. YO SOY — 05.07.2013

Mi hija. Mi querida hija. Escribe, hija Mía. Yo, tu Jesús, estoy aquí contigo. Te amo, Mi pequeña y estoy ahí para ti, siempre, hija Mía. Sé fuerte y aguanta porque tengo grandes planes para ti y tu familia.

Te sorprenderás, como muchos otros también lo harán, porque cuando llegue el momento les revelaré para qué nacieron y lo que Dios, Nuestro Padre, ha provisto para ustedes.

Sí, Mi hija. Ese tiempo será bonito y Yo, Mi hija tan querida por Mí, estoy esperándolo can alegría.

Ustedes serán niños felices y conmigo, en Mi Reino, finalmente estarán realmente bien. Aguanten todo ustedes y difundan Mi Santa Palabra, porque muchas almas aún tienen que salvarse.

Mi corazón está lleno de dolor y pena por aquellos que no me acompañarán. Lloro mucho por sus almas, porque ya puedo ver el sufrimiento y el tormento que experimentan(arán).

Los amo, Mis queridos hijos, y no quiero perder a ninguno, pero deben convertirse a Mí, su Jesús, y darme su SÍ. Un solo SÍ cambiará su vida. Crean y confíen. Mi palabra es Santa.

Amo a cada uno de ustedes.

Su Jesús quien los ama.
Redentor de todos los hijos de Dios.

 

Mi niña, Mi hija. Nuestros hijos deben tomar Nuestra palabra en serio. Tienen que aceptarlo en sus corazones y dejar que fluya a través de ellos [sus corazones]. Solo de esta manera puede también iluminarse su espíritu y ellos pueden experimentar la verdad de Nuestra Palabra.

Mi hija. Diles a Nuestros hijos que el tiempo para la conversión apremia. Deben preparar sus almas para Mi Santo Hijo, de lo contrario no podrán soportar Su presencia, porque Mi Hijo es puro amor, como Yo mismo, y este amor los hará llorar cuando ÉL venga a mostrarles lo que es que tienen que cambiar.

Mis hijos. ¿Cómo piensan pararse frente a ÉL cuando su alma no es pura? Será terrible para muchos de ustedes si no preparan su alma y cambian su vida. Arrepiéntanse ahora de lo que han hecho mal y recurran a Mí. Yo, su Santo Padre, perdonaré todos los pecados, excepto la blasfemia a la que «personalidades celebres» en su mundo de hoy son culpables, así que nunca hablen en contra de Mi Hijo, nunca en contra de Mi Espíritu Santo, porque quienquiera que haga esto Me mancha con suciedad, a Mi, Quien SOY TODO, el principio y el fin, el Creador de todo ser, el Padre Todopoderoso por encima de todo y de todos, porque Mi Hijo SOY YO, y Mi Espíritu Santo SOY YO. YO SOY Dios, el único Creador Verdadero y Todopoderoso, su Padre. YO SOY el amor y YO SOY.

Así que no se hagan culpable de la blasfemia, porque eso no debe ser y estén advertidos, ustedes «lobos con piel de cordero», porque sus días están contados. Muy pronto ya reconocerán, pero entonces será demasiado tarde. No pequen más y arrepiéntanse de sus actos vergonzosos. Aquellos que hacen algo a Mis hijos, quien peca contra ellos y no se arrepienta desde el fondo de su corazón experimentará Mi castigo, así como lo experimentarán todos aquellos que piensan que pudieran vivir sus vidas sin Mí y contra Mí, a expensas de otros, en fornicación, en violencia y sin amor en sus corazones.

Así que, dense la vuelta antes de que sea demasiado tarde, y esperen con alegría Mi amor todopoderoso que perdona y sana, cada herida que tienen en su corazón, cada herida que han infligido a otros.

Vuelvan a Mí, a su Padre que tanto los ama, y Mi alegría será grandiosa.

Los amo mucho.

Su Padre Celestial.
Creador de todos los hijos de Dios.

 

Mi hija, divulga esto. Te amo. Tu Madre en el Cielo.

193. Nada es tan importante que la salvación de aún muchas más almas — 05.07.2013

Mi hija. Mi querida hija. Su trabajo es muy importante. Al difundir Nuestra palabra aún muchos más hijos de Dios Nos encontrarán y sus almas serán salvadas. Anímense y continúen dándonos su precioso tiempo porque están haciendo el bien en el nombre del Señor, y Nada es tan importante que la salvación de aún muchas más almas a través de ésta y de otras misiones que hemos confiado a Nuestros hijos elegidos.

Gracias.
Ustedes son muy valiosos para Nosotros.

Su Madre en el Cielo quien los ama.
Madre de todos los hijos de Dios.

Para todos los que ayudan a difundir Nuestra Palabra.

192. Se acerca el tiempo del fin, pero no lo ven — 04.07.2013

Mi hija. Mi querida hija. Buenos días. Siéntate conmigo.

Lo que están viviendo hoy en día en su tierra no es lo que Dios Padre quiere porque Él, que es amor puro, también había provisto el amor puro para ustedes, sin embargo, es difícil que ustedes vivan ése en su tierra de hoy porque debido a la «apostasía» de Lucifer, quien una vez fuera uno de los ángeles más poderosos en el Reino de Dios, el pecado comenzó, eso debido a que por el orgullo y el ego, la arrogancia y la desobediencia el amor puro se ensució hasta tal punto de ser irreconocible, y debido a que Lucifer, mejor conocido como Satanás, el diablo quería «gobernar» él mismo, es decir ponerse encima de Dios Padre, comenzó la dualidad entre el bien y el mal.

Como Dios Padre es un Padre amoroso, les dio a todos el libre albedrío, con en el cual ÉL nunca interferirá. Sin embargo, tristemente tiene que observar cuántos de Sus hijos también dirigen su libre albedrío contra ÉL, el creador de todo ser y como Lucifer quiere agarrar el poder para sí mismo.

Saben hoy que esto no puede funcionar bien, y ven la extensión del mal en todas partes su mundo. Solo pueden vivir feliz para siempre con Dios Padre. Solo ÉL los cuida. Solo ÉL puede darles lo que su alma necesita para su bienestar. Así que vuelvan a ÉL ¡y denle la espalda al diablo y a todas las maldades con la que los ha contagiado!

Tan pronto como LE den a Jesús su SÍ, el diablo perderá poder sobre ustedes hasta tal punto que él debe cederlo completamente, porque los que se conviertan a Jesús y a Dios Padre, los que vivan con ellos y entregan su vida a ELLOS, el diablo no puede dañar de cuerpo ni de alma porque Dios Padre es más grande que él.

Él es el único Dios verdadero. Solo ÉL es todopoderoso y solo ÉL los protegerá. Por lo tanto, vengan a ÉL y estiendanle la mano a Jesús, porque Él los guiará, y vivirán felizmente y en el amor pacífico por siempre a SU lado.

Que así sea.

¡Anímense, hijos Míos, y regresen! Los amo.

Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios.

 

Amén, les digo esto:

Solo Mi Padre es todopoderoso.

Solo con ÉL experimentarán la felicidad.

Solo quien que me de su SÍ puede ser salvado y liberado de las garras de la bestia.

Oren, hijos Míos, oren porque su oración es poderosa.

Que así sea.

Su Jesús quien los ama.
Redentor de todos los hijos de Dios.

 

Mi hija. Es de suma importancia que Nuestros queridos hijos regresen. Se acerca el tiempo del fin, pero no lo ven.

Los amo.

Su Padre Celestial.
Dios el Altísimo.

191. El tiempo es corto, las profecías de los últimos tiempos se están cumpliendo en su tierra — 03.07.2013

Mi hija. Mi querida hija. Las mentiras y las intrigas, las declaraciones falsas, la distorsión de la Santa Palabra hacen que Dios Padre, Nuestro Señor, está muy triste. El Santo Cuerpo de Mi Hijo aquí en la tierra está contaminado. Mi Hijo sufre mucho, pero todo esto se permite para que los hijos de Dios, ustedes, Mi querida multitud de hijos, se conviertan libremente (= por el libre albedrío) a ÉL, su Redentor y ¡para que usen su libre albedrío para recorrer el camino hacia Dios Padre, para observar y respetar Sus mandamientos y para aferrarse a Su Santa Palabra y para defenderla!

Mis hijos ¡No se dejen engañar, porque el diablo ha entrado en sus iglesias! No les crean a los falsos predicadores y aférrense a la fe pura de Jesús, es decir conviértanse a ÉL, al más Santo de todos los hijos de Dios (nota: todos somos hijas e hijos de Dios) y no permitan que lo contaminen por las mentiras de aquellos que se supone que sigan, vivan y transmitan Su Santa Palabra.

¡Siempre estén atentos, porque el «trono del Vaticano» está sucio de basura y ocupado de escoria! Siempre diríjanse al Espíritu Santo de Dios Padre, porque entonces se darán cuenta de las mentiras y reconocerán las intrigas de las tropas malvadas. Gradualmente entenderán lo qué está sucediendo y luego prepararán sus almas para el fin de todos los días, ¡lo cual es muy cerca!

Así que estén atentos y seguros de que, cuando aparezca el Anticristo oficial y altamente alabado, Dios Padre rápidamente intervendrá para proteger a Sus hijos. No tardará mucho y Jesús vendrá por Segunda Vez. Entonces, Mis amados hijos, sus almas deben estar preparadas, porque se peleará la batalla final, y solo las almas que Le han dado a Jesús su SÍ pueden salvarse.

Éste es el libre albedrío de cada uno de ustedes: un SÍ a Mi Santo Hijo y entrarán a la gloria, un No a ÉL, su Redentor, y caerán al infierno. A quien no tome una decisión, el diablo lo arrastrará porque él no respeta su libre albedrío, sin embargo, Dios Padre se lo ha dado y nunca interferiría contra ése.

¡Decídanse, Mis amados hijos! ¡Denle a Jesús su SÍ! Él es su única oportunidad de llegar al Nuevo Mundo. Solo con ÉL alcanzarán las glorias de Dios Padre, su Creador que tanto los ama, solo ÉL puede salvar su alma y llevarla a la Nueva Jerusalén, el Paraíso. Que así sea.

Su Madre en el Cielo quien los ama.
Madre de todos los hijos de Dios.

 

Amén, les digo esto:

El tiempo es corto, las profecías de los últimos tiempos se están cumpliendo en su tierra.

No esperen demasiado, porque solo aquellos que se conviertan a Mi, que me den su SÍ, puedo proteger y llevar al Nuevo Paraíso, Mi Reino, donde el cielo y la tierra se funden [unen].

No esperen mucho tiempo, o se perderán. El diablo se apoderará de su alma y los empujará al lago de fuego, y entonces no habrá vuelta atrás para ustedes, así que no esperen demasiado y reconózcanme a Mí, su Redentor, y Yo los protegeré, los llevaré Conmigo y los prodigaré abundantemente, pero necesito su Sí para ello.

¡Usen el libre albedrío que Mi padre les dio y dense la vuelta! ¡Vengan a Mí, su Jesús, y juntos viviremos en la gloria!

Los amo tanto.

Su Jesús quien los ama.
Redentor de todos los hijos de Dios.

 

Mi niña. Mi hija. Diles a Nuestros hijos que el tiempo está muy cerca. Deben convertirse para evitar hundirse. Solo quien se dirija a Mi será salvado por Mi Hijo, porque Yo, su Padre Todopoderoso, respeto su libre albedrío que les he dado, y nunca intervendré ni decidiré en contra de ése.

Así que vengan a Mí libremente y grande será Mi alegría. Con todo Mi Amor Divino, espero a cada uno de ustedes, y Me preocuparé de todos y cada uno de ustedes en el Nuevo Reino de Mi Hijo, donde ya no conocerá la malicia y donde nadie jamás experimentará sufrimiento, porque el diablo ahora será derrotado y condenado y nunca más tendrá poder sobre ustedes.

Que así sea.

Su Padre Celestial quien los ama.
Creador de todos los hijos de Dios.

Los amo.

Gracias, Mi tan querida hija.

190. ¡Solo la oración es su arma, solo a ella deberían usar en esta lucha por las almas! —02.07.2013

Mi hija. Mi querida hija. Ven y siéntate conmigo. Yo, tu Madre en el Cielo quien te ama, quisiera decirte hoy lo siguiente:

Su mundo es hermoso, pero lo están destruyendo. Se están mintiendo a Nuestros hijos en todo el mundo para que la «élite» pueda extender su poder sobre ustedes, Mis amados hijos, hasta el control absoluto sobre cada uno de ustedes.

Esto es un juego malvado del lado oscuro, y no hay nadie entre ustedes que realmente pueda detenerlo, porque el ser humano es demasiado débil, demasiado pequeño e desamparado para enfrentar estas maquinaciones malvadas de manera individual.

Aquellos de ustedes que lo han intentado han sido eliminados por asesinato o por «ser abdicado», a aquellos de ustedes que aún lo están intentando los están amenazando y viven con miedo por su propia vida o – aún peor – por la de sus seres queridos.

Mis hijos. ¡Despierten! ¡Su única oportunidad es Dios Padre! Únanse a Jesús, Mi amado Hijo, y únanse todos ustedes ¡porque unidos son fuertes! ¡Unidos son grandes! ¡Unidos son poderosos! Y con Jesús entre ustedes, con ÉL a su lado, lucharán y vencerán al mal, porque ustedes, como Su Ejército Remanente entrarán gloriosamente al nuevo mundo, pero deben permanecer fuertes y valientes -hasta ese día- y rezar mucho por todos los hijos de Dios porque cada hijo de Dios que encuentre su camino de regreso a su Creador es un eslabón menos en la cadena del diablo y su grupo de ayudantes. ¡Estén conscientes de eso!

Cada alma que encuentre su camino hacia Jesús los hace crecer como Ejército Remanente y debilita al mismo tiempo al ejército del lado oscuro. Luchen, hijos Míos, luchen. ¡Su oración es su arma más poderosa! Úsenla siempre y cuando puedan y sigan el llamado del cielo en todo momento. Entonces, Mis amados hijos, su mundo se volverá más hermoso nuevamente, los planes del diablo se verán frustrados, sus seguidores se debilitarán y se evitarán muchas de sus acciones vergonzosas.

Así que oren, hijos Míos. La oración es el arma más grande y poderosa en esta lucha por las almas y para la destrucción del maligno. Que así sea.

Los amo desde lo más profundo de Mi Santísimo Corazón de Madre.

Su Madre en el Cielo quien los ama.
Madre de todos los hijos de Dios.

 

Amén, les digo esto:

Quien luche en Mi nombre por el bien, lo salvaré.

Quien me dé su lealtad, lo envolveré con Mi Santo Amor.

A quien ore en Mis intenciones, el cielo se abrirá ya aquí en la tierra, y

quien vaya conmigo, Me siga, cosechará las glorias de Mi padre.

Así que vengan todos a Mí, su Santo Jesús, y unidos pelearemos esta última de todas las batallas.

Traeremos luz a la tierra y destruiremos el mal.

Nunca olviden cuán poderosa es la oración. Solo la oración es su arma, solo a ella deberían usar en esta lucha por las almas.

Con la oración logran Todo, así que oren mucho y íntimamente.

Que así sea.

Su Jesús quien los ama.

Gracias, hija Mía.

189. Quien no tiene felicidad en su corazón es presa fácil para el maligno — 01.07.2013

Mi hija. Mi querida hija. Gracias por venir y seguir Mi llamada.

Es importante que estén felices. Quien no tiene felicidad en su corazón es presa fácil para el maligno, porque ése usa la falta de alegría en el corazón y trata de llenar este «espacio vacío» con odio, envidia y otros malos sentimientos, lo que los lleva fácilmente a ponerse agresivos y tener pensamientos pecaminosos que pueden incluso conducir a acciones pecaminosas.

Cuyo corazón está lleno de felicidad y alegría de vivir no tiene lugar para estos sentimientos «provocados» por el diablo y, por lo tanto, no es una presa tan fácil para el maligno.

¡Entonces vivan la alegría! ¡Sean felices y disfruten! Llenen sus corazones de alegría y amor y vivan la felicidad divina en la tierra. Entonces, Mis queridos hijos, el adversario tiene sus dificultades con ustedes porque no tiene ninguna puerta abierta que pueda usar para entrar en sus corazones.

Mis queridos hijos, quédense siempre con alegría hacia Nosotros, y tan pronto como algo «perturbe», «salga mal» o los «deprima», ofrézcanlo como sacrificio a Dios Padre y denle también su SÍ a Jesús. Así no tiene que cargarlo solo y su corazón permanece en el amor, en el amor hacia Nosotros. Que así sea.

Su Madre en el Cielo quien los ama.
Madre de todos los hijos de Dios.

Amén, les digo esto:

Quien es de corazón puro me encontrará.

Quien viva la felicidad y la alegría el adversario lo encontrará difícil de seducir.

Quien Me dé su amor, siempre lo amaré también, y como Yo estoy a su lado el diablo debe ceder.

Deme su SÍ y grande será la alegría en su corazón.

Que así sea.

Su Jesús quien los ama.

 

Gracias, hija Mía. Difunde esto. Es importante que Nuestros hijos lo sepan.