123. ¡Dejen que Dios entre en su vida! — 02.05.2013

Mi hija. Mi querida hija. Hoy es un lindo día. Quédate conmigo y escucha lo que tengo que decir:

Si ustedes, los hijos de Dios siempre actuaran con amor, si reconocieran que todos son hermanos y hermanas y que cada uno de ustedes anhela las «riquezas» de Dios, entonces, mis amados hijos, se ayudarían unos a otros en lugar de pelear, ustedes se abrazarían en lugar de golpearse y compartirían el uno con el otro en vez de atesorar cada vez más para sí mismos. El mundo sería un lugar maravilloso de unión alegre y amorosa, y su alma experimentaría la paz tan anhelada que tan urgentemente necesita para sentirse bien.

Mis tan amados hijos. Los amo tanto, los llevo a todos en Mi Corazón de Madre y a todos guiaré hacia Mi Santo Hijo, su Jesús, tan pronto como me lo pidan a Mí, su Santa Madre en el Cielo, porque no deseo nada más para ustedes que finalmente puedan vivir en el amor y la paz que Dios Padre, su Divino Creador, preparó para ustedes desde el principio de los tiempos.

Todos ustedes, Mis amados hijos, son hijos de Dios y no importa dónde se encuentren en su tierra hermosa, tierra creada por Dios para ustedes, TODOS ustedes son íntimamente amados por Dios Padre mismo, de Su más Sagrado de todos los Hijos, Jesús, y por Mí, su Madre en el Cielo.

Por favor, abran sus corazones para Nosotros, para Mi Hijo, para que Él pueda hacer Sus milagros en ustedes y en su alrededor y para que pueden lograr la paz que su alma necesita tanto. Confíen solo en ÉL, Jesús, y en su Santo Padre, su Creador, porque Ellos les dan lo más hermoso de todos los regalos, hacen que sus Gracias Divinas fluyan en ustedes y en todo el mundo y les envíen a ustedes y a todos los hijos Su Espíritu Santo, ¡para que se despierten y reconozcan!

Hijos Míos, si dejan entrar a Dios en su vida se apartarán de todo lo que el adversario les «ofrece», porque podrán distinguir entre el bien y el mal y serán inundados con tanta claridad que encuentren la fuerza para nunca más caer en las trampas del maligno, de ser atrapados, y finalmente podrán comenzar con la alegría y el amor tan anhelados y con Dios Padre y todos Sus Ayudantes Celestiales el Camino Divino a casa.

Que así sea.

Su Madre Cielo quien los ama.

Madre de todos los hijos de Dios.

122. Habilidosamente y casi desapercibido, ahora van a las Sagradas Escrituras para torcer la Palabra de Dios — 01.05.2013

Siéntate a Mi lado, hija Mía. Los planes que Satanás ahora quiere hacer cumplir a través de sus «grupos de mal» preparados y entrenados por largo tiempo, están dirigidos contra los hijos de Dios, quienes todavía tienen algo de fe en Dios Padre y quienes confían en el «Cielo».

Habilidosamente y casi desapercibido, ahora van a las Sagradas Escrituras para torcer la Palabra de Dios y Su Santo Hijo, para que los hijos de Dios sean privados de los cimientos de una vida con Dios y Sus glorias, y para que así ellos y todos ustedes sean privados de las verdaderas enseñanzas del cielo.

Los cambios son muy pequeños, de lo contrario se notaría. Las nuevas ediciones impresas de la Santa Palabra ya no serán auténticas. A sus hijos se les presentarán las verdades de Dios de manera tan distorsionada que [sus hijos] ya no vivirán una vida bajo los mandamientos de Dios, porque se les serán explicadas tantas interpretaciones nuevas que los Santos mandamientos de Dios se considerarán desactualizados, dado que tal como – Su santa iglesia – también Su santa palabra será adaptada a la Iglesia Única Mundial, que guiará a todos los hijos de Dios a los brazos de Satanás.

Ustedes, los hijos de Dios se sentirán infelices, porque ya no encontrarán plenitud en las palabras de aquellos que Satanás les pone como líderes de la iglesia. Solo encontrarán a Dios a través de sus oraciones silenciosas, porque en unión íntima, Dios tendrá misericordia de ustedes y la verdad sobre estas mentiras de su tiempo presente le será revelada. ¿Pero quién de ustedes es lo suficientemente fuerte como para ir solo por este camino?

Es por ello, queridos hijos, que es sumamente importante convertirse ahora a Dios Padre y a Mi Santo hijo. Difícilmente tendrán una chance una vez que Satanás haya hecho cumplir sus planes y solo presente sus mentiras en todo el mundo.

¡Despierten! ¡Vuelvan! ¡Y vengan a Jesús!

Aquí hay una oración que les ayudará:

Oración No 16: Oración de Protección

Señor mío, Dios mío, protégeme de las mentiras del maligno.

Guíame en mi camino hacia Ti.

Dame siempre la claridad que necesito para actuar de acuerdo con Tu voluntad.

Ilumíname con Tu Espíritu Santo y lléname con Tu amor. Amén.

 Santo Arcángel Miguel,

protégeme con el escudo de Tu protección y guárdame de las trampas del maligno. Amén.

Santa María, Madre de Dios, ponme bajo Tu protección y cúbreme a mí ya mis seres queridos con Tu Santo manto. Amén.

 

Rezar estas oraciones les ayuda a permanecer en el camino hacia Nosotros, hacia su padre y a protegerse de las trampas del maligno.

Con profundo amor y afecto.

Su querida Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios.

121. Ha llegado el momento en el que se debe pelear la última de todas las batallas. Preparen sus almas — 01.05.2013

Mi hija. Mi querida hija. Siéntate conmigo. Todo lo que comunicamos a Nuestros hijos en estos mensajes es muy importante para la salvación de sus almas.

Ningún hijo está suficientemente preparado para poder liberarse del pecado, de las tentaciones y los males que aún están por venir al mundo, a su mundo. Deben dirigirse a Nosotros, a Mi Santo Hijo, porque ÉL – y solo Él – es el Redentor de todos los hijos de este mundo.

Por ese fin hace 2000 años vino al mundo como Mi Hijo para la salvación de todos los hijos de Dios que vivieren en la tierra. ÉL, el más Santo de sus hermanos, el unigénito Hijo de Dios, su Jesús, les ha quitado toda la carga del pecado a través de Su sufrimiento, Su perfecta devoción a Dios la que terminó con la muerte física en la cruz, es decir, a través de Él, y solo a través de ÉL, todos ustedes han llegado a ser dignos de entrar en el Divino Reino de los Cielos, siempre y cuando cumplan con los mandamientos que Dios Padre les dio a través de Sus profetas y que están escritos en el más Sagrado de todos los libros, la Santa Biblia, que el ÉL les dio a ustedes y que hoy reciben de Nosotros, de su Madre en el Cielo, Jesús, Dios Padre, los Santos Ángeles y de los santos en estos mensajes.

El camino “a casa” es tan fácil. Es fácil de caminar y lleno de pequeños y grandes gozos, y en cada estación les esperan Ayudantes Celestiales que les ayudan a «llevar» sus cargas diarias y los acercan todos los días un poco más a Dios Padre. Si pudieran ver cuántos Santos Ángeles y cuántos santos Dios Padre envió para mostrarles el camino a casa, ustedes llorarían de alegría, de «ser abrumados», del amor, porque de repente se darán cuenta del amor de Dios Padre y su vida llegará a tener un nuevo contenido, un nuevo sentido, un sentido real para la eternidad.

¡Crean en Nosotros! ¡Denle su mano a Jesús! Y gloriosamente todos Nuestros hijos se unirán en amor para vivir juntos con Dios la vida eterna en paz, cuando en el día de la gran alegría, Mi Hijo aparezca en el horizonte para llevarlos a la Nueva Jerusalén, el paraíso, Su Reino.

Que así sea.

Su Madre en el Cielo quien los ama de corazón.

Les doy mi Bendición Maternal, porque soy la Madre de todos los hijos de Dios.

 

Amén, les digo esto:

Los tiempos están cambiando y a Mis hermanos y hermanas no les queda mucho tiempo. Todos ustedes deben preparar sus corazones para Mí, su amado Jesús, Redentor de todos los hijos de Dios, porque solo entonces puedo llevarlos en el día de la gran alegría a Mi Reino, que fue creado por Dios Padre, su Creador que tanto los ama, para que todos pueden volver a casa para vivir en paz y amor y con todas Sus Glorias Divinas.

Amo a cada uno de ustedes.

Su Jesús.

 

«Ha llegado el momento de que se debe pelear la última de todas las batallas. Preparen sus almas. Hagan penitencia y sean buenos los unos con los otros. Solo entonces serán dignos de entrar por las puertas del Cielo. Solo entonces serán llevados por Jesucristo, Mi Hijo Divino, para entrar en la Nueva Jerusalén.

Su Dios Padre en el Cielo.

Creador de todos los hijos.» 

 

«Escuchen y crean: solo aquellos que llevan el sello sobrevivirán ilesamente a los tiempos difíciles. 

Jesús y San Miguel Arcángel.»

 

«El tiempo de la batalla para destruir el maligno está comenzando. Recurran a Jesús, su Redentor, o se perderán.

Su Santo Arcángel Miguel.»

120. ¡Vengan a Nosotros, todos los hijos de la tierra! — 30.04.2013

Mi hija. Mi querida hija. No te desesperes. Todo estará bien. Tan pronto como Mi Santo Hijo baje del cielo – y eso sucederá pronto – ÉL los redimirá a ustedes, Sus amados seguidores y Sus fieles siervos, ustedes que son puros de corazón y ustedes que Le han dado su SÍ, de las maquinaciones del maligno y llevarlos a Su Glorioso Reino, que fue preparado para todos los hijos de Dios que se han convertido a ÉL y Dios Padre hasta o en el día de la gran alegría, preparado con el amor perfecto de Dios Padre, su Padre que tanto los ama, para que puedan recibir la herencia anhelada de la paz, el amor perfecto y la verdadera alegría y felicidad.

Mis hijos. Mis tan amados hijos. Esperen este día con alegría, este día que ahora llegará muy pronto y aguanten para que el mal no pueda lastimarlos, porque los planes del diablo son aterradores, horribles y repugnantes. Pero él no podrá llevarlos a su fin, porque Dios Padre está listo con Su Ejército Divino, listo para la última de todas las batallas contra el mal y el maligno, listo para separar a todos aquellos que no se convierten a tiempo de Sus hijos fieles que Lo aman, para dejarlos al maligno quien los arrastrará al lago de fuego, hacia donde Dios Padre lo empujará con su ejército.

Así que despierten, Mis amados hijos, y prepárense. Solo quien crea en Jesús, Lo siga, confíe en Él, Le de su fe, se entregue a ÉL y Lo adore, alcanzará la vida eterna en paz y con Jesús.

Quien no se de vuelta, quien no se aleje del mal, quien no se libere de las garras del mal – y eso, Mis amados hijos, los arreglamos Nosotros, el Cielo, para ustedes tan pronto como hayan dado su SÍ a Jesús – no experimentarán esta gloria.

Por lo tanto, vengan a Nosotros, TODOS LOS HIJOS DE LA TIERRA, y les prometemos que ni uno de ustedes se perderá, sin importar a qué religión pertenezca, qué color de piel tenga, qué pecados haya cometido, porque antes de Jesús y Dios Padre todos los hijos son iguales. Cada uno es un hijo de Dios y a cada uno lo aman. A cada hijo, a cada hombre y cada mujer que hoy en día vive en la tierra, lo quieren redimir y salvar su alma para que todos los hijos de Dios puedan finalmente vivir juntos en paz y amor y gozo indescriptiblemente grande en la Nueva Jerusalén bajo el Reinado de Jesucristo, quien dio su vida hace 2000 años para redimir y permitir el acceso a Su Reino de los Cielos a todos los hijos de Dios, y con eso se refiere a cada uno de ustedes sin importar la raza, el color de la piel o la confesión que tenga.

Acepten Su sacrificio más grande – Su crucifixión – y conviértanse en Él, su hermano Jesús, quien los ama desde lo más profundo de Su Sacratísimo Corazón, y entren con Él en Su Nuevo Reino para vivir la paz que sus almas tanto anhelan.

Que así sea.

Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios.

 

Llamada de la Madre de Dios, Jesús y Dios Padre:

Mi hija. Nuestros mensajes deben divulgarse en todo el mundo y ser accesibles para cada uno de Nuestros hijos.

Los llamamos a difundir Nuestra palabra, estos mensajes en todos los idiomas, porque el tiempo apremia y deseamos llegar a todos Nuestros hijos.

Gracias, Mis amados hijos.

Su Madre en el Cielo con Jesús y Dios Padre.

 

«El ejército de Dios está listo.

Preparen también ustedes sus corazones para que podamos reconocerlos y salvarlos.

El sello del Dios vivo es la señal que deben llevar. *

Con él [el sello] no perecerán.

Su Santo Arcángel Miguel.

Líder de las huestes Divinas».

* Nota: El mensaje original del «Sello de Dios vivo» se publicó en el «Libro de la Verdad», que se puede acceder, por ejemplo, través del sitio web: http://www.dasbuchderwahrheit.de. Desde este sitio web también se puede descargar el «Sello de Dios Vivo».

119 A. La segunda petición de Jesús y María — 29.04.2013

Mi tan amada hija. Sigue difundiendo Nuestra palabra. Trata de encontrar traductores para que también aquellos que no dominan tu lengua materna puedan entender Nuestra palabra y preparar sus corazones para esta misión. Permíteles / permítanles entender Nuestra palabra, sentir Nuestro amor que sentimos por todos Nuestros hijos, y dales / denles también a ellos Nuestros regalos ricos de los que se darán cuenta a través de Nuestra Palabra en estos mensajes.

Que así sea.

Tu /Su Jesús quien te / los ama.

 

Mi hija. Ha llegado el momento en que queremos llegar a TODOS Nuestros hijos en todo el mundo con estos mensajes. Por ello, Nuestra petición a ustedes: traduzcan Nuestra palabra a todos los idiomas, para que sea accesible para todos Nuestros hijos.

En profundo amor y unión.

Su Madre en el Cielo.

Gracias, Mi niña, hija mía. (Jesús y María están sonriendo)

119. Lean la Biblia y se darán cuenta de que lo que está sucediendo ahora se ha predicho en el Libro Sagrado de Mi Padre — 29.04.2013

Mi hija. Mi amada hija. Donde prevalece el mal, donde se adora a Satanás ahí Yo, su Santísimo Jesús, no puedo estar porque eso no puede ser. Por favor, continúen orando por estas almas perdidas, para que Yo pueda llegar a ser invitado también a sus corazones, y para que se pueda realizar la transformación en ellos, en su corazón y su alma, con la ayuda de la inspiración del Espíritu Santo y de los milagros que Mi Santísimo Padre regala a todos Sus hijos.

Mis amados hijos. Una vez que se querrán quitar la Eucaristía, Mi Santísimo Cuerpo en carne y sangre en el Sacrificio de la Misa, deben reunirse y continuar celebrando la Santa Eucaristía con los pocos siervos santos, que son Mis Sacerdotes Consagrados que verdaderamente confíen en Mí. Ninguna renovación de la alianza Hombre + Dios es tan intensa, tan santa como la recepción de Mi Cuerpo, que se les da en cada celebración del sacrificio de la Sagrada Misa.

Continúen confiando en Mí, en su Jesús, y escuchen Mi Palabra que les proclamo a través de Mis hijos videntes elegidos por Mí, porque Mi Santa Iglesia, Mi Cuerpo aquí en la tierra, ha sido profanada por los engañadores que actualmente gobiernan el Vaticano. Mi hijo Benedicto XVI es Mi último representante verdadero de Mi iglesia aquí en la tierra, sin embargo, ha sido echado por los hipócritas y sus [satanás] malvados seguidores, quienes se infiltraron a Mi santuario y que ahora quieren destruir a todos los hijos de Dios desde el más alto de todos los rangos, desde la Santa Sede de Pedro.

No les den su fe, porque desde sus bocas habla el diablo mismo. Habilidosamente disfrazan sus verdaderas intenciones y subliminalmente infiltran mentiras en sus almas. ¡Tengan cuidado y manténganse alerta! Sus contradicciones ya están comenzando, y cada uno quien tiene ojos y oídos, ¡ábranlos y miren y escuchen con atención! Primero dicen esto, luego dirán otro. ¡Así que tengan cuidado y manténganse alerta y CONFÍEN SOLO EN MÍ, SU JESÚS!

Mi Santa Madre ha venido a la tierra (en apariciones) para advertirles a todos ustedes. Ella les muestra el camino cómo podrían haber evitado mucho y cómo, ahora que no la han escuchado, aún puedan salvar su alma y la de sus hermanos.

¡Escuchen lo que les decimos! ¡Proclamamos Nuestra Santa Palabra en todo el mundo! ¡En todo el mundo hemos elegido a hijos que difunden Nuestra Palabra! ¡Crean en Nuestra palabra!

Mi Padre les dio la Biblia. ¡Todo está escrito allí! ¡Lean la Biblia, el más Sagrado de todos los libros, y luego vengan a Mí, su Jesús! Leerán que todo lo que les estamos anunciando ahora está en concordancia con el Libro Sagrado de Mi Padre, y aún más se darán cuenta de que lo que está sucediendo ahora se ha predicho en el Libro Sagrado de Mi Padre.

¡Despierten! ¡Devuélvanse! ¡Y síganme en el camino hacia el Nuevo Mundo! Yo, su Jesús, llevaré a cada uno conmigo a Mi Nuevo Reino, la Nueva Jerusalén, creado en perfecto amor para todos ustedes por su Padre que tanto los ama, si Me invitan a morar en su corazón y si Me dejan ser parte de su vida.

Además, les prometo a cada uno de ustedes que los sanaré y los libraré del pecado y sufrimiento. Así que denme su SÍ, y vivirán felices conmigo en estos días del fin de los tiempos, hasta que entonces entremos juntos por las puertas de la Nueva Jerusalén, cuya llave pronto Me dará Mi Santísimo Padre.

Los amo.

Su Jesús.

118. Las llaves serán entregadas pronto — 28.04.2013

Mi hija. Mi querida hija. Mi Hijo, Jesucristo, desea que se salven aún muchas almas más, porque no quiere perder ni una de sus amadas criaturas al adversario.

Es por eso que les llamo que continúen ofreciendo sus sacrificios en la oración, en la aceptación de sufrimiento y todas las otras buenas obras que Le regalan a Mi Hijo para que se pueda cumplir Su deseo de llevar a cada uno de Sus hijos a Su Nuevo Reino, y para que Él pueda entrar con ustedes y con todos los demás hijos de esta tierra en la Nueva Jerusalén prometida a todos ustedes, que Dios Padre, Nuestro Padre Celestial de todos, ha creado y preparado con tanto amor por cada uno de Sus hijos.

Las llaves para esto serán entregadas pronto por Dios Padre, el Altísimo, a Su Santísimo Hijo, su Jesús, y solo quien Le de su lealtad, quien Lo adora, Le entregue su confianza y su amor será llevado a este maravilloso Nuevo Reino, el hogar de la paz, del amor y de la felicidad.

Conviértanse ahora a Mi amado Hijo, y el Reino del Cielo estará abierto para ustedes. Pero si se alejan y Le dan la espalda a Jesús, su Redentor, en lugar de acercarse a Él con cuerpo y alma la condenación será su legado.

¡Así que despierten! Corran hacia Mi Hijo y entren con Él en el Nuevo Paraíso cuando al final de todos los días ÉL, su Jesús, vuelva a ustedes desde la altura del cielo con todas las señales y vencerá el mal para llevarlos a Su reino.

¡Ámenlo! ¡Confíen en ÉL! ¡Y estén también ustedes siempre ahí para ÉL! Entonces su vida se transformará en una gran alegría y plenitud, y podrán desde ya probar de la gloria del cielo.

¡Vengan todos, Mis queridos hijos, vengan a Mí, su Madre en el Cielo! ¡Los guiaré a través de los días restantes y a Mi Hijo, directamente en Sus Brazos Santos para que ninguno de ustedes se pierda!

¡Vengan, queridos hijos, vengan! ¡La alegría en el cielo es grande por cada persona que encuentre a Mi Hijo! Oramos unidos y en perfecta intimidad por la salvación de todos Nuestros hijos.

¡Con amor profundo, los cubro con Mi Bendición Materna!

Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios.

Gracias, Mi niña. Gracias, Mi hija. (Jesús está sonriendo)

117. Con el fin llegará el nuevo comienzo — 28.04.2013

Mi hija. Mi querida hija. Es bueno que te hayas confiado. Él también es Nuestro hijo y ahora, también aquí donde te hemos enviado, puede haber un cambio positivo. Gracias, Mi hija. Permanece siempre fiel a Nosotros y sigue siguiendo Nuestro llamado.

Te amo

Tu Madre en el Cielo.

 

Mi niña. Mi hija. Yo, tu Santo Jesús, he venido a decirte que se está acercando el fin. Esto no debería asustar a ninguno de Nuestros hijos, porque con el fin llegará el nuevo comienzo.

Sin embargo, todavía no hay suficientes almas que pueda llevar conmigo a Mi Nuevo Reino. Pero, con su apoyo tan amoroso y enérgico, su devoción hacia Mí y su alegría en el corazón que muchos de ustedes Me regalan a Mí, a su Jesús, podré realizar muchas más conversiones milagrosas.

Es a través de ustedes, Mis amados hijos, que muchas almas Me encuentran a Mí, su Jesús, y Mi Sagrado Corazón está lleno de gratitud. Mi alegría es grande por tanta dedicación que ustedes le dan a sus hermanos y hermanas, y eso ustedes pueden hacer gracias a la devoción total a Mí, a Mi Sagrado Corazón.

Les agradezco a cada uno de ustedes con la más profunda reverencia por el cambio hacia la pureza que ha tenido lugar en muchos corazones y les doy a cada uno de ustedes Mi Bendición Divina para la protección como gracia y como agradecimiento por todo lo que hacen por Mí, por su amado Jesús, para que Yo pueda hacer Mis maravillas y encender Mi Luz Divina en las almas más oscuras y ennegrecidas.

En unión profunda.

Su Jesús quien los ama.

Redentor de todos los hijos de Dios.

116. Quien deja entrar dudas a su mente, abre la puerta a Satanás — 27.04.2013

Mi hija. Mi querida hija. Nuestros queridos hijos (todos) aún tendrán mucha carga para llevar. Pero no se desesperen nunca, porque en el momento que crean que no pueden continuar, Dios Padre, el Altísimo, estará allí para ustedes, Sus amados y fieles hijos, y los acogerá, los envolverá en amor y le dará paz a su alma. ¡Así que, no se desesperen nunca, porque Dios Padre, el Altísimo, siempre cuidará Sus hijos!

Todos ustedes deben ser muy fuertes ahora, porque los tiempos se están volviendo más oscuros. Muchos de los cambios negativos en su mundo ya han comenzado. Estén atentos y confíen en Mi Hijo en todo momento. Junto con Su Espíritu Santo, los guiará a través de estos días oscuros. Tienen que confiar en Él plenamente. Nunca dejen entrar dudas a su mente, porque esa es la puerta de entrada para el diablo, que ahora se está preparando para su última jugada: desviar a todos los hijos de Dios de la fe en Dios Padre y su Santa Iglesia, el Santo Cuerpo de Su Hijo aquí en la tierra, para esclavizarlos y arrastrarlos a la condenación.

Hijos Míos, no den creencia en las «innovaciones» que el falso profeta decretará desde la Santa Sede. ¡NO VIENEN DE DIOS PADRE! El Santo Cuerpo de Mi Hijo está siendo profanado y crucificado nuevamente por este mismo falso profeta y sus secuaces que solo tienen una meta en mente: obtener el control sobre todos los hijos de Dios en toda la tierra.

Sigan orando por estas almas miserables, ya que son devoradas por el maligno, obedientes a Él (Satanás) y se encuentran en el camino directo al infierno. Sin embargo, dado que Satanás les ha «lavado el cerebro» y se ha colado la codicia por el poder y la fama en sus corazones, están tan cegados que realmente creen que siempre fueren los «gobernadores» en el reino de Satanás, en una posición primordial, adorados como dioses a quienes las personas inferiores (es decir, ustedes Mis amados hijos) yacen a sus pies, les sirven y tienen que estar allí para ellos como esclavos sin derechos.

Eso, Mis queridos hijos, son las mentiras de Satanás, que él inculca en almas, promesas vacías y un montón de mentiras. No deja pasar ninguna tentación para capturar y hacer podrir almas. Su mundo está compuesto solo por mentiras. Satanás alimenta a sus seguidores con poder y prestigio, así como a veces con dinero y sexo. Ese es su concepto de satisfacción. No existe el amor. Verdadera alegría por supuesto tampoco. Por el contrario, hay cada vez más odio, envidia, avaricia e insatisfacción. La felicidad de sus «siervos» radica en la «opresión» (por decirlo suavemente) de los hijos de Dios. Cuando hacen maldades a sus semejantes, abusan de ellos, les roban, destruyen sus propiedades e incluso los matan, ahí ellos «sienten» satisfacción en sus corazones rotos y sus almas negras.

Ellos están tan lejos del Camino Divino, del entendimiento de que provienen de Dios, que ellos solo pueden ser salvados por su [de ustedes] oración y sus sacrificios, así como el aceptar más y más sufrimientos por Mi Hijo. Y sabemos lo difícil que es esto para Nuestros tan amados hijos, pero traten de solo ver las pobres almas de estas «bestias» (a estas se convirtieron por el entrenamiento de Satanás), y no la persona como tal que generalmente aparece tan asquerosa a Nuestros tan amados hijos.

Les pedimos de corazón que ofrezcan sacrificios para que Mi Hijo también pueda salvar estas almas. Nada es imposible para ÉL porque ÉL posee la omnipotencia de Dios Padre, sin embargo, necesita almas que hagan penitencia para completar esta gran misión.

Mis amados hijos. El Cielo está abierto para ustedes, los fieles servidores de Mi Hijo, y todos los que ya vivimos aquí los apoyamos en todo momento. Los amamos mucho y nos regocijamos de sus maravillosos trabajos, no importa cuán grandes o pequeños sean.

Siempre hagan lo que puedan. Dios Padre ve incluso el gesto más pequeño. Los tiempos de la oscuridad, a pesar de que actualmente se están volviendo más oscuros aún, terminarán pronto, y luego, Mis amados hijos, la tan esperada y prometida era de la paz comenzará.

Alégrense, porque todos ustedes serán llevados, ustedes quienes Nos apoyan con tanta diligencia, amor y total devoción en esta misión, y Nos dan su fidelidad.

Con profundo amor.

Su Madre en el Cielo. Madre de todos los hijos de Dios.

 

«Amén, les digo esto:
Quien deja entrar dudas a su mente, abre la puerta a Satanás.
Pero quien se acerque a Mí, lo defenderé,
le daré Mi amor,
y el Santo Arcángel Miguel lo pondrá a salvo con su escudo de protección.
De este modo todos los ataques del maligno se destrozan, y la paz estará en sus corazones. Que así sea.

Su Jesús quien los ama.
Redentor de todos los hijos de Dios».

 

«El que me llama, quien ora a Mí, lo protegeré.

Esto prometo a todos los hijos de Dios.

Su Santo Arcángel Miguel.”

 

«No se desesperen, Mis hijos. Mi tan amada esposa María, la Madre de todos los hijos de Dios, ha venido a la tierra (Nota: se refiere a las apariciones) para ustedes para anunciar a todos los hijos de Dios los mensajes de Dios.

Ella es el camino a Jesucristo, y ella conduce a cada hijo hacia Su Santo Hijo para que encuentre la redención.

Amén.

Su San José.”

115. ¡Vuelvan a ser como los niños, desechando todo de su vida lo que no viene de Dios! — 26.04.2013

Mi hija. Mi querida hija. Hay tanto en su mundo que se ha infiltrado del maligno – maquinaciones que sirven para hacer que los hijos de Dios sufran e incluso sean aniquilados. Si ellos, los seguidores del maligno supieran cuánto se dañaban a sí mismos, se arrepentirían inmediatamente y harían penitencia y repararían cualquier daño que hubieran hecho alguna vez a otra persona y, más que eso, se humillarían ante sus hermanos y hermanas como lo hizo el publicano en la Biblia, para volver ser digno en la presencia de Dios.

Mis hijos. Todo el sufrimiento que cada uno de ustedes experimenta lo debería ofrecer como sacrificio y entregarlo a Dios Padre, Nuestro Padre. Entonces su sufrimiento disminuirá, porque Dios el Altísimo lo «transformará» y así puede regresar como amor al quien previamente lo había ofrecido a Él, a Dios el Padre.

En situaciones que son difíciles para ustedes deberían llamar a Jesús. Entréguenle todo lo que no puedan «cargar» ustedes mismos. Él los liberará de la «carga de la vida cotidiana». Cada vez más se acercarán a Él, cada vez más sabrán dejar que Él, su Jesús, sea parte de su vida, y cuanto más se abran a Él, cuanto más lo incluyan en su vida y realmente Le den un lugar firme en su corazón, a su lado, entonces más íntima será su relación, su unión con Él, y más sentirán Su apoyo Divino: el amor, la alegría, la felicidad en su vida que solo Él puede darles así como el cuidado por ustedes, para cada uno que se abra a Él y comparta su vida con Él, un cuidado que les dará todo lo que necesitan para vivir en su tierra.

Mis queridos hijos. Hagan espacio para Jesús y Dios el Padre en su vida, y les prometo que no importa lo que el maligno con sus grupos planee y ejecute contra los hijos de Dios, no disminuirá su entusiasmo por la vida. Quien vive con Mi Hijo, puede aceptar todo con alegría. El que aún estuviese triste será consolado por Él, y su alma, su corazón se llenarán de amor y alegría. A quienes se impongan «cargas», Él las llevará.

Mis queridos hijos. Si supieran cuán hermosa, fascinante y plena es una vida con Jesús, dejarían todo, solo para seguirlo, para poder estar con Él. ¡Pero ni siquiera es necesario hacer eso, porque JESÚS VIENE A USTEDES!

Mis hijos, mis queridos hijos. Comiencen a dejar que Jesús entre a su vida. Desescombren y denle a Jesús un lugar en su corazón y a su lado. Verán, sentirán cuán positivamente cambia su vida, y experimentarán una alegría que muchos de ustedes tuvieron por última vez cuando eran bebés.

¡Vuelvan a ser como los niños! Es decir, ¡desechen todo de su vida, de sus corazones lo que no viene de Dios! Así también ustedes volverán a experimentar las Glorias Divinas en sus corazones, que solo Dios Padre y Su Hijo pueden darles. Pero deben hacer espacio en ustedes, porque en muchos de ustedes se ha acumulado tanta ira, desilusión, estancamiento y, a menudo, incluso odio y envidia, que ya no hay lugar para los regalos de Dios.

¿Entienden ahora, Mis amados hijos, cuán importante es estar siempre en el amor? ¿Ven lo importante que es ser puro de corazón? Así que tiren todo lo que solo pueda venir del maligno «por la borda» y háganse amigos de Dios Padre y Su Hijo. Ellos llenarán sus corazones de amor y paz. Redescubrirán la Alegría Divina, y toda su vida cambiará por completo para el bien.

Volverán ser resistentes contra todo el mal, y el mal no lo llegará a ustedes, porque quien viva con Dios Padre y Su Hijo, todos los Siervos Santos estarán a su lado, y el Santo Arcángel Miguel siempre mantendrá su escudo delante de ustedes, y ningún demonio más obtendrá poder sobre ustedes.

Mis hijos. ¿Que están esperando? Así como en la primavera limpian sus casas hasta que todo brille, ¡así deben hacerlo con su corazón! ¡Despejen y saquen el brillo en ustedes e inviten al cielo a visitarlos! Entonces, Mis queridos hijos, Dios el Altísimo y Jesús, su Redentor, tomarán lugar en sus corazones y se mudará un amor maravilloso hacia ustedes que los cambiará a USTEDES y SU ENTORNO por completo de una manera positiva.

Que así sea, Mis hijos.

Los amo mucho.

Su Madre en el Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios.

Gracias, Mi hija. (Jesús también está aquí.)